Cap 2

2.7K 280 4
                                    

Rosalie

-Bienvenida-Patrick me abraza cuando salimos de la sala de juntas-. ¿Cómo estás? Creí que estabas en una misión.

-Dejé que mi capitán se encargara-me encojo de hombros-. Christopher me llamó, tenía que venir.

Mi hermano es solo tres años mayor que yo, así que siempre estuvimos bastante cerca, bastante unidos. Al menos hasta que él aceptó venir a Londres desde Rusia para encargarse de la central.

Christopher se hizo cargo de Rusia antes que yo, y cuando tomé mi lugar hace casi cuatro años me aseguré de que la central mejorara con todo lo que mis hombres y yo podíamos ofrecer.

Pero entonces mi mando se expandió a Alemania, Polonia y Turquía por petición de los presidentes de dichos países, lo que me colocó en la mira de la prensa y de cualquier otro soldado que no me conociera.

Es difícil, he dejado sangre, sudor y lágrimas en esta rama judicial. De forma muy literal. Y cuando supe que el siguiente paso era seguir con los Morgan a la cabeza de la FEMF no pude decir que no.

Yo no quiero ser ministra, es un peso que no deseo, pero mi hermano desea ese poder y... como siempre, no puedo hacer más que apoyarlo incondicionalmente, como él lo ha hecho conmigo durante toda mi vida.

-Y se te agradece por tu sacrificio-Christopher tira de mi cabello cuando pasa por mi lado y golpeo su brazo escuchándolo reír-. Ven.

Me quita de los brazos de Patrick para acercarme a él, pasando su brazo por mis hombros mientras caminamos por la central.

-¿Qué vas a decirme?-enarco una ceja-. O mejor dicho... ¿qué vas a pedirme?

-Manda a Gelcem a Francia-pide y enarco una ceja-. Es una carga para la élite, no tiene un buen entrenamiento y ni siquiera debería estar en Londres...

-Y es el ex novio de Rachel-completo y rueda los ojos-. Si... ¿recuerdas que tengo ojos y oídos en todos lados, cariño? No vuelvas a intentar mentirme.

Resopla.

»Escucha-miro alrededor antes de detenerlo y mirarlo a la cara-, si saco a Gelcem, debo sacar a Gema y Liz; y por lo visto, Gema es tu escalón de oro. Además, ambas son parte de la misión.

-Gema es...

-Del nivel de mis cadetes-lo interrumpo-. Gema podrá ser muy buena para...-dudo- ¿tu campaña?

Rueda los ojos y río.

»Ella podrá ser buena en lo que sea que quieras creer, pero tiene el nivel de entrenamiento de mis cadetes-me encojo de hombros-. La realidad es la realidad, y no puedo simplemente mover gente porque si. Necesitamos el apoyo de Gauna...

-Puedes obtenerlo.

Respiro profundo.

Si, puedo. Gauna confía en mi criterio, y sin duda creo firmemente que Gema y Liz están sobradas en esta central, pero están dentro de la misión y no voy a arriesgar nuestros resultados.

-Termina la misión en un mes-propongo-, dame el resultado que deseo y entonces yo te premiaré moviendo a Stefan, Liz y Gema a otras centrales.

-Trato-asiente

Daría mi vida por la de mi hermano, pero sé que sus decisiones suelen ser impulsivas y a veces erróneas.

Por eso yo siempre me vi obligada a tomar el lugar opuesto. Siempre calmada, con cabeza fría y con la estrategia por encima de mis deseos.

«Bueno, de vez en cuando»

-Oigan-Patrick nos alcanza-, ¿qué harán esta noche?

-¿Dormir?-enarco una ceja y rueda los ojos-. ¿Por qué?

-Iremos a tomar un trago, Simón lo necesita-dice, y la mención de Simón capta mi atención-. Bien, ¿quieres disimular un poco?

-¿Disimular qué?-reanudo el paso, mirando mi reloj para verificar la hora en la que Marissa debe llegar a Londres

-Disimular que sientes algo por él aún-tanto mi hermano como Patrick me alcanzan-. Ninguno de nosotros entendió la razón para dejarlo, ni siquiera él.

-No es algo que deban entender porque no es su problema-enarco una ceja en dirección al Mexicano-. ¿Desde cuando les importa tanto? No les importó en ese momento.

-Corrección-levanta un dedo-, te fuiste a Rusia, te alejaste para no darle explicaciones a nadie y cuando Christopher preguntó le cerraste la puerta de tu habitación en la cara.

Río.

-Por metiche-me encojo de hombros

-Vamos, Rosie, Simón dejó que Christopher lo golpeara por meterse con su hermanita-me recuerda y aprieto los labios-, merece una explicación.

-Patrick-ruedo los ojos-, pasó hace... seis años. Ya no tiene importancia. Simón y yo seguimos adelante, ambos.

-Si, te casaste y recientemente te divorciaste, ¿cómo salió eso?

Me tenso.

-No menciones a Tristan-siseo-. Si, me casé y me divorcié y no es el maldito problema de nadie, igual que mi maldita relación con Simón hace seis años. Ahora, si me disculpan, yo si trabajo.

Me adelanto, ignorando sus llamados mientras saco mi celular y comienzo a teclear un mensaje a mi amiga, pidiéndole que me llame cuando su vuelo aterrice.

First and Only Love [Simón Miller]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora