Addelyn
Los días pasaron rápido, mis maletas se encontraban apiladas en mi habitación, hechas con todo lo necesario para el viaje y mi nueva vida esperando del otro lado del continente a ser comenzada.
Hace unos días había logrado hablar con mi hermana y arreglar las cosas. Claire me dijo que no estaba molesta conmigo, solamente se estaba tomando un tiempo para asimilar sus nuevas responsabilidades y el hecho de que me tendría que ir. Solo se encontraba triste y no quería decir nada para no molestar o incomodar.
Anoche dormí junto a mis hermanas en la habitación de Sofia, estuvimos hablando hasta que se quedaron profundamente dormidas después de escuchar cómo les contaba un cuento para dormir como cuando eran pequeñas.
Me quede un rato más despierta viéndolas mientras descansaban, sus respiraciones iban al par y apenas una pequeña vela, o lo que quedaba de ella, alumbraba la habitación desde un rincón del escritorio blanco de Sofia. Me fui a dormir cuando apenas pude mantener mis ojos cerrados.
- ¿Esta todo en orden? - escuche a mi madre hablando con una de las doncellas.
-Así es su alteza. Las maletas de la princesa Addelyn ya están en orden, si así lo ordena comenzaremos a subir las maletas al carruaje para que se encuentre listo para partir.
-Las cosas del rey ya se encuentran ahí, así que hagan llegar las de la princesa lo antes posible, será un largo viaje y mientras más rápido lleguen será mejor- mi madre entro al área donde se encontraba mi habitación. La relación con ella no había mejorado casi nada en estos últimos días, pero de alguna forma no me quería ir de aquí sin estar bien con mi madre.
-Todo paso muy deprisa- dije yo tratando iniciar una conversación con ella.
-Si cariño, nunca habríamos querido un futuro para ti de esta forma- respondió ella con esa voz tranquila que tanto la caracterizaba- probablemente pienses que te dimos como una moneda de cambio, pero no fue así. Tu padre y yo tratamos de evitar que fuera así porque sabíamos cómo te afectaría, si hubiera habido otra opción la habríamos tomado.
Solo asentí con mi cabeza lentamente, no podía decir realmente nada. Mi madre, me estaba diciendo que no había sido una moneda de cambio, pero, en resumidas cuentas. LO ESTABA SIENDO.
Supongo que ya no importaba si ellos trataron de evitarlo o no, las cosas sucederían sin importar cuanto me opusiera, de cualquier forma, podría resultar muchísimo peor si me oponía por completo a la orden de los reyes.
Abrace a mi madre por los hombros y salimos de la mano de aquella habitación vacía. Algunos sirvientes entraban a mi habitación para llevar abajo las ultimas maletas y poder partir.
Toda mi familia estaba reunida en el salón principal, mis padres, mis hermanas. Ya todo estaba en orden para partir lo más pronto posible pues un gran viaje nos esperaba por delante.
-No te olvides de nosotras- dijo Claire mientras me abrazaba por la cintura con su rostro pegado a mi pecho, la envolví con mis brazos tratando de aferrarme a ese sentimiento. Sofia se unió al abrazo también. Escuche un pequeño sollozo proveniente de ella. Lo que menos quería era llorar, tenía que ser fuerte y no desmoronarme ahora.
-Oh, Claire, Sofía, nunca podría olvidarme de ustedes. Ustedes podrán ir a visitarme o si puedo vendré a verlas durante sus cumpleaños. Estaré en contacto con ustedes.
-Addelyn ya va siendo hora de marcharnos, habrá que partir antes de que el sol se ponga si queremos avanzar- dijo mi padre desde su posición junto a mi madre.
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Una Promesa Real // EN PROCESO
RomanceNo era nada más que una promesa entre ambos reinos, una promesa de alianza que beneficiaría a su pueblo, podría renunciar a él si así lo deseaba. Cuando todo parece una opción viable y la más fácil siempre llega algo a complicarlo, en este caso era...