Kaela [Proceso]

Capítulo 0.

Algún lugar de Massachusetts.
20 de marzo, 2007.
9:30 am.

Directora del orfanato.

Me encontraba en mi oficina mientras observaba por la ventana era un día nublado y no podía dejar de pensar en esos tres niños desde su llegada no se han querido acercar a los demás niños, ni los niños a ellos porque les tiene miedo hasta las trabajadoras han dicho que los tres se comportan diferente a los demás.

En una parte me hacía verlos que solo entre ellos tres se podían entender sus vidas fue muy dura aún no puedo creer que sus propia familias los lastimara de esa manera, ellos han vivido cosas muy traumáticas que ningún niño de su edad soportaría como lo hicieron ellos.

Suelto un suspiro, me pasó las manos por el cabello la puerta de mi oficina se abre ya se quien acaba de entrar volteó me encuentro con mi amiga ella me ayudado con el orfanato desde un inicio, ya tienen dos semanas que ellos tres llegaron pude ver que la presencia de ellos la incómoda.

—Ahora que sucedió —pregunté.

—No a sucedido nada, solo vine para saber si ya entraste en razón sobre lo que hablamos.

Negué con la cabeza.—Fui clara con mi respuesta no voy a pedir que lleven a esos niños a un hospital psiquiátrico.

—Se te olvida el comportamiento tan raro que tienen —exclamo enojada—.Te lo vuelvo a recordar, no es normal que se la pasen ellos tres juntos en todo momento, duermen juntos, vayan al baño juntos, ni quieran interactuar con los demás, no se quieren separar ni un solo momento.

—No sé, talvez se sienten refugiados entre ellos mismo.—respondí.

Ella soltó un suspiro de frustración.-Eso creía en los primeros días pero me di cuenta que no era así, no dejan que ningún otro niño se le acerca a la niña el primer niño que se le acercó uno de ellos lo golpeó y el otro lo mordió.

Me aparté del escritorio caminé por la oficina era verdad no lo podía negar los dos niños no dejaban que ningún niño se el acercará a ella, cuando los quisimos separar para que interactuaran con los demás niños de aquí tuvieron un ataque de ira y más el grito de la niña diciendo que ellos eran de ella.

—Creo... que las muertes de sus familiares las provocaron ellos mismos. —me detuve me giré para verla con el ceño fruncido.

—¡Una cosa es que tengan ese comportamiento y otra es que los estén viendo como unos asesinos! —alcé la voz.

—Explicame porque sus huellas estaban en los objetos con lo que cometieron los asesinatos.

En el momento que abrí mi boca para refutar un grito desgarrador de una mujer se escuchó nos observamos asustadas salimos en camino donde se escuchó el grito.

Al llegar al patio trasero donde habían un montón de sillas, mesas viejas y columpios quebrados se encontraba un círculo de las trabajadoras y los niños viendo con horror. Nos acercamos tuve que llevar mis manos a la boca para ahogar el grito que estaba por salir.

Era el cuerpo de una de las niñas tenía dos tenedores enterado en cada ojo y una palabra escrita en la frente Míos la habían empujado de la azotea su cuerpo impacto contra los columpios enterrandose una barra de hierro en el cuello su sangre había salpicado el lugar, mis ojos fueron hacia la azotea no había nadie ahí.

—Llevense a los niños de aquí. —pedí a las trabajadoras, dos de ellas se quedaron viendo en shock el cuerpo de la niña—.Alguien vio como sucedió esto.

—No, veníamos de botar la basura cuando escuchamos el golpe del cuerpo impactar.

Asentí y volteé a verla lágrimas caen por su rostro sabía que ella se había encariñado de la niña—.Vuelvan adentro con los niños. —ordené ellas se marcharon.

Lleve mi mano al hombro de mi amiga y le di un suave apretón—.Fueron ellos no tengo dudas. —dice sollozando ocultando su rostro con ambas manos.

Sentí detrás de nosotras que nos observaban me giré rápido me encontré que ahí estaban ellos tres con una sonrisa divertida en su rostro, me aleje de mi amiga camine hasta ellos.

—¿Que hacen ustedes aquí?.

No me respondieron solo se encogieron de hombros, soltaron una risita divertida. —¿Como les parece divertido ver lo que le sucedió a esa niña?

Los ojos verdes de la niña me observaron en ellos se reflejaba un vacío.—Ella tocó lo que es mío. —hablo con una voz tan fría para una niña de su edad.

—¿Qué?... tú le hiciste eso. —pregunté desconcertada.

—Le dije que no tocara lo que es mío.

Negué con la cabeza di dos pasos torpez hacia atrás, los niños tomaron de la mano a la niña para verme fijamente.

—Ella es nuestra.

Se dieron la vuelta entraron al orfanato dejándome el corazón a mil. No podía hacerme la ciega y seguir pensando de tonta que estos niños se podían ver como hermanos, pero no despertaron una obsesión hacia ella. Sabía que nada bueno iba a suceder después que se fueran de este orfanato. Eran demonios disfrazados.

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¿Quieren conocer en lo que se han convertido esos tres niños?

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Besos 💋....