Capítulo 75: Caos

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Shiro avanzó con determinación hacia Belcebú, su guadaña reluciendo en la penumbra del escenario. No había expresión en su rostro, solo una determinación fría y calculada.

Belcebú, por su parte, observaba a Shiro con cuidado, aunque en sus ojos se podía vislumbrar un atisbo de interés ante el ataque inminente pero ya tenía un plan para esquivarlo.

Shiro no perdió tiempo en palabras. Con un movimiento ágil, lanzó su ataque, cortando el aire con precisión milimétrica hacia su oponente.

Belcebú apenas esbozó un movimiento giratorio vibrando todo su cuerpo soltandose de la tela y esquivando el golpe por poco, pero no lo suficiente para evitar ser alcanzado. La guadaña de Shiro aumento de tamaño de un momento a otro y  dejó un surco profundo en el pecho de Belcebú, dejando casí su corazón al descubierto y brotando demasiada sangre que lo puso de rodillas

Belcebú(Escupiedo sangre):¡Coff!,¿como lo hiciste?¿como aumentaste el alcanze de la guadaña?

Shiro:Por la habilidad de mi valquiria,  permite aumentar de tamaño de cualquier arma

Shiro:Por la habilidad de mi valquiria,  permite aumentar de tamaño de cualquier arma

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Geir:13 Hermana valquiria/Habilidad: Aumento

Deberías tener más cuidado, Belcebú. -murmuró Shiro, su voz apenas un susurro en la tumultuosa atmósfera del enfrentamiento.

Belcebú se enderezó, una mueca de dolor apenas visible cruzando su rostro. Sin embargo, en lugar de devolver el golpe, su mirada se tornó más intensa, como si estuviera calculando su próximo movimiento.

Tienes la capacidad para matarme, Shiro. Pero esto está lejos de terminar. -respondió Belcebú con una calma inquebrantable, aunque su voz llevaba un tono de advertencia apenas perceptible.

Shiro asintió con solemnidad, su mente ya planeando su próximo movimiento mientras se preparaba para lo que sea que Belcebú pudiera desatar. La batalla estaba lejos de terminar, y ambos estaban decididos a salir victoriosos, cada uno por sus propios motivos oscuros y profundos.

Pasado

Kumoko despertó repentinamente dentro de lo que cree que es un saco, lo único que recuerda es que estaba en su clase de japones clásico cuando de repente sintió un dolor intenso y después pura oscuridad.

La explosión que mato a todas las personas dentro del salón de clases fue causada por un ataque del Rey Demonio anterior a Ariel y el Héroe de hace dos generaciones que iba dirigido hacia D. Ella se sintió responsable por las muertes y decidió cumplirles la fantasía de reencarnar en otro mundo por una ocasión, pero eso no detuvo a D de jugar un poco con las situaciones de nacimiento de los estudiantes.

En ese momento D vio que dentro del salón también había muerto una araña y se le ocurrió gastarles una broma a sus compañeros en el inframundo y le dio un fragmento de su alma a dicha araña para que pudiera soportar el viaje al otro mundo y sus recuerdos como Wakaba Hiiro, así creando a Kumoko. Cuando esta muriera y el fragmento del alma de D terminaría en el inframundo esto desconcertaría a sus compañeros y le daría un poco más de tiempo para jugar a ser una adolescente.

Shuumatsu no IsekaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora