-Te lo juro Ginevra si no logras que ese maldito niño guarde silencio, te voy a lanzar todas las malditas maldiciones imperdonables que existan-. Astoria llevaba más de dos horas intentando que el niño dejara de gritar y llorar
-Dale sus cosas, te esta pidiendo sus cosas, quizá así deje de llorar
Mientras en una habitación estaba el pobre rubiecito llorando, ya no le salían lágrimas, su garganta le ardía de tanto llorar, ya solo sollozaba. - ¡Por favor mamá, déjame salir! ¡Quiero irme! ¡Ya no quiero estar aquí, yo quiero estar con mi papi! ¡Quiero mi frazada, tengo frio y hambre! ¡Quiero irme a mi casa!
- ¡Que te calles! -. Astoria entro a la habitación, enseguida Scorpius se incorporó y trato de limpiar sus ojos y su nariz lo más rápido posible. - Veo que dejaste de llorar, al fin creí que nunca te ibas a cansar
- ¿Ya, ya me vas a llevar con mi papi? ¿Tú, no me quieres mami? -. Pregunto entre sollozos
- ¿Por qué habría de quererte? Si arruinaste todos mis planes
- Pero yo no hice nada, ya no estés enojada conmigo, me voy a portar bien, lo juro-. Scorpius intento tocar a su madre y en respuesta lo único que recibió fue un fuerte empujó, haciéndolo caer, provocando un fuerte dolor en la parte baja de su espalda, esta vez no lloro, solo derramo un par de lágrimas. - Papi ven por mi-. Dijo lo más bajito que pudo
Para que veas que no soy tan mala, le pediré a uno de mis elfos que te preparen algo de cenar y después de eso te vas a dormir ¿Entendido? -. Termino de dar indicaciones y salió de la habitación
-Que bueno que lograste tranquilizarlo
-Y no tuve que utilizar mano dura, como tú con tus hijos
- ¿Qué, de que hablas? -. La pelirroja estaba confundida. - ¿Hijos?
- ¡Nada, nada! Olvídalo, los berrinches de ese niño me tienen con los nervios de punta, ya le dije que uno de los elfos le llevara de cenar y después se tiene que dormir
-Bueno agradece que no tiene el carácter de su padre, si te hubiera tocado un mini Malfoy en toda la extensión de la palabra, ya lo hubieras entregado a su padre
-Pero por fortuna no es como su padre, Draco era terriblemente dramático cuando era pequeño
Lástima, le habían dado una genial idea al pequeño que escuchaba tras la puerta. - Una sonrisa se le dibujo en la cara y de pronto recordó las palabras del tío Blaise *A veces hace falta un poco de drama para desquiciar a la gente, pequeño travieso*. - ¡Teeeeeeengo hambreeeee!
- ¡Loli! -. Astoria le grito a su elfina
- ¿Si ama?
- Ve a preguntarle a Scorpius que le apetece cenar y se lo preparas
-Enseguida-. Obediente apareció dentro de la habitación, al reconocerlo como hijo de su ama, lo trato con el debido respeto que se merecía. – Amito Scorpius ¿Qué desea que le prepare para cenar?
- ¿Cómo te llamas? ¿Conoces a Dobby?
-Loli y no, no conozco a Dobby
-Quiero una rebanada de pastel de calabaza y un poco de leche con chocolate, por favor
-No desespere, ya se lo traigo-. Loli fue a la cocina a preparar lo que le fue ordenado, regreso como a los diez minutos. - Su cena esta lista amito
Apenas probo la comida y puso cara de asco- ¡Yo no quiero eso! Tiene mucha calabaza y muy poco chocolate-. La pobre Loli volvió a la cocina, regresando al poco rato. - ¡Muy poca calabaza y casi nada de chocolate! -. Así estuvo al menos unas tres veces más. - ¡Demasiada calabaza y demasiado chocolate!
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Recomenzar
FanfictionUn malentendido del pasado los obligara a enfrentar su presente, para poder tener un futuro Hola a ti que me estas leyendo...Esta es la primera vez que escribo algo sobre Drarry/Harco (Aunque para mi lo mejor es cuando son versátiles), espero que la...