Unfortunate events | Hyunsung ; Minsung

일곱

—...Entonces tienes que analizar la vida de tu pareja y hacer un informe. La profesora Kim lo llamó "¿Realmente conozco a mis compañeros?" Que bueno que me tocó Felix, es más transparente que... no sé. En fin... —se oyó un chillido del otro lado. —¡QUE SUERTE QUE TE TOCARA LEE MINHO! YO TAMBIÉN QUIERO~

—Okey, Minnie. Gracias por la información.

—Espera, pe-

—Chau.

Y colgó la llamada.

Seungmin puede ser serio y tranquilo, pero cuando algún ser vivo le llamaba la atención no había nada que lo detuviera de su locura.

Jisung soltó un bufido, y mientras comía un pastelito se preguntaba que era lo que haría con ese trabajo de analítica, lo estaba frustrando más de lo normal, y no hablaba del trabajo, si no de su compañero.

Era fin de semana y Jisung estaba tirado en el mueble, sus padres trabajaban hasta tarde, Hyunjin tenía entrenamiento aún, seguramente llegaría muy cansado a su casa y sólo lo llamaría, estaba muy aburrido.

Fue a la cocina a buscarse otro pastelito cuando escuchó el timbre resonar por su hogar, tomó el pastelito y se dirigió a abrir la puerta, siquiera pensó en preguntar quien era o ver por el ojillo de la puerta, simplemente abrió y su sorpresa fue inmensa al ver de quien se trataba.

—¡Lee Minho! p-pero, ¿qué haces aquí? —exclamó con sorpresa. —¿No eres una alucinación o sí?

—¿Qué hago aquí? Tenemos un trabajo juntos, ¡estoy listo para trabajar!

Dijo el mayor y luego entró al hogar de Han no sin antes decir "permiso" y sentarse en el mueble esperando por el menor.

Jisung aún estaba volviendo a la realidad cuando cerró la puerta y se dirigió a donde estaba Lee.

¿Por qué todos entran cómo perro por su casa?, pensó un poco molesto y se sentó al lado del mayor.

—P-Pero, ¿cómo sabes dónde vivo? Nunca te lo dije, además, ¡¿Por qué llegas sin avisar?!

El mayor sonrió ladino, de alguna forma lo ponía de buen humor cuando Jisung se ponía molesto, se veía tan lindo a su parecer.

—No tengo tu número, ¿Cómo voy a avisarte? —preguntó y sacó su celular. —Anota tu número, toma.

Jisung confundido agarró el celular del mayor, se sorprendió cuando vió que era un iPhone último modelo, era la primera persona que veía con uno, se agregó como contacto y le devolvió el celular a Minho, este sonrió triunfante lo que hizo que el menor frunciera el ceño.

—Y por lo de tu dirección... le pregunté a... ¿Felix? me lo dió sin titubear, así que pensé que estabas de acuerdo.

—¡¿S-Sin titubear?! A él... A él... —Jisung bufó frustrado, decirle a la persona que le gusta a tu amigo que le gustas está mal visto y Jisung lo sabía.

—¿Dónde haremos la tarea? —preguntó el mayor.

Jisung bufó con un puchero en sus labios.

—Sígueme.

Ambos subieron a la segunda planta y Jisung le pidió a Minho que esperara afuera de su habitación antes de entrar.

—Cristo... —exclamó Minho. —¿Tienes tantos secretos que esconder?

—¡Sí!

Minho escuchó un estruendo desde adentro y sonrió, seguramente estaba limpiando o algo así.

—Y-Ya puedes entrar.

—Con permiso.

Minho entró y sus ojos se abrieron un poco, no pudo limpiar tan rápido, todo estaba... extremadamente pulcro.

La habitación de Jisung no era tan grande como la de él, pero tenía un toque... hogareño y bonito, las paredes eran rosa pastel, su cama tenía fundas azules y el escritorio tenía muchas pegatinas pegadas por la madera igual que la laptop que se encontraba sobre este, tenía estantes pequeños pegados a la pared decorados con ramas de plantas falsas y libros encima, en el piso había una alfombra redonda con Patricio de Bob esponja, habían varios póster en la pared sobre cosas que no conocía, un pequeño baño y un clóset grande al lado derecho, también tenía muchas pegatinas.

Era muy... Jisung.

Jisung se sentó en su cama y le indicó al mayor que se sentara en la silla del escritorio.

—Entonces, lo que vamos a hacer es lo siguiente-

—Sí, ya sé. Un análisis sobre nuestro compañero.

—¿Q-Qué? ¿Cómo sabes?

—Felix me dijo.

—Bueno...

—Preparé una lista de preguntas que hacerte para escribir mi parte del informe.

Yo ni he pensado que voy a hacer, Jisung pensó mientras que se mordía el labio y abultó sus mejillas.

Minho lo miró confuso.

—¿Qué estás...?

—Ya vengo. —exclamó el menor.

Jisung salió de la habitación corriendo a hacer algo que Minho no tenía ni la menor idea. El azabache se levantó de la silla y empezó a observar el cuarto más de cerca, todo era muy bonito y bien cuidado, se acercó al clóset y cuando estuvo apunto de abrirlo Jisung entró con una barra de chocolate y dos latas de refresco.

—Ya estoy listo.

—¿Necesitas comer dulces para responder?

Jisung se sonrojó un poco y respondió: —E-Es que... me pongo nervioso y el chocolate m-me calma los nervios.

—Bien.

Minho empezó con pregunta triviales, como sus gustos, las cosas que no le gustaban, sus objetos favoritos y objetivos de vida, estaba muy preparado y eso sorprendió a Jisung.

—Mi película favorita es Harry Potter y el príncipe mestizo.

Minho asintió mientras escribía algunas cosas en su libreta y seguía preguntando.

Minho trataba de escribir y ver al menor a la misma vez, le parecía muy interesante, Han Jisung era una incógnita para él y eso lo emocionaba, tanto que no pudo contener una risita mientras veía al menor comer el chocolate como si fuera un hamster.

—¿De qué te ríes tonto?

—Nada.

A Jisung se le resbaló la lata de refresco de sus piernas cayendo al piso y Minho por instinto se movió a recogerlo sin notar que el menor había hecho lo mismo.

Sus manos eran tibias y delicadas, la lata se sentía fría, lo contrario a la mano de Jisung, quería seguir tocándola, su piel era tan suave y delicada, quería sentir cada parte de su piel contra sus manos, dibujarlo con sus palmas y examinar cada rincón de su cuerpo.

Entonces con su otra mano tomó la quijada del menor y lo estampó contra sus labios, eran tan suaves y abultados, quería probar más y más y más y-

Se alejó del menor, este lo veía con sorpresa y su cara estaba roja completamente.

—Mierda.

Exclamó cuando se dio cuenta de lo que había hecho, tomó sus cosas con rapidez, su cara se volvió caliente en segundos, su mente lo llevó a hacer una acción que seguramente haría que Jisung no le quisiera volver a hablar.

Se levantó rápidamente y no pudo ver a los ojos a Jisung. Se sentía avergonzado, sabía que el menor tenía pareja y sin embargo...

—Y-Yo me tengo que ir.

Dejó a Jisung en el lugar en un estado de confusión, su mente y cuerpo se desconectaron del mundo hasta que escuchó la puerta de la casa sonar al ser cerrada.

—¿Qué... acaba de suceder?

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© Soyruiii.

Los capítulos serán un poco largos apartir de ahora, pero no pasarán de las dos mil palabras, se los aseguro. Lo siento por la tardanza, publicaré algunos capítulos para enmendarlo T-T
La última escena se me ocurrió por una película que ví, que poco original, lo siento...