Capitulo 20. - Entregados

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La casa Hastings de Londres estaba a tope con la cantidad de invitados a la recepcion tras la intima ceremonia en la iglesia. La musica suave llenaba el ambiente y amortiguaba el ruido de las conversaciones que la alta sociedad mantenia. El tema principal: Penelope y Colin.

Como era posible que la solterona de la sociedad hubiese podido atrapar al joven Bridgerton? Se sabia que ambos mantenian una buena amistad pero nadie se espero que eso se transformara en una union marital.

Los ahora esposos se encontraban en medio del salon; abrazados mientras recibian las felicitaciones de los invitados mientras que Violet y Portia se encargaban de que todo fuese saliendo a la perfeccion. Eloise y Daphne estaban al pendiente de que Penelope no se sintiera mal durante la recepcion y habian organizado una ruta de escape si ella legara a necesitar devolver algo de lo que comiera.

Cada uno tenia un papel a desempeñar durante la celebracion y Penelope estaba agradecida por toda la ayuda que estaba recibiendo. La musica se detuvo y los recien casados vieron como Anthony pedia silencio en el salon y se hacia un lugar en el descanso de las escaleras:

"Atencion" -dijo en un tono fuerte haciendo que los invitados voltearan a verlo- Quiero proponer un brindis por mi hermano y su guapisima esposa. Siempre supimos que serias una Bridgerton, Penelope y todos en la familia estamos felices de que finalmente Colin abriera los ojos. -Se escucharon risas en el salon.- Por Colin y Penelope!

Todos los presentes alzaron las copas y brindaron por ellos. Enseguida la musica volvio a llenar el ambiente y fue la señal para que los recien casados bailaran el vals. Colin tomo de la mano a Penelope y la llevo hasta la pista de baile. Habian escogido la pieza que habian bailado por primera vez el año en el que Penelope habia debutado y se le permitia bailar en eventos. Era de esos recuerdos que Penelope llevaba bien grabado en el corazon y en su magnifica memoria.

La musica inundo el ambiente y Penelope y Colin se regalaron las respectivas reverencias sin apartar la mirada el uno del otro. Ella dejo descansar sus manos sobre el pecho de Colin a la vez que el forjaba el agarre en su cintura para comenzar a bailar lentamente. Pudieron haber escogido alguna coreografia donde tuvieran que desplazarse por la pista con muchos giros que maravillaran a los invitados, sin embargo; habian decidido que fuera algo sencillo e intimo para ellos dos.

Sus movimientos eran lentos, pequeños; pero romanticos. Penelope le sonreia a Colin con una devocion y amor desbordante. Colin se sentia el hombre mas afortunado del planeta tierra. Dejando todo de lado, como si ellos fueran los unicos en el salon; inclino el rostro para que sus frentes se encontraran antes de encajar sus labios con los de ella en el beso mas profundo que se habian dado hasta ese momento.

Era simplemente la confirmacion de que mas alla del paso de los años, el amor que ellos se profesaban en ese momento era amor puro, de verdad. Una amistad que se habia transformado en la expresion de amor calida a la que muchas jovencitas aspiraban al llegar a la edad de debutantes. Pero Penelope habia tenido que esperar por el, casi trece años. Sin embargo habia valido la pena y estaba segura de que lo repetiria absolutamente todo con tal de llegar a ese mismo momento.

Sus labios se separaron y ella dejo reposar el rostro sobre el pecho de el en lo que daban los ultimos pasos.

El ambiente se sentia cargado de melaconlia y al terminar la pieza, Colin volvio a dejar un pequeño beso en sus labios. Al quedarse el salon en silencio, los invitados comenzaron a aplaudir y poco despues la orquesta comenzo a tocar una nueva pieza, en la que a Colin y Penelope se les unieron diferentes parejas en la pista de baile.

Esta en cambio era mas alegre y ambos comenzaron a bailar animadamente haciendo cambios de pareja en el proceso de desplazarse por la pista. Una vez esta pieza termino, ambos salieron de la pista de baile.

La Promesa de Lady WhistledownDonde viven las historias. Descúbrelo ahora