Diez

1.5K 182 61
                                    

Su mente quedó en blanco

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Su mente quedó en blanco. Minho había soltado una bomba y ni siquiera le había dado tiempo para estar listo, solo lo había dicho, así sin más. Se quedó mirando a la nada mientras las palabras daban vuelta en su mente;

Me gustas.

¿Había escuchado bien? ¿Estaba acaso aun soñando? ¿Era una broma? Que estaba pasando en la cabeza de Minho como para confesarle eso así sin más, pero bueno, entre los dos el rubio siempre había sido el más directo, no se andaba con rodeos.

- Si me vas a rechazar hazlo amablemente, porque tengo corazón de pollo. - Minho escondió su cabeza entre sus manos avergonzado.

- No te voy a rechazar. - dijo rápidamente Hyunjin. El rubio levanto su cabeza rápidamente y lo miro ilusionado.

- ¿Entonces...?

- Aún lo estoy procesando ¡Cómo me dices esas cosas así nada más!

- ¿Y cómo quieres que te lo diga? - cuestionó.

- Que se yo, con indirectas quizás. - se encogió de hombros avergonzado.

- ¡Pero si me la paso diciéndote indirectas! Y tú nunca las entiendes. - los dos se miraron.

- No es que no las entienda, solo las ignoro. Nunca se si me estás jugando una broma. - bufo Hyunjin desviando su vista. No podía creer que estaba teniendo una conversación así con el chico del que está, secretamente, enamorado.

- No estoy jugando, ya te dije, esto que siento es de verdad. - Hyunjin sabía que era así, el conocía muy bien al rubio y este era muy notorio con sus sentimientos, era muy transparente. Sabía que lo que estaba diciendo no era una broma, pero quería que así fuera.

Aunque él también sintiera cosas por Minho, no sabía cómo manejar la situación, para él era mejor sentir el amor unilateral.

- ¿Me vas a rechazar? Digo para empezar a llorar. - Hyunjin lo miro mal. Como podía bromear con cosas así, aunque en su voz se podía notar el temor.

- Ya te dije que no lo haré.

Minho dejo escapar un suspiro demasiado exagerado. Así era el rubio y esas pequeñas cosas eran las que volvían loco a Hyunjin. no sabía si estaba loco de amor o loco de fastidio, quizás era una mezcla de las dos. El chico siempre sabía cómo hacer que una situación dejara de ser incómoda, hacía comentarios que podrían interpretarse de mil maneras. Si, le volvía loco su sarcasmo, sus bromas, su comportamiento, sus risas, sus gestos exagerados, sus imitaciones, sus comentarios, todo Minho lo volvía loco, pero estaba comenzando aceptar que todo eso que lo volvia loco también lo tenía profundamente enamorado.

- Te odio tanto. - murmuró tirando su cabeza hacia atrás mirando hacia el cielo.

- ¡Oye! Dijiste que me aceptabas como novio, y ahora me dices que me odias. ¡Que tóxico! - se quejó Minho alzando un poco la voz.

También te gustarán

          

- ¡Hey! Tu nunca me pediste ser tu novio así que no me salgas con esas cosas. - le reprochó Hyunjin. - Además no te odio en ese sentido, odio que me gustes también. Odio que tú gustes de mí. ¿Sabes? Yo estaba bien teniendo solo un crush contigo, esto me complica.

Minho lo miro sorprendido por lo que acababa de decir, Hyunjin sin levantar su cabeza también lo miró.

- Si somos novios, acabas de decir que te gusto. - El rubio sonrió victorioso.

-¡Que no! - se quejó nuevamente Hyunjin. Iba a volverse loco, un loco enamorado.

- Hyunjin y Minho novios. - canturreo el chico sin prestarle atención.

- ¡Minho! Si no me lo pides formalmente no te dejare decir que somos novios. - el pelinegro se cruzó de brazos. Iba hacerse el dificil por unos minutos, este era su papel.

- Pero no quiero pedirtelo así, quiero hacerlo más romántico. - murmuró. - Pero por mientras tienes que decir igual que somos novios, no quiero que alguien me intenté hacer competencia.

- Nadie es tu competencia. - le aseguro sincero.

Minho sonrió feliz. -¿Ósea que no te gusta nadie más?

- ¿Si me gustará alguien más te aceptaría? - pregunto obvio el pelinegro.

El rubio nego. Ambos se quedaron mirando fijamente, se sentia como si el tiempo se detuviera y en el mundo solo existieran ellos dos. Las abejas comenzaron a danzar como ya estaban acostumbradas, pinchando por aquí y por allá, dándoles cosquillas que mandaban corrientes por todo su cuerpo. ¿Estaba bien la decisión que estaban tomando? ¿Era acaso lo que siempre debieron hacer? Porque ahora que lo miraba fijamente se olvida completamente porque lo fastidiaba, se olvidaba el porqué de sus peleas, se olvidaba de porque a veces quería estrangularlo.

- ¿Me vas a dejar darte besos? - pregunto el rubio sin dejar de mirarlo.

- Nop. Esos son exclusivos, si me pides ser tu novio te los daré. - sonrió.

- Malditos requisitos. - murmuró.

- ¡Mierda! - Hyunjin se puso rápidamente de pie recordando algo importante.

- ¿Qué pasa? - Minho se puso de pie igualmente. Hyunjin le tomo la mano y comenzó a correr por el parque sin importar que la gente se les quedará mirando.

- ¡Les prometí a los niños que celebraríamos este día! ¡Tenemos que conseguir un pastel! - casi grito. Minho abrió los ojos recordando el suceso importante, además él quería comprar decoración de esos dibujos horribles que a Changbin le gustaban.

Entrelazaron sus dedos tomando fuertemente sus manos mientras seguían corriendo.

- ¡Te extrañe mucho! - Hyunjin abrazo fuertemente al bebé que sostenía en sus brazos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


- ¡Te extrañe mucho! - Hyunjin abrazo fuertemente al bebé que sostenía en sus brazos.

Changbin sonrió y dejo que sus padres le besaran la mejilla. Había superado exitosamente su primer día de jardín, ambos se sentian inmensamente orgullosos por los avances del pequeño.

Padres || Hyunho Donde viven las historias. Descúbrelo ahora