Cartas a mi familia

Tia Paterna 1

Tia.... no estoy segura si deba llamarte de esa forma realmente nunca sentí que lo fueras... solo es el título que te otorgó ser la hermana de mi maravilloso padre.

En mi niñes estuviste muy poco sin embargo puedo recordar muchas tardes divertidas de juegos con mi primo, amaba cuando dejabas que el estuviera en la que siempre para mi fue mi casa, yo era una niña muy sola, que no tenía amigos y vivía con dos adultos presentes pero a la vez muy ocupados con sus trabajos.

De ti recuerdo muy poco, lo que si no olvido es aquella vez que despues de un viaje que realizaste le trajiste un regalo a cada uno de tus sobrinos en ese entonces solo eramos 3 pequeños 4 adultos, con mucho entusiasmo mostraste lo que describiste como un pantalón precioso y dijiste para mi sobrina favorita y se lo entregaste y por supuesto para el resto también trajiste algo especial con una historia de fondo... para todos menos para mi... no hay problema no era un detalle que saliera con una niña que te quería y esperaba de ti una pizca de cariño, y no con esto digo que lo material sea amor solo que en la niñez esa acción puede generar resentimiento, ahora lo veo de otra forma, en ese entonces eras la tia que viajaba y vivía su vida muy bien, esa tia que solo veía en ocasiones, solo alguien que no estaba presente.

Ahora puedo verte, ya no soy esa niña que espera ilusionada el amor o el cariño de esa tía, ahora me doy cuenta que la sangre no tiene porque obligarte a querer a alguien que nunca te diste el tiempo de conocer, lo único que tienes para mi es desprecio, solo estas ahí para juzgar absolutamente todo lo que haga, no sabes nada de mi vida, de la dificultades que he pasado, nunca te a importado y lo entiendo hasta cierto punto.

Lo que nunca voy a entender son tus ganas de herir y de juzgarme, tu eres una persona adulta que a vivido lo suficiente para saber que cada uno tiene derecho de equivocarse, levantarse y seguir adelante, que es imposible que pensemos o seamos de la misma manera.

No entiendo porque cuando hablamos (casi una vez al año) en vez de preguntar por mi, por como me va, por lo que he hecho, tu solo quieras juzgar lo poco que te has enterado de mi vida a través de otros.

Estoy cansada de tu juego si quieres juzgar debiste haber estudiado y hacerlo de forma profesional, pero en lo familiar no tienes ningún derecho.

Vive tu vida, se feliz, se prospera, se saludable, no opinas sobre la vida de los demás y mucho menos si no sabes absolutamente nada de ellos.

Con esto pretendo cerrar mi ciclo contigo, sacarte de mi vida que realmente nunca has estado en ella, pero desde este momento te quito todo el poder y peso de tus palabras hacia mi, te deseo lo mejor de esta vida y te libero de esa carga tan pesada para ti que fue ser mi "tia".

Gracias por enseñarme que el hecho de compartir sangre no nos hace ser familia.

Gracias por enseñarme que debo aprender a poner un límite con las personas que no quiero en mi vida.

Gracias por enseñarme a decir adiós a alguien o algo cuando no es nada positivo para mi.

Que tengas grandiosa vida.