"𝙽𝚘 𝚎𝚜 𝚍𝚎 𝚝𝚞 𝚒𝚗𝚌𝚞𝚖𝚋𝚎𝚗𝚌𝚒𝚊"
Scara caminaba por los pasillos junto a su anterior tutora, nahida
Estaba en su teléfono escribiéndole a Childe( su único amigo) comentandole como odiaba su situación actual
El intentaba calmarlo o hacerle ver algún lado positivo pero terminó empeorando las cosas
Scara teniendo un humor terrible, ahora estaba mil veces peor
Suspiro tomándose el tabique de su nariz
Pensó seriamente el huir, pero descartó esa idea casi de inmediato, su tutora lo vería con ojos de tristeza, no quería verla asi
Volvió a suspirar, sintiéndose más y más estresado
Un rato después guardo su teléfono y se cruzó de brazos, viendo a todo lo que se movía con odio
Mientras nahida que caminaba a su lado, le deseaba una feliz tarde a todos
Miro hacia su dirección,ella le regresó la mirada junto a una sonrisa amable
En que piensas kuni? - detuvo el paso por un momento, mirando de forma atenta a su menor
Por qué me tuvieron que cambiar de tutor? , tu eres la mejor de todos! -se quejó,haciendo un pequeño berrinche, pero al darse cuenta de lo que había admitido, quedó congelado con un rubor de pura vergüenza
Nahida lo miraba con una gran sonrisa de felicidad, comenzando a hablar un poco con el, sabiendo lo que le costaba expresarse, no quería arruinar el momento
Scara agradeció su acción,quedando totalmente en silencio, prestándole atención
Unos minutos después ambos estaban solos
Era horario de salida para aquellos suertudos que sacaban buenas notas
Por supuesto, el no era uno de esos
Pero nahida seguía a su lado
Scara bajo la mirada para ver directamente a su anterior tutora, sentía curiosidad
Por qué vienes conmigo? -pregunto, intentando sonar lo más desinteresado posible, cuando la verdad tenía gran curiosidad
Ella soltó una pequeña risa
Bueno... No podía dejar a mi alumno favorito solo! No quiero que tengas un profesor gruñon, deseo que estés bien -sonrió de forma maternal, acariciando la espalda del menor
El abrió los ojos y se quedó pasmado por unos segundos, observandola
En realidad era capaz de llorar ahí mismo si ella seguía hablando
nahida volvió a reír
Decidiendo dejar en paz aquel tema
Hasta si le costaba admitirlo
Ella lo hacía sentir mejor
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desde el principio - Kazuscara
Romancedos estudiantes, uno castigado y el otro obligado Ahora tenían que verse por más de dos meses un rebelde sin causa y un alma pura quien diría que las cosas se tornarian bastante amorosas?