🔞 todos los personajes en la historia son mayores de la edad 🔞
Después de un penoso accidente Catra tiene que regresar a su hogar natal dónde tendrá que confrontar todo el desastre que dejó después de que la chica de melena dorada rompiera su cor...
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Adora cerro los ojos abrazándose a sí misma, su cuerpo dolía demasiado siempre que terminaba de tener sexo con Huntara, a su alfa no le interesaba si la lastimaba con tal de satisfacerse a sí misma, no le importaba la integridad de la omega.
-Merezco esto- susurro entre lágrimas la omega –Merezco todo.
Nuevamente trataba de llamar a Catra por la marca que ahora solo era una cicatriz, pero de nuevo no respondió y era porque ya no existía esa conexión.
(...)
La castaña jamás agradeció el ser un alfa puro, de hecho detestaba la idea de dominar sobre otros alfas, detestaba la idea de que sus instintos fueran más fuertes que nada, que fuera como un animal. Después de todo un alfa puro significaba ser más que el resto. Pero en ese momento lo agradeció como si fuera una bendición.
Catra respiraba entrecortadamente mientras soltaba el cuerpo de un alfa que ahora estaba cubierto de sangre y posiblemente con demasiados huesos rotos, miro a su alrededor encontrando a todos inconscientes o incluso muertos en el suelo, pudo oler como aquella esencia característica del miedo se hacía presente por lo que camino con lentitud hasta Huntara quien se arrastraba lejos de esa masacre.
-¡Aléjate!- grito Huntara con desesperación.
-Puedo apostar que tu no lo hiciste cuando Adora te lo pidió- gruño llegando hasta la alfa que sangraba por un costado –Y tampoco lo hiciste con Glimmer.
La castaña piso con fuerza la pierna rota de Huntara quien grito por el dolor, Catra se puso encima de la alfa para comenzar a soltar repetidos golpes en el rostro de la peliblanca.
-La tocaste- gruño sin detenerse –Abusaste de ella- su playera se manchó de más sangre –La marcaste contra su voluntad- los gritos de Huntara inundaban todo –La lastimaste y no te importo- la mirada bicolor estaba totalmente oscurecida –Fuiste tú quien jodio a Adora, tú me hiciste alejarme de ella- el rostro de la albina comenzaba a deformarse por los golpes –Y querías hacerle lo mismo a Glimmer- el rostro de la castaña tenia múltiples manchas de sangre de Huntara encima de los golpes –Te atreviste a tocarla enfrente mío, la hiciste llorar, ¡Nunca la volverás a tocar con tus malditas manos!- el cuerpo de Huntara se dejó de mover al igual que su respiración.
Catra se mantuvo golpeando el cuerpo inerte de la alfa, tenía tanta ira que no podía parar, sabía que su ropa debía de estar llena de sangre y que sus manos de seguro sangraban demasiado, cuando finalizo reviso los cuerpos en el suelo asegurándose de que ninguno respirara y camino con dificultad hasta su omega quien estaba totalmente inconsciente, desato la soga que la mantenía colgada y su cuerpo cayó encima suyo evitando el duro golpe con el suelo.
La alfa abrazo todo lo que pudo a su omega, soltó su olor permitiendo que la respiración acelerada de Glimmer se detuviera, acaricio su rostro para quitar la mordaza y beso su frente con amor mientras se permitía oler a su omega confirmando lo que Huntara dijo antes, Glimmer estaba embarazada.
Entonces Adora apareció en su mente, la imagen de ella llorando, abrazándose a si misma buscando una protección que no llegaría. Adora había sufrido tanto mientras Catra estaba lejos ¿Si se hubieran quedado juntas todo sería diferente?
El celular de Catra sonó llamando la atención de la felina quien lo saco de su bolsillo con dificultad, miro el número en la pantalla y contesto con dificultad.
-Catra no están en la fábrica y tampoco en las cabañas, estamos cerca del muelle y pronto la policía llegara- informo Escorpia con prisa.
-Glimmer está conmigo... pero deberían traer una ambulancia... o tal vez una manta... no quiero que cuando despierte vea lo que hice...- Catra dejo caer el teléfono al no tener la fuerza para mantenerlo.
La adrenalina en su cuerpo desaparecía dejándole la sensación intensa de dolor dándose cuenta de los golpes que recibió en la pelea pero no le importaron en lo más mínimo, no le interesaba mientras pudiera tener a su omega en sus brazos.
Los demás llegaron quedando sorprendidos por la escena, varios cuerpos tirados en el suelo repletos de sangre mientras Catra abrazaba a Glimmer en medio de ese caos, Hordak fue el primero en caminar hacia ellas dándole una manta a Catra quien cubrió a Glimmer y la cargo entre sus brazos con dificultad.
-Puedes llevarnos a un Hospital- pidió Catra mirando al hombre –Necesito saber que ella y mi cachorro están bien- Hordak asintió dirigiéndose al auto –Escorpia puedes por favor llevarte mi moto y hablar con la policía... si ellos preguntan diles que estaré en el hospital.
-Cuando arreglemos esto te alcanzaremos- aseguro Escorpia despeinando el cabello de Catra.
La alfa salió de aquel viejo lugar, observando como Entrapta y Perfuma la miraban sorprendidas por su aspecto, pudo jurar que la omega de Escorpia casi se desmaya al ver tanta sangre encima.
Cuando Catra llego al auto de Hordak entro en la parte trasera abrazando a Glimmer, permitiéndose admirar cada facción de su omega, pensando por primera vez en lo doloroso que sería perderla, Catra no pudo evitar llorar mientras se aferraba a su novia.
Dolía tanto pensar en que algún día Glimmer se iría, dolía la sola idea de una vida sin ella, Catra había tratado de enterrar sus sentimientos por tanto tiempo que ahora que estaban fuera no podía dejarla ir tan fácilmente, no podía arriesgar la corta vida de su omega por un cachorro, tenía que deshacerse de él aunque doliera.
(...)
Adora miro el mar y las estrellas, ella estaba arriba en las velas que ahora estaban bajas por las corrientes nulas de aire, era una noche tan tranquila que la relajaba, aunque no podía evitar pensar en Catra, en como estaría, si comería bien, si se cuidaría del frio o si simplemente Glimmer sabia como lograr que Catra se relajara.
-Tal vez solo te deba dejar ir- susurro con tristeza observando como las estrellas brillaban –Tal vez sea solo lo mejor.
La risa de sus compañeros inundo sus odios, ella sabía que posiblemente Sea Hawk nuevamente había bebido y estaba cantando como ya era costumbre, de seguro Bow estaría animándolo mientras Mermista solo trataba de ocultarse de todos.
-Momentos buenos en los malos- exclamo con alegría, esa era una de las pocas frases que recordaba de la madre de Catra y posiblemente su favorita.
Siempre voy a extrañar a la Adora y Catra del pasado, de verdad pudieron haber tenido todo.