En DC: Phantom Thief Kid Comienza

Capítulo 127: Reversión

Unas horas más tarde, en la Baticueva

Kirk Langstrom se despertó lentamente y se dio cuenta de que estaba tendido en una cueva extraña. Las rocas negras como la brea reemplazaron el techo del laboratorio que recordaba.

Intentó ponerse de pie, pero no podía moverse en absoluto. Sentía como si algo le impidiera moverse en las manos y los pies.

Kirk yacía en una cama que parecía una mesa de operaciones. Sus manos y pies estaban firmemente sujetos con grilletes de metal, lo que le hacía imposible liberarse incluso con todas sus fuerzas.

La cama estaba colocada estratégicamente de modo que, sin importar hacia dónde girara la cabeza Kirk, lo único que podía ver era un montón de rocas.

Fuera del campo visual de Kirk, no lejos de él, Batman estaba sentado frente a la Batcomputadora y escribía rápidamente en el teclado.

Una de las pantallas de la Batcomputadora mostraba una pantalla llena de texto y gráficos, incluidos detalles relacionados con la información del ADN.

En otras pantallas, había informes de laboratorio del suero Man-Bat y los resultados de la prueba de la muestra de sangre de Kirk Langstrom.

'El suero Man-Bat alteró la secuencia genética de Kirk Langstrom. Si podemos reorganizar la secuencia alterada para que vuelva a la secuencia original de ADN humano...tal vez podamos devolverle su forma humana', Batman reflexionó en su mente, tratando de idear un plan para revertir los efectos del suero Man-Bat.

Kirk Langstrom había cometido un delito y, independientemente de su estado mental en ese momento, tuvo que afrontar las consecuencias según la ley.

Sin embargo, Batman esperaba poder restaurar la identidad humana de Kirk cuando llegara el momento de recibir juicio.

Hasta que Kirk volviera a la normalidad, Batman no lo enviaría al GCPD ni a la penitenciaría Blackgate.

A su lado, Robin parecía aburrido mientras veía a Batman ingresar la información en la Batcomputadora que no podía entender.

De vez en cuando, miraba fijamente al comedido Kirk.

"¿Dónde estás? ¿Batman? ¿Robin? ¡Sé que estás aquí!", Kirk gritó débilmente, su cabeza todavía estaba nublada por haber recién despertado.

Nadie le prestó atención.

"El suero Man-Bat es el trabajo de mi vida. No puedo confiárselo a nadie, ni siquiera si esa persona eres tú, Batman", Kirk continuó gritando.

Aún así, no hubo respuesta.

"No tiene sentido fingir que no escuchas. ¡Sé que estás aquí! Yo...solo quiero preguntarte. ¿Dónde está Francine? ¿Puedo verla?", el tono de Kirk se suavizó mientras suplicaba poder ver a su esposa.

Parecía que había sido la decisión correcta darle un sedante. Ahora su mente parecía estar más despejada que antes.

Robin asintió en silencio para sí mismo.

Después de gritar durante mucho tiempo, todavía no hubo respuesta.

Los ojos de Kirk se oscurecieron y se quedó en silencio.

¿Podría ser que Batman y Robin no estuvieran allí?

"Puedes ver a Francine, pero eso es durante las visitas a la prisión"

En ese momento, una voz baja y ronca resonó de repente detrás de Kirk.

Inmediatamente después, una sensación de dolor agudo surgió del cuello de Kirk.