jugador ⸺enzo fernández, au.

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ya había pasado una semana desde que las chicas habían tenido una experiencia bastante rara, descubriendo actividades nuevas que las dejaron con diferentes puntos de vista. jazmin por un lado no la había pasado del todo mal, ya que ese mismo finde lo terminó excelente en uno de sus boliches preferidos y eso aunque su noche al principio fue en picada. por el otro pilar estaba de diez, la pasó como nunca ya que conoció gente que la hizo sentir muy cómoda y bien recibida, tanto así que había pegado buena amistad con el nueve de river. si, con julián. haciendo que su morocha amiga le dé una gran explicación de porque él no era para ella, claramente fue todo muy clasista, por lo mismo la ojiazul no la tomó en cuenta.

jazmin habló un par de veces más con enzo por instagram, él a veces la hacía reír con sus ocurrencias de chabon pobre, sin dejar de lado todo el chamuyo, obvio. respondiendo historias, likeando fotos y comentando. pero por supuesto que eso no cambiaba el mal criterio que tenía la chica sobre él, claro que no.

lo que más le sorprendía del chico es que a pesar de ser una figura pública, el se mostraba en sus redes totalmente como lo había conocido en persona, lo único que diferenciaba su insta al de un villero normal era la cantidad de seguidores y las grandes repercusiones de sus fotos e historias por todos lados, tal así de él como de sus amigos. si había algo que enzo no se daba cuenta, era la cantidad de personas que lo querían por ser una estrella actual en su equipo. eso y que en realidad no le importaba mucho caerle bien a todo el mundo, era lo que era y por ser alguien reconocido ahora no iba a cambiar ni caretearla como muchos que se encontraban en el mismo ambiente. no iban de la mano enzurri y ser un gil careta, otra cosa que lo tenía muy fiel a sus raíces era el hecho de que siempre volvía al barrio y cada vez que podía ser quedaba con su familia y amigos de ahí, los disfrutaba a no dar más.

por más que a jaz le cayera mal enzo, al punto de que le parecía insoportable verlo, se tomó el tiempo de analizar todo eso sobre el futbolista.

ahora mismo se encontraba con su amiga en la gran sala de su casa, tomaban mate y comían unas facturas que habían comprado en la panadería de a la vuelta.

⸺amiga no sabés, estuve hablando con julian, viste.⸺ habló pili a su acompañante, mirándola y esperando una reacción, pero solo recibió un "ahhh, ¿y?" por parte de la otra. ⸺y nada, estuvo estos días invitandome a la cancha para después salir juntos, onda de joda.

⸺ya te dije lo que pienso de ese junte. pero gorda, si a vos te gusta y querés ir nadie te detiene.⸺ la mayor dejó el termo a un lado y tomó las manos de su mejor amiga con una sonrisa sincera en su cara. ⸺sabes que cualquier cosa yo estoy para vos.

⸺bien, buenisimo.⸺ la correspondió y le devolvió la sonrisa contenta. ⸺porque ya le dije que sí, y también que ibas a ir conmigo... ⸺levantó ambas cejas mientras contaba.

⸺yo te tengo que matar a vos, pili.⸺ soltó el agarre que tenía y se llevó los dedos a sus ojos verdes, los fregó con fuerza intentando calmarse. ⸺¿cómo se te ocurre? si te invitó a vos.

⸺pero ni en pedo voy sola, no se como manejarme en una cancha... encima me dijo que el amigo está re obse con vos⸺ sabía a quién se refería. ⸺dale jaz, haceme el favor, porfi.⸺ alargó la última vocal de la palabra.

⸺¿y justo yo sí sé manejarme, pilar?⸺ preguntó con un claro sarcasmo, ya rendida. su amiga había confirmado la asistencia de ambas. ⸺¿y cuando es?⸺ volvió a preguntar.

⸺este finde, mañana.⸺ obtuvo una afirmación como respuesta. la pelinegra abrió los ojos y suspiró, entonces pili volvió a hablar. ⸺no tenemos que comprar ni gastar en nada, ellos se encargan de todo, julian ya me lo confirmó.

el "ellos" le retumbó en la cabeza, volvería a verlo cuando era lo que menos quería, sentirse agobiada por un negro. pero bueno, al menos no tenían que preocuparse por buscar entradas para un buen lugar en las tribunas.