Ciervo de hermosa cornamenta, no seas engañado por el lobo con piel de cordero.
Ciervo inocente, no te dejes llevar por su timidez aparente.
Ciervo curioso, no metas la cabeza en la boca del lobo.
Ciervo astuto, el lobo olvidó tu cornamenta.
Ciervo de aparente inocencia, el lobo ahora sangra entre sonidos lastimeros.
Ciervo macabro, el lobo cuelga de tu cornamenta.
Ciervo que no es ciervo, ahora comes de la carne del lobo.
Oh, ciervo, ahora entiendo. Esa inocencia no era más que un disfraz capaz de ocultar tu mente retorcida. Oh, ciervo, creo que mejor tomo mis pastillas.
Dijo en el manicomio un viejo cazador entre risas.
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Del Subconsciente Al Papel
SpiritualSon varias historias cortas, ninguna tiene que ver con la otra, a no ser que de alguna queráis segunda parte.
