Delicate || T. S

06

El último día de grabación Selena invitó a sus amigas al rodaje. Alisha se cohibió por completo cuando en medio de una escena hizo contacto visual con Taylor, quien estaba sentada en la silla del director observándola con toda la atención del mundo.

Todo lo que pudo pensar es, «¿en serio?». A ese punto, deseaba con todas sus ganas solo un día sin toparse a Swift.

Terminó la escena final y corrió a los vestidores, se vistió con toda la calma del mundo y se tomó su tiempo para salir. Sasha ya estaba esperándola con unos papeles en mano.

—Estudia eso, tendrás una audición en una semana. Y también necesito que te tiñas el cabello —señaló. Kellen asintió, dispuesta a obedecerla al pie de la letra.

—Son muchas hojas —observó.

—Si, es un papel importante. Tengo un buen presentimiento.

Alisha asintió mientras la seguía por el set. Ambas chicas encontraron a Selena y corrieron a abrazarla.

—¡Estuviste asombrosa! No puedo esperar para ver el resultado —exclamó la morena. Se notaba genuinamente orgullosa y Alisha no podría estar más feliz por eso.

—Gracias por la oportunidad.

—¡Deja de darme las gracias! —dijo entre risas, separándose para dejar que saludara a las demás chicas. Kellen se dió cuenta que Taylor no iba acompañada de Rory, algo que no era usual.

Swift rodó los ojos en cuanto Kellen arqueó una ceja. Esta vez, los gestos de ambas no pasaron desapercibidos para Gómez, quien se asombró por dicha interacción.

—Hey, Alisha —la llamó—, tenemos que ir a celebrar, y esta vez no puedes negarte. ¡Hay tanta gente que quiero presentarte!

Sasha ya había sermoneado a Kellen y esta había aceptado ir a todos los eventos posibles. Tenía que empezar a crear contactos y ganas popularidad si quería hacerse de un nombre.

—Por supuesto —le sonrió—, pero sólo si invitan a Austin.

Escuchó el arrullo de burlas mientras evitaba con todas sus fuerzas no mirar la reacción de Swift, quien por supuesto se había molestado.

Unas horas más tardes se encontraba en el auto junto a Gigi, quien no cabía de la emoción. Kellen siempre había sido el alma de las fiestas pero últimamente se sentía fuera de lugar; sabía que ese era un mundo al que no pertenecía.

Los flashes la cegaron en cuanto puso un pie fuera del auto. Sintió que entrar al club les tomó una eternidad pero cuando finalmente lo lograron, fue recibida por una música suave y agradable.

Hadid no la dejó observar el lugar, solo tomó su mano y la encaminó al segundo piso, que era el área reservada. Alisha se sorprendió al ver cómo nadie cuestionaba su presencia, solo las dejaban entrar.

—¡Mis rubias favoritas! —gritó Gómez. Ambas llegaron a la mesa donde estaban los demás.

Kellen trató de memorizar todos los nombres que Selena le decía: Alana, Zendaya, Hailee, Karlie... eran demasiados como para recordar. Además, apenas y podía ver sus rostros a través de la oscuridad.

Pero por supuesto pudo distinguir el de Taylor. La cantante estaba conversando junto a su hermano en la esquina del sofá, riendo y bebiendo sin prestar atención a lo demás.

—¿A quien buscas? —preguntó Selena, asustando a Kellen.

—A Rory, pensaba saludarla, pero no la veo.

—Oh, no está aquí. Ella y Taylor terminaron ayer —la forma tan casual en que lo dijo sorprendió a la rubia.

Según lo que había visto no eran la pareja perfecta, pero Swift le aseguró que era algo real. Además, la mirada que Gómez le estaba dando le hacía creer que insinuaba algo, seguramente referente a lo que se rumoreaba en redes sociales sobre su supuesto amorío.