Jisung despertó la habilidad de la telequinesis a través de su inteligencia, terminando siendo reclutado a la mágica escuela donde conocería a su amor.
su amor mágico.
color, fecha y color de cabello no relevante
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Todo se detuvo en el mayor de los tres. Miraba los hermosos guantes blancos para el joven subió que mantenía sus manos lejos de cualquier cosa.
Jisung; su compañero, se aseguraba de mostrar los estilos que más le favorecian al su contemporáneo, escuchando los pequeños quejidos al no ser lo suficientemente lindo para su gusto.
Quien se detuvo, fue Seo. Su mente comenzó a ser golpeada con imágenes, como si de una película se tratara, eran borrosas y confusas. Sintió cómo las personas se detenían a su alrededor, nadie a parte de él entendia que sucedia.
Él mismo lo provocaba.
Miró con curiosidad a sus amigos detenido en alguna posición donde Jisung comentaba algo y Felix en silencio escuchaba. Sin saber que hacer, camino hacia sus amigos y tocó con cuidados el hombro de Jisung, de aquel joven de cabello negro y algo ondulado, provocando que imágenes llegaran tan rápido que no logro saber de qué se trataba exactamente.
Veia Jisung, personas desconocidas, humo verde, escuchaba a profesor y miles de lugares que no conocía.
El tiempo se culminó y con ella las visiones, provocando que Seo miraba confuso a su compañero que pareció extrañado con aquellos toques.
—¿Todo bien, Bin?
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—Hey, hola —Seungmin, aquel compañero que parecía haber estudiado con ellos toda la vida, se acercó a ellos, casualmente se encontraba por ahí y con amabilidad decidió saludar a quienes conocias.
Pero, después de aquella visión, Bin no tenía buena espina en él; tal vez Jisung y felix estaban hablando con tranquilidad, pero Changbin no deseaba acercarse.
Y, para su desgracia, Seungmin lo había notado.
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