Exterminio: El Comienzo (En Edición)

Capítulo Trece:

El interior del lugar está lleno de sucio, las mesas están cubiertas por una gruesa capa de polvo y la pintura de las paredes está con un aspecto de haber sido derretida por el tiempo, cubiertas de moho y manchas.

Las máquinas están oxidadas y posiblemente los tornillos también, los cables deben estar muy deteriorados, las paredes están heladas por el ambiente frío y siniestro del lugar.

En la cocina, los fogones están oxidados y con mucho polvo, y los cuchillos y otras herramientas están cubiertos de hollín. Todo el sitio tiene un olor a podredumbre, las mesas están cubiertas de un grosor de polvo acompañado por algunas telarañas y roedores que corren entre la basura del sitio.

—¿En dónde dormiremos?, ¡estoy cansada! —Coloca April su cabeza sobre mi hombro.

—¿Encontraste algo que nos sirva? —Me alejé de ella.

—¡Siento que me estás evitando! —Se cruza de brazos.

—¿Por qué te evitaría? —Continuó buscando algo útil.

—¡No lo sé!

—¡Entonces no hagas preguntas estúpidas pelirroja! —Abro una gaveta entre los estantes de la cocina y me encuentro con una escopeta, la analizó bien y noto que a pesar del tiempo si puede ser utilizada.

—¿Provocó algo en ti verdad? —Me volteo en su dirección y le colocó la escopeta en el pecho.

—¡Busca un lugar donde descanses, yo continuaré buscando algo útil!

Paso por su lado y salgo de la cocina; luego de revisar todos los lugares del centro comercial, excepto el primer piso, para no tener ningún inconveniente con la planta carnívora.

Camino hacia donde escuchó los latidos de April y su olor, al llegar al sitio en donde se encuentra la puedo ver sentada en el suelo mientras que observa una fogata hecha por ella, me siento a su lado.

—¿Encontraste algo? —Inquiere, deja caer su cabeza sobre mi hombro.

—¡No!, intenta descansar mañana será otro día largo—confieso, veo como se aleja de mí y se acomoda para dormir.

Me acurruco cerca de ella, ambos sabemos que mañana será otro día lleno de peligros y desafíos. Cierro los ojos y me preparo para lo que vendrá; a pesar de que duerma mi cuerpo se mantiene alerta ante cualquier ataque hacia nosotros.

El eco de nuestras propias respiraciones rompen el silencio de la noche, pero no duró mucho tiempo, ya que de pronto un sonido distinto rompe la quietud de la noche. Es un ruido como si fuera el crujir de huesos, pero con un tono mucho más fino, April se despierta al escuchar el sonido y me mira con una expresión de miedo.

—¿Oíste eso? —Pregunta con temor en su mirada, le hago señas para que permanezca allí.

Me levanto rápidamente y miro a mi alrededor, alerta; el sonido se repite, esta vez más cerca, sacó una daga de mi bota y me preparo para enfrentar lo que sea que esté acercándose.

El sonido se escucha cada vez más fuerte, ya no es el sonido de un simple crujido de huesos, es más como el sonido que haría una tarántula al caminar sobre la tierra, el ruido se hace cada vez más fuerte. April y yo nos preparamos para lo que sea que se acerque a nosotros.

De repente aparece una silueta en la noche, se acerca lentamente a nosotros, varias sombras aparecen, es como si fueran más de uno. La silueta comienza a mostrar más detalles, su figura es pequeña, pero sigue siendo oscura.

Sus pies parecen muy finos y parece tener muchos brazos. ¿Un insecto gigante?, es la única cosa que me viene a la mente.

El insecto gigante continúa avanzando hacia nosotros, mientras que cada vez se hace cada vez más grande y más definido, ahora podemos verlos con claridad, es un ser humanoide, con unos ojos enormes y una piel muy delgada, como si fuera hecha de seda.