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Nota: Debido a que este es el último, y es demasiado largo (para editar, corregir, quitar y añadir palabras), lo he dividido en dos partes.
4 Minutos termino. Fue un final un poco agridulce. Sin embargo, ha sido una de las series más espectaculares que he visto en este momento, aunque a veces sentía que entendía y a veces no.
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０７
El viaje fue exhaustivo y placentero. Una mezcolanza de emociones en el evento de la marca, y con fans que se concentraron en la plaza del centro comercial. Su timidez se ve reflejada en los halagos que hacen unos fans, y preguntan por su nueva serie. (Tema que no puede ratificar), pues siguen trabajando en el libreto. Además, que ha pensado descansar un tiempo con los trabajos en la TV (aunque tiene por el momento varios viajes pendientes al extranjero), para seguir especializándose en sus estudios de ingeniería. Y pensar en la propuesta que ha recibido de la universidad para impartir clases un tiempo en la materia Física I a los estudiantes de la facultad de Ciencia y Tecnología. Y la cuestión, lo que lo ha dejado un poco extraño, es la última respuesta de Jes en el chat.
Sweetheart:
No podré ir al aeropuerto a recibirte, lo siento, bebé.
Probablemente no me encuentres tampoco en el apartamento.
He dejado unas notas de aquí allá por tu apartamento, también he movido algunas cajas para la mudanza.
Ten un buen viaje de retorno. Duerme, come y cuídate.
Habían estado conversando muy exiguo en los días que estuvo en el extranjero, cuando expresaron que se comunicarían durante el día. Sin embargo, los compromisos estaban muy presentes con la marca en el país y no le daban tanto tiempo libre, más que fuera descansar y enviar dos mensajes. Y Jes en Tailandia, con el canal. Y su pareja, suele ser muy afectuoso al despedirse en los chats. Y esta vez, sentía tan desabridos esos mensajes. Y para empeorar su lamentable situación, no lo miraría en casa. ¿En qué se andaba metiendo para no quererlo ver a él? ¿Acaso su manager lo había saturado de trabajo? No, no podía ni quería llevar ese camino de pensamientos, prefiriendo mejor dormirse en todo lo que duraba el vuelo a Tailandia.
Al descender del avión, su manager le sonrió indulgente, ayudándole con las maletas y anunciando la reunión de Bsumbody donde lo esperan a darle la bienvenida, sacándolo de ese sopor y preparándose para las fotografías y las cientos de preguntas vociferadas de su fandom Bsumbody. Y efectivamente, eran excelentes para darle una gran bienvenida de retorno. Levantando carteles que tienen fotos impresas de sus expresiones faciales en las series. Bible les sonríe y agradece tan bonito gesto de recibirlo, siendo apresurado por su manager al detenerse más tiempo al saludar a sus fans y por algunos guardias de seguridad marchando a su lado, y el personal de staff que lo asisten a llegar más rápido a la furgoneta.
—Tengo sueño. —menciona Bible, una vez sentado y acomodado, evitando frotarse los ojos, formando un puchero al no ver a Jes ni en sorpresa en la furgoneta.
—Vamos de camino a tu casita, ¿O quieres hacer una parada en otro lugar? —pregunta su manager, revisando el teléfono rápidamente.
—No, iremos directo a mi apartamento, Phi. —bosteza, ocultándolo con su mano, girando la cabeza al espectáculo borroso de la carretera. Son las tres y cuarenta de la tarde.
—Bien, esta semana no tienes nada por hacer. Duerme todo lo que quieras. Te informaré más después sobre la nueva serie en proceso. —vuelve a hablar el manager, bloqueando el teléfono.
—Por supuesto, gracias, phi.
No vuelve a quedarse dormido, repasando en el teléfono móvil, contestando los chats que ha dejado pendientes. La furgoneta Toyota entra al aparcamiento de los edificios en la zona, después de pasar por una revisión rápida por los hombres de seguridad, ya que Bible es conocido como propietario de tres apartamentos. Alguien del personal de Staff le ayuda a bajar las dos maletas grandes que trae consigo, mientras Bible lleva una maleta de mano y su maletín.
—Muchas gracias por todo, tengan un excelente día. Descansen también. —Bible hace una suave inclinación cortés con la cabeza y las manos juntas a los mayores dentro de la furgoneta Toyota, que imitan la cortesía y se despiden jovialmente.
Termina de empujar las dos maletas grandes al elevador, apretando el número de piso de su apartamento. Es extraño que Jes no lo haya llamado por teléfono.
—¿Y si mejor le marco? —inspira, desbloqueando el dispositivo con su huella, notando una llamada entrante de un número no registrado. —¿Hola?
—Hola bebé, ¿estás ya en casita?
—¿Jes? —Bible se aparta el teléfono de la oreja, leyendo el número telefónico no registrado. —¿Y este número?
—Es una larga historia; resumiendo, mi sobrino arrojó mi teléfono en la piscina en la casa de mi madre. —ríe nervioso Jes, aclarándose la garganta. —Sé que esto es extraño, y dije que estaría presente el día que regresaras... Y en eso, mi hermano una tarde antes me llamó por teléfono diciéndome que mamá había tenido un accidente en la carretera. —Hay un silencio en la otra línea, y Bible frunce las cejas, y las puertas metálicas del elevador se abren. Empuja rápidamente las maletas al pequeño vestíbulo antes de llegar a la puerta principal. —No fue grave, para como mi hermano lo explicó; gracias al cielo, el auto solo sufrió un mísero rayón del lado que ella iba de copiloto con papá al mando. Una moto casi chocó el auto, pero no pasó, y mi hermano estaba tan...
—¿Estás bien? —Bible se queda en la entrada, a pasos de meterse a su apartamento, con una mano sosteniendo el teléfono contra su oreja y la diestra en su cadera. Mirando la maceta con la planta seca que tiene fuera de su puerta.
—Eso creo. —balbucea Jes, suspirando, como si estuviera aguantando la respiración y otra cosa más.
—Mamá y papá, ellos están bien, ¿sí? —dice Bible, con una voz tan suave y dulce, como si le estuviera hablando a un infante. —Mi cuñado se asustó, y te asustó a ti. Ellos están bien, los estás viendo en este instante; sé que la impresión en tu pecho no se irá por un rato, y, ¿quieres hacer una videollamada?
