7

212 23 9
                                    

Esa noche los Osorio Bondoni se preparaban para salir, les gustaría estar juntos pero sabían que necesitaban un rato para hacer actividades separados. Ya estaban afuera del hotel para irse por sus rumbos.

-Diviertanse, hijos- dijo Joaquín dándoles un beso en la frente a cada uno-. Cualquier cosa estamos en comunicación.
-Si papá- dijeron los tres y comenzaron a alejarse-. ¡Los amamos!
-Giulietta, no bailes con nadie más que no sean tus hermanos- dijo Emilio.
-No prometo nada- dijo Giulietta.

Emilio reía por esas respuestas de su hija, siempre bromeaba con ella pero sabía que siempre se cuidaba. Sonrió cuando Joaquín rodeó su cuello con sus brazos y juntó sus frentes mirándolo con amor, el ambiente estando afuera del hotel y en la playa lo hacía mucho más romántico.

-¿Por qué me miras así?- preguntó Emilio sonriendo.
-¿Te das cuenta que como papás tenemos diferente personalidad?- dijo Joaquín-. Tú eres el papá celoso y yo el papá preocupón.
-Lo sé, pero nuestros hijos saben que lo hacemos de broma y ellos son muy inteligentes para cuidarse.
-Ay mi amor, no me equivoqué al casarme contigo.

Ambos se besaron con mucho amor, ese mismo que se seguían demostrando desde que eran jóvenes. Luego del beso se quedaron abrazados por un momento.

-Oye, ¿y si regresamos a la habitación a “cambiarnos de ropa”?- dijo Emilio al oído de su esposo.
-¡Emi!- dijo Joaquín riendo-. Hoy vamos a divertirnos fuera, ya tendremos tiempo de hacer el amor.

Se dieron un besito y continuaron caminando. Caminaban por las calles del lugar, compraban algunas cosas y comían. Emilio había comprado dos collares de pareja y le colocó uno a Joaquín, este sonrió.

-Ay mi amor, te amo demasiado- dijo Joaquín sonriendo con ternura.
-Pasarán los años y te seguiré amando igual que cuando éramos jóvenes- dijo Emilio dándole un beso-. ¿Vamos a sentarnos a la vista del mar?
-Claro.

Ambos se sentaron en una banca que daba la vista al mar. Era una hermosa noche y bajo la luz de la luna frente al mar se encontraba un feliz matrimonio abrazado.

-Estoy es tan lindo- suspiró Joaquín.
-Recordé nuestra luna de miel- dijo Emilio sonriendo-. Ya casi 16 años casado contigo.
-Y formamos una bonita familia.
-¿Qué estarán haciendo los halconcitos?
-Divirtiendose mientras nosotros nos amamos.

Se besaron con mucha alegría y amor, ya no había nada ni nadie quien arruinara su feliz matrimonio.

Familia Halcón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora