15.Daiquirí y cigarrillos

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El chico sentado en la silla del hospital y junto a su madre, respiraba de forma pesada y lenta, casi como si estuviese dormido

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El chico sentado en la silla del hospital y junto a su madre, respiraba de forma pesada y lenta, casi como si estuviese dormido. Esperaba a ser atendido por mí y que le dijera que todo estaba bien, pero analizando los resultados de la última tomografía, mi respuesta no sería tan agradable.

-Pasen de nuevo, por favor-Se colocaron ambos de pie y se dirigieron adentro de la oficina clínica-.¿Desean un poco de agua?

-Si no me intoxica como la última vez, doctora, me gustaría un poco de agua-La sonrisa del chico era enorme, a pesar de estar ante una noticia que podría cambiar, literalmente, el curso del resto de su vida.

-Bien, Gerald-Extendí mi mano hacia la del chico, dándole el vaso con agua-.Sé que no te gustan los rodeos, así que iré directamente al grano: Los resultados no son buenos.

Me encontraba en un estado de asombro y curiosidad, no sabía si el chico no entendía lo que le acababa de decir, porque su sonrisa seguía estando plasmada en su rostro, completamente diferente a como se encontraba su madre, quien estaba soportando la necesidad de llorar.

-¿Cuánto tiempo, Doc?-No podía ver a los ojos del joven que me preguntaba.

-Ya sabes que por la diabetes no puedo recetarte ciertas cosas-Las lágrimas de la señora Olson cayeron silenciosamente por sus mejillas. Sabía que se estaba culpando por todo lo que su hijo estaba pasando ya que la diabetes del chico era heredada, pero cuando ella dio a luz, no tenía ni idea-.Así que viendo las opciones, yo diría que un año, talvez dos-Mordí mi lengua al decir esto último, eran noticias que a nadie le podría agradar compartir.

El silencio era estrepitoso, fuerte.

-Al menos no tendré que hacer una aburrida tesis, doctora-La actitud del chico era ávida frente a las adversidades, como quien busca el alivio sin importarle nada.

Continué explicando el nuevo tratamiento y la manera rigurosa en la que debería de llevarse a cabo. Luego de él, revisé a otros dos pacientes antes de la hora de almuerzo. Escribí a la brujita para recordarle que debía de comer y que estaría a tiempo en Hexside para acompañarla a su edificio al finalizar las clases.

Terminé de comer el insípido almuerzo de la cafetería del hospital y subí a la oficina, busqué en el cajón del escritorio mi cepillo dental y con suerte, un poco de dentífrico en el tubo que lo contenía. Entré al baño lavé mis dientes, viendo al suelo, sin pensar exactamente en algo. Al salir del baño, alguien tocó la puerta.

-Adelante-Murmuré, tomando asiento en la silla detrás de mi escritorio y guardando el dentífrico y cepillo dental de donde lo saqué.

-Hola, Luz-La persona a la que vi a continuación me sorprendió por completo, se trataba de Olivia.

-¿Qué haces aquí?

-Tengo una cita contigo-Respondió como si fuera lo mejor y más obvio del planeta.

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⏰ Última actualización: Oct 28, 2024 ⏰

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Lo Que La Medicina No Cura (Lumity)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora