✧ Capítulo 29✧

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-Pero que pasó aquí?

-Abuela....no me sale...

Coloco mi cabeza sobre el desayunador , realmente soy un desastre, parece que por la cocina pasó un tornado de harina.

-Que se supone que intentas preparar?

-Las bolitas de queso con carne adentro que papá suele prepararme.

-Querida, tu padre una vez me enseñó y creeme que aún sabiendo toda la receta no me salen, son algo muy difícil que tú padre inventó, por eso solo él sabe prepararlas.

-Pero él siempre las prepara para mí, quiero hacerlo ésta vez por él.

-Tu padre te adora, así que...yo pienso que apreciará más el hecho de que hayas intentado hacerlas.

-Me ayudas con el pastel?

-Claro que si, fué buena idea decirle que buscará en todos los salones de la ciudad para que averiguara dónde sería su fiesta.

-Le tomará mucho tiempo encontrar su salón de fiestas.

-De todas maneras hay que apresurarnos, el tiempo se irá volando.



Rato después....



-Te lo dije, tu padre ya está llamando.

Mi abuela me muestra el teléfono donde claramente muestra el nombre de registro de mi papá.

-Menos mal que ya estoy lista, lleva el pastel y la comida al edificio yo iré por papá y después lo llevaré a su fiesta.

-de acuerdo.

Con ayuda de Fredy la abuela salió de el departamento.

Mi teléfono sonó ésta vez.

*Llamada*

-Hola papi.

-De verdad eligieron un salón de fiestas o no? Ya me cansé de buscar, sin contar que ya busqué en todos los salones de la ciudad y he regalado demasiadas fotos.

-Dime que al menos te dieron regalos.

-Unos cuántos.

-Genial, más peluches para mí, ven a casa, yo te llevaré a tu fiesta papi.

-Bien, en un momento estaré ahí.

*Fin de la llamada*

Bajé del departamento a esperar a mi papá,  llegó poco después, hice que se bajara y le puse una venda en los ojos, lo subí al asiento del copiloto y yo me senté al volante.

-No tienes licencia para conducir.

-tranquilo papi, puedes pagar la multa, además voy acompañada de un adulto, no hagas trampa.

Conduje por la calle más corta hacia el edificio, llegamos en muy poco tiempo.

-No te bajes y mucho menos te quites la venda papi, enseguida te ayudo a bajar.

-Bien, lo que mi hija diga.

Rodeé el auto, abrí la puerta papá bajo algo inseguro.

-Estás listo papá?

-Si.

-Muy bien.

Quito la venda de sus ojos mostrando la maravillosa vista.

Hija Del Mejor Amigo De Mi Padre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora