- Capítulo XXXVIII -

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Byron regresó a la habitación de hospital empujando una silla de ruedas completamente nueva y con una bolsa de plástico. Valeria sonrió cuando lo vió entrar, estaba deseando volver a su casa.

"Toma hija" Dijo el hombre pasándole la tarjeta de crédito a Yuri.

Yuri sonrió metiéndola en el bolsillo y se agachó delante de la silla "¿Cómo se pone el soporte para la pierna?".

Byron se agachó a su lado "Me lo explicaron en la tienda" El hombre empezó a mover distintas pestañas mientras Yuri prestaba atención y poco después el hombre colocó el soporte en su lugar.

Cuando estuvo montada los dos se irguieron, Yuri se sentó en la silla alzando su pierna izquierda y colocándola en el soporte.

"¿Qué haces amor?" Dijo Valeria con una sonrisa desde la cama.

"Estoy probando si es cómoda" Dijo Yuri moviendo su trasero de izquierda a derecha haciendo que se acomodaba.

"¿Y qué tal? ¿Es cómoda?" Preguntó Valeria "Comodísima" Contestó Yuri.

Emma volvió a entrar en la habitación y sonrió al ver a Yuri en la silla "¿Quieres que te busque una cama libre?".

"No gracias" Dijo Yuri levantándose de la silla.

"Ya está todo listo" Dijo la mujer con varios papeles en la mano "Tu alta médica" Dijo mirando a Valeria "Y la lista de medicaciones para cuando se le acaben las que les dimos antes".

Yuri asintió tomando todos los papeles.

"Si tienes alguna duda" Dijo ahora mirando a la mujer de ojos oscuros y señalando un número de teléfono "Puedes llamar a la recepción, las enfermeras y yo te ayudaremos en lo que sea".

"Gracias de verdad" Dijo Yuri y sin dudarlo abrazó a la mujer haciendo a Valeria reír desde la cama.

"De nada" Dijo la enfermera cuando se separaron.

Yuri sonrió y comenzó a empujar la silla hacia los ascensores, pero primero pararon en el mostrador de enfermería para despedirse de las trabajadoras que estaban de guardia.

"No puedo creer que esté saliendo de aqui" Dijo Valeria mientras bajaban en el ascensor.

Yuri sonrió viendo a su novia tan emocionada.








***

El viaje en coche fue rápido, la furgoneta adaptada que Byron contrató permitió que Valeria ni siquiera tuviera que bajar de la silla, simplemente la subieron al vehículo con un elevador y fijaron la silla dentro con cinturones.

"Un dinero bien empleado" Dijo Yuri mientras veían el coche irse, las había dejado en el garaje de su edificio para así poder ir directamente al ascensor.

"Estoy de acuerdo" Dijo Valeria.

Yuri recorrió el familiar camino hasta su departamento y Byron se adelantó para desbloquear la puerta con su llave. Cuando entraron toda su familia las estaba esperando.

Mia caminó hacia ellas y tomó la mano derecha de Valeria, su brazo izquierdo descansaba sobre su pecho en un cabestrillo.

"Hola mami".

"Hola mi vida" Dijo Valeria tirando de la mano de Mia para acercarla más a la silla y besar su frente.

"No queríamos agobiarte" Dijo Josué "Ya nos vamos, pero queríamos darte un beso, estamos muy contentos de que hayas regresado a la casa".

"Gracias" Dijo Valeria sin soltar la mano de su hija.

Los hermanos de Yuri se acercaron a la silla, se agacharon al lado de Valeria para besar sus mejillas. Máximo hizo lo mismo y después Omaira.

Secretos | Adaptación YuleriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora