Luffy ha conseguido ser el rey de los piratas, mientras que la vida ha dado sus frutos para vivir en una paz y harmonia importante.
Tú, como la hermana mayor de Luffy debes enfrentarte a una serie de retos debido a que se encuentran con un lugar ine...
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(T/N)🍯
Aquella noche fue extremadamente larga. Había intentado escapar unas 10 veces mientras que mis hermanos me hacían de barrera. Así que al final me rendí. No quería... Bueno, lo cierto es que no quería hacer daño a Ace ni a su bebé. Intentaba controlarme pero se me hacía demasiado complicado.
A la mañana siguiente estaba mucho mejor. Mi celo había pasado así que desperté con un hambre voraz. Caminé a la cocina viendo a mis dos hermanos durmiendo, suponía que Sabo seguía arriba con Law y Rosinante. Abrí la nevera agarrando el tetrabrik de leche para poder beberme el litro entero de una sentada. Tomé pan empezando a tragar como si me fuera la vida en ello.
- Buenos días princesa. -Dijo Ace con una sonrisa levantándose del sofá. Luffy seguía durmiendo. No lo íbamos a despertar porque el pobre pasó una noche complicada por mí culpa.
- Buenos días Ace, ¿Cómo te encuentras? Perdón por lo de ayer... -Suspire un poco mientras me sentaba en la barra de la cocina tomando un poco mi cabeza. - Me siento agotada...
- Es normal, tú... Deberías hablar con Rosinante. -Me comentó mi hermano pecoso, yo asentí un poco, lo sabía pero estaba muerta de miedo.
- ¿Puedes decirle que baje en unas dos horas? Que me dé tiempo a ducharme y vestirme con algo más adecuado que un camisón roto... -El asintió riéndose un poco, lo cierto es que era bastante graciosa la situación. Miró a Luffy aún babeando en el suelo, mientras caminaba a la puerta de entrada.
- Voy a ello -Me dijo el pecoso, cerrando la puerta tras de sí caminando hacía el piso donde estaban los demás.
Narradora- 🍞
Después de aquella noticia por parte de Ace al rubio más alto, el decidió empezar a prepararse para su cita. Sí, el había entendido que era una cita. Mientras que (T/N) se dedicaba a lavar la ropa de Rosinante que había usado como nido para luego poderla doblar y entregársela como agradecimiento.
(T/N)🍯
Habían pasado dos horas desde que había subido Ace. Suponía que todos se quedarían en casa de Luffy para poder chafardear que tal iba nuestra conversación con Rosinante.
Escuché el timbre de la puerta. Mierda, ya era el. ¿Porqué era tan mal hablada? Ni yo misma lo sabía, pero estaba tremendamente nerviosa. Caminé hacia la puerta de entrada para suspirar un par de veces antes de abrir y finalmente giré la manilla.
Ahí estaba el, con sus ojos color marrón-granate, su cabello dorado parecido al sol que iluminaba todos mis días y una sonrisa tan resplandeciente que podría guiar a cualquier alma perdida del purgatorio. Me puse completamente roja al notar su aroma, estaba inundando mis fosas nasales de una forma relajada. Mientras que yo dejaba mi aroma fluir por el ambiente pues aún no sabía controlarlo demasiado bien.
- ¿Puedo pasar? -Preguntó el menor de los Donquixote y yo como una idiota dije que sí con la cabeza, apartándome un poco para que el gran cuerpo del chico pudiera entrar en el espacio. - Hace mucho tiempo (T/N), me alegra ... Que estemos ahora aquí, los dos ...
