Playa azul

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No les voy a contar sobre mi atuendo, es demasiado ridículo y rosado. Solo les diré que estoy en una playa azul.
¿Qué hago aquí? ¿Cómo llegue?
Se los dejo a su imaginación.

- Te vez bien.
- Eso no justifica nada. No intentes repararlo.
- Venga, es un perfecto día de sol como para que lo arruines con tu mal humor.
- Ni caso te voy a hacer.
-¿¡Quieres que te bese de nuevo acaso?!
- ¡Quieres morir!
- No.
- Entonces compórtate.

Hizo un esfuerzo enorme por no echar a reír a carcajadas.

- Bueno. Vamos a tener buena vibra si...

Silencio mientras avanzo a su lado.

El rey de las aguas hoy viste un manto bastante decente, para justificarlo. Aunque, el cielo sigue de mal humor y esta vez no lo culpo. Bajo el me siento responsable.

Caminamos en silencio. Nuestros pies se van hundiendo en la fina arena, como nuestras vidas. Poco a poco, nos acercamos a la blanca espuma de mar. Nos sentamos a ver como nuestros dedos se mojan con ella y a observar la inmensidad.

John mira el horizonte con ojos hambrientos.  Inmerso en sus pensamientos. Dedicándome el poder de mirarlo a escondidas.

Su mano se acerca, hundiéndose levemente, como queriendo abrazar mi muñeca.

- Es la primera vez que siento algo por una chica.
- Es la primera vez que no hago nada al respecto.
- No digas eso.
- Mejor la verdad que la mentira John.
-  Nosotros no decidimos a quien queremos y no queremos.
- Yo no soy quien para marcar tu muerte en un almanaque, ni para acortar tu tiempo y aun así lo hago, presa de los sentimientos que no debería tener. Soy inmune a ellos, soy inmune a todos y aun así, me siento débil y frágil, como ustedes.
- Mi muerte es algo irremediable, el cáncer no tiene cura y el mío es terminal. Creo habértelo dicho ya.
- Tienes salvación y te condeno. Tienes esperanzas, vida y te arrastro conmigo. Ahora entiendo su juego. Ahora entiendo para que fui creada. Simplemente en estos momentos, quisiera morir.

Suspiró. Me abraza. Como si quisiera que lo olvidara todo y que cambiara mi forma de ver las cosas. Que aceptara todo.

Pero no es tan fácil cuando tienes las manos manchada de la sangre de John.

Anglox: DespertarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora