Linger (camren)

10

Días después

Lauren aprovechó en tener la tarde   un poco libre para visitar a su mejor amiga, Verónica.
Ambas sentadas en la terraza de aquel departamento, conversaban y miraban el bello atardecer

La ojiverde tomando un refrescante jugo de naranja y la pelinegra una botella de cerveza.

- Aún no puedo creer que no me hallas aceptado una cerveza

Sonrió observando la ciudad

- Esa niña si que hace milagros, desde hoy soy su admiradora

- Idiota

Ambas rieron.

Flashback on

La ojiverde quedó sin palabras al ver como aquella niña se acercaba silenciosamente con un semblante "preocupado y triste" pensó.

La pequeña no tuvo miedo alguno y al momento de estar cerca de Lauren, le quitó el arma de las manos y lo colocó delicadamente cerca del sofá. La ojiverde la miraba atónica, no salía ni una palabra de su boca.

- Ven conmigo

Fueron las palabras que escuchó de la pequeña Alejandra mientras esta tiraba de sus manos y la llevaba a la cama.

Ambas se acomodaron de costado mirándose. La pequeña estiró su brazo derecho y con su mano empezó a acariciar el cabello de la mayor.
Lauren, empezando a tranquilizarse y a cerrar los ojos, a lo lejos una voz se hacia presente mientras el sueño la consumía por completo.. "no me dejes"
" no me dejes"

Flashback off

- He decidido hacer las cosas bien Vero. Es una buena niña

- Me doy cuenta Laur - colocó su mano en su hombro - Estoy orgullosa de ti y creo que es momento dejar ir todo eso que tienes acumulado en tu corazón

- Lo sé amiga, ya lo decidí, se lo prometí a Ale.

Flashback on

Una hora después la ojiverde despertaba asustada mirando a todos lados y llegando a su cabeza todos los recuerdos de lo que había hecho.
Preocupada se acercó al sofá y observó su arma, lo cogió y lo guardó rápidamente. De pronto la puerta se abrió y una pequeña Alejandra entraba con una taza de café.

- Que bueno que ya te levantaste, te traje café para que te pase un poco, ten

La ojiverde recibió agradecida y le dió un sorbo, ambas sentadas en el sofá.
Una vez terminado dejó la taza en una pequeña mesita y se acercó hacia Ale mientras la miraba con una sonrisa apenada.

- Ale, gracias por todo

- No te preocupes Lauren, somos amigas ¿no es cierto?

- Asi es, somos amigas - le sonrió

- Y como buena amiga que soy quiero que me prometas algo Lauren

La ojiverde asintió en silencio

- Porfavor no lo vuelvas hacer - las lágrimas se hacian presente en el rostro de la pequeña

- Lauren, yo yo te ne-necesito, no me dejes - rompió en llanto.

Impresionada por lo que estaba viendo, Lauren la abrazó fuertemente.
Eso fue suficiente para darse cuenta del error que estaba cometiendo.
La niña la necesitaba tanto, que lloraba desconsoladamente, porque si no hubiera llegado a tiempo, tal vez hubiera hecho su cometido.

- Ale mirame

La niña se calmó, sus ojos enrojecidos miraban atenta a la ojiverde

- Te prometo que nunca más lo voy a hacer y que de ahora en adelante me dedicaré a protegerte y a ser tu amiga, que dices..¿promesa? - le enseño su dedo meñique

- Promesa

Ambas juntaron sus dedos meñiques y sonrieron.

A partir de ese momento las cosas cambiaron para bien.
Los dias empezaron a transcurrir rápidamente y la amistad crecía más.

Lauren estaba todo el día junto a Alejandra, la llevaba a su escuela, a su clase de natación y empezaba a enseñarle a jugar fútbol en sus ratos libres.
Se juntaban en el jardín de la casa que era inmensamente amplio y ahí la ojiverde le enseñaba todos los trucos de aquel deporte que tanto gustaba.

Hacían equipo con algunos trabajadores del hogar mientras Camila y su Nana que era una señora de 70 años que había cuidado de la morena desde que era una bebé, les hacían barra.

Así pasaron algunos dias hasta que llegó el viaje de Shawn y Camila hacia Italia.
Solo se ivan por dos días y ya había pasado uno, es por eso que la ojiverde aprovechó y quiso visitar a su mejor amiga no sin antes dejar todo en prefecto estado.

Alejandra se habia quedado con Nana y los de seguridad que rondeaban la casa en sus respectivas posiciones mantenían al tanto de todo a Lauren.

Flashback off

- Me gustaría conocer a la pequeña

- Claro que sí, déjame ver algunas cosas y nos juntamos

- Es un hecho - sonrió

- Bueno ya me voy, estamos en contacto teniente

Ambas se levantaron y se dieron el típico saludo militar

- Asi será teniente - se miraron seriamente y luego rieron fuertemente

- Ya lárgate jauregay.

***

Milán, Italia

Senato Hotel Milano

El matrimonio habia viajado hasta esa ciudad para tener una respuesta positiva de aquel empresario mayor.

Grande fue la desilusión de Shawn que no podía creer que aquel hombre le había dicho que no, pero si en algún momento necesitaba de algún socio no dudaría en llamarlo.
El castaño sonrió desilusionado de su respuesta y estuvo cabizbajo en toda la noche de aquella celebración a la que había sido invitado.
Camila había tratado de distraerlo y de darle ánimos pero aún así nada cambiaba lo frustrado que estaba.

Al día siguiente pidieron el desayuno a la habitación y al terminar empezaron a empacar para dirigirse al aeropuerto, el castaño ya no quería estar ningún minuto más  ahí.

- Quita esa cara amor, no vas a estar así todo el día

- Es que contaba con esa asociación Camila, es un imbécil, me hizo venir por las puras

- No digas eso, además tu sabías que cualquier cosa podría pasar y bueno pasó esto, es momento de voltear página, estoy segura que conseguirás otros clientes.

- Espero que tengas razón nena

- Claro que sí, ya verás

La morena terminó de cerrar la maleta y suspiró profundamente

- Me bubiera gustado estar en la semana de la moda

- Sabes porque no amor, pero quizás más adelante - el castaño se le acercó abrazandola por atrás mientras miraban por la ventana

- Ya quiero que todo pase y ser como eramos antes

- Todo pasará amor, Jauregui está al cuidado de Ale, la policía investigando y una vez que encuentren a los responsables seremos libres y haremos las cosas de antes.

- Me lo prometes - se volteó abrazandolo por la cintura

- Te lo prometo nena - se besaron.

***********