Sombras De Engaño © [+18]

X. El Juego del Monstruo

SCOTT

Caminaba entre los árboles, con el susurro del viento como único compañero en mi travesía nocturna. Las cartas, esas notas inesperadas que llegaron a mis manos, me tenían sumido en un mar de incertidumbre. La luz de la luna se filtraba entre las ramas, creando un juego de sombras en el suelo cubierto de hojas secas.

Las palabras en las cartas resonaban en mi mente, un enigma que parecía esconder más de lo que revelaba. Cada línea, cada palabra, era un rompecabezas que me instaba a descifrar su significado. 

¿Quién las enviaba? 

¿Cuál era su propósito?

Me detuve en un claro, la claridad lunar iluminando las cartas entre mis manos. El papel crujía mientras lo sopesaba, tratando de encontrar pistas ocultas en la tinta. Un sello desconocido marcaba aquel misterioso mensaje, como un sello de secretos que se resistían a ser revelados.

El bosque, en su serena oscuridad, se convirtió en mi confidente mientras intentaba descifrar la trama de estas cartas. Cada paso que daba era un acercamiento a la verdad esquiva que se escondía en las sombras. La urgencia de comprender aquellos enigmas guiaba mis pasos más allá de las hojas crujientes y los árboles que parecían susurrar secretos.

Fruncí el ceño, concentrado en el desafío que se extendía ante mí. La noche guardaba sus secretos, y yo estaba decidido a desentrañarlos, sin importar cuán intrincado fuera el laberinto de misterios que me rodeaba.

Mientras exploraba las profundidades del bosque, mis pensamientos enredados en el enigma de las cartas, una figura desconocida emergió entre los árboles. Su presencia era inesperada, y su mirada penetrante parecía conocer más de lo que mis palabras podían expresar.

—Scott, ¿verdad? —dijo el extraño con una seguridad que me desconcertó.

Asentí, con la guardia en alto. 

—Sí, pero ¿quién eres tú?

Una sonrisa enigmática jugó en sus labios, como si estuviera a punto de revelar secretos guardados en las sombras.

—Soy alguien que sabe más de tu familia de lo que podrías imaginar. ¿Las cartas te han llevado hasta aquí?

La sorpresa me paralizó por un momento. ¿Cómo podía este desconocido conocer mi conexión con las cartas y, más aún, mi relación con mi familia?

—¿Quién eres y cómo sabes todo esto?

Él se acercó con pasos seguros, como si conociera el terreno tanto como las historias que guardaba.

—Digamos que mi conocimiento se extiende más allá de lo tangible. Tu familia tiene un pasado intrincado, Scott, y las sombras que buscas revelar son solo el comienzo.

La intriga y la desconfianza bailaban en mi interior. 

¿Podía confiar en las palabras de este extraño que parecía leer en mi historia como si fuera un libro abierto?