🖤Eres mi mejor pecado🖤

97.(me arriesgaré)

(TAEKOOK)

¿Que podría cambiar para recuperarte, o debería de hacer totalmente lo mismo?, ¿debería hacer lo mismo?; recordó todo lo que habi echo desde un principio, pero es que para empezar no esperaba que un día encontrase el amor de la manera más repentina y que con el paso del tiempo cresiera a tal grado de que no pudiese vivir sin él, pero que se viera obligado a raíz de los problemas.

Había vivido tanto con taehyung, que aún recordaba la primera vez que lo vio, habia pensado que era un loco por soportar tanto maltrato y aún que no lo entendía, debía de admitir, ya que la sorpresa se reflejaba en aquel brillo de sus ojos, que cierto deje de admiración comenzaba a surgir de sus entrañas y cuando lo vio salir, algo en él, no sabía que, era tan extraño pero se sentía bien; y cuando lo vio caer, ese algo lo impulsó a sostenerlo, y ahí estaba, admirandolo y ese algo que lo impulsó, lo sentía en su pecho golpeando con ferza.

Se removia de un lado al otro, mientras que con sus piernas golpeaba la cama con alegría ahogando aquel grito poco sutil que quería liberar, sentía su corazón bombiar rápidamente mientras los recuerdos llenaban su mente alejando la duda.

Recordaba cada cosa desde las buenas y también las malas desde luego; recordaba desde las veces que lo miraba, los detalles, los besos y caricias, también recordaba las noches en vela solo para mirarlo dormír y meterme en sus sueños y ahí, estar con él tomando su mano con firmeza mientras le prometía un juntos por siempre.

Recordaba ala perfección la primera vez que se sintió muerto, cuando se enteró de que te era un ángel, el más hermoso, más que los demás. Cuando taehyung no despertaba y cada minuto que transcurría sentía como las esperanzas se le iban y aquel odio que se había visto extinto, ahora surgía, sentía el odio crecer en su interior, la repulsión por un mundo insignificante y peligroso, por un idiota que se había atrevido a lastimar a su amor. Pero más que nada por él, por ser poco eficiente, un inútil el cual lo había permitido, merecía la muerte, se supone que fuera él quien proteja a tae, pero no, era taehyung quien estaba postrado en aquella cama tras protejerlo a él; cuando lo vio despertar siento todo velver a la normalidad y su mundo cobrar color, avía corrido a abrazarlo a besarlo, a resguardarse con él, lo sabía mientras el estubiera en su vida, estaría a salvó.

Al principio se llegó a preguntar que cosas malas cambiaría en esta nueva oportunidad por conquistar a tae, pero al recordar todo; cada cosa mala lo llevo a algo bueno, a momentos en dónde se sentía más vivo, más feliz, más enamorado; cada uno de esos momentos donde se sentía morir o inútil, lo llevaron a entender las cosas de una forma distinta, de una más llena de vida o color, sonidos, todo lo malo vivió con taehyung no merecía ser cambiado sino recordado tal y como había pasado pues cada grito lo llevo a un beso, cada llanto en el baño lo llevo a sentar a tae en el lavabo y besarlo rosandose el uno con el otro; cada peligro siempre lo llevo a él, cada noche que no durmió y qe se ahogo en su propia miseria, lo llevo a entender que tae no lo necesitaba a él, como tanto lo pensó era él quien necesitaba a taehyung y siempre estaría a salvó con él.

Nada estaba preparado, todo lo dejaria a la suerte, no era creyente de ella pero por tae podía intentarlo, miro aquel edificio frente a él, era un lugar modesto pero hermoso decorado con algunas luces amarillas en la entrada y un letrero de Open dando la bienvenida; sentí la emoción invadir su carne y sus piernas temblar levemente.

Acomodó su cabello por una última vez, suspiro y abrió la puerta. Adentro todo era un diferente, nada comparado con lo de afuera, habían cinco pianos en los cuales ya se encontraban niños tocando suavemente con sus deditos las teclas.

- Hola, ¿Que edad tiene tu hijo? -.

Jk miraba el lugar con asombro hasta que alguien le hablo.

- ¿Hijo? -. Frunció el seño.

- si -. Hablo el joven apuntando un letrero academia de piano para niños
Jk sonrrio, era algo de lo que no se había percatado.

- Si, bueno... yo requiero información -.
Miro al chico, tratando de verte de lo más normal posible.

- Bueno por el momento el profesor no está, pero puedo darte este folleto-.
Hablo el chico dándose vuelta para tomar un folleto de la pared, y volver a mirarlo extendiendolo.
- Esta es la información....-.
Jk dejo de prestar atención a lo que el chico decía, solo podía pensar en que al parecer el no tenía suerte y que taehyung no estaba en el local, tenía la certeza de que lo vería y hablarían.
-¡ Cuidado! -. Alertó el chico mientras que lo tomaba del brazo y lo alejaba de la puerta.
- ¿Se encuentra bien?-. Pregunto. Jk levantó la mirada al salir de sus pensamientos y miro al castaño.
- Profesor, el señor quería información para traer a su hijo -.

Jk sonrrio al mirar a taehyung entrar al local, hasta que el tipo hablo de nuevo. - ¿Hijo?, no tengo hijos, quiero tomar clases -. Se apresuró.

- pero es una academia de niños y hace unos momento usted dijo que...-.

- ¡No tengo hijos!-. Interrumpió al chico. -Y soy soltero, lo juro -. Miro a taehyung quien solo sonrrio.

- Está bien kuon-. Le tocó el hombro. - no me mal interprete es una academia para niños, no sé si...-

- ¡ pruevame!-. Tajo mirando a tae y suplicando con la mirada.

Tae lo miró, no entendía por qué suplicaba, pero se veía tierno.
-¿Por qué una academia de niños y no una normal?-.

Jk bajo la mirada y pensó como nunca en su vida lo había echo, pero que podía decir para no usar la frace primordial él, por ti, no sonaba algo lógico, bueno si, pero sonaría como un pervertido o acosador; le canto la mirada y dijo.
- paciencia -. Sonrrio apenado.

Jk tenia razón, la paciencia era lo primordial al tratar con niños y taehyung lo sabía de antemano, pues cuando más se lo esperaba los pianos estaban rayados o manchados, si no, los niños no prestaban atención o se la pasaban gritando y jugando y el tenía que tener paciencia y meter el orden, además de que si un niño no entendía algo respecto al tema se veía en la obligación de buscar maneras más fáciles de explicar. Tal vez sea de lento aprendizaje, penso tae. Suspiro y sonrrio.

- bien. Pero quiero que sepas que no es fácil tomar clases con niños gritando y corriendo a tu alrrededor -. Alertó tae. Y jk sonrrio.

- me arriesgaré -.