Para el jefe de los mayordomos, el ver que ese silencio tan largo por parte de ese joven le hace entender que aún no tiene tan bien definido sus sentimientos románticos hacia el príncipe y que puede ser algo por lo que festejar, pero por otra parte tampoco necesitaba ser tan duro con el príncipe quien está entrando en una red de la que no puede volver a escapar y que podrá acabar enfermando por esa gran adicción llamada amor. Los sentimientos entre los alphas y omegas hace que Joseph no logre comprenderlo, todo porque nunca se ha enamorado pero si tuvo encuentros carnales con innumerables jovencitas betas, al punto de que ha tenido aventuras de una sola noche con sirvientas de menor rango y al final solo era para satisfacer su libido.
— Lo considero alguien muy capaz para reformar el reino y liberarlo de tantas injusticias que se viven a diario. — comenta William más que convencido de que necesitaba expresar su visión — Hay cosas que se pueden mejorar pero para todo lo que ha tenido que vivir el príncipe estando aquí en el palacio real sin siquiera salir fuera, dudo que haya otro capaz de hacer lo que él sí puede hacer estando alejado de su pueblo. —
— "Imposible... Acaso esté joven es consciente de lo que está diciendo ahora mismo" — Joseph estaba más que impactado de escuchar aquella franqueza por parte de ese joven.
— Ya desde una parte más personal, estoy muy feliz de que me haya escogido para ayudarle y me permita estar a su lado como si fuese un asesor para su alteza; pese a que estaré más que conforme si lo puedo ver cumplir sus ideales, sea o no a mi lado, es algo que no puedo ni siquiera permitírmelo aún sabiendo que con esto me siento algo conforme. — hace una pausa William no pudiendo evitar soltar un suspiro pesado — Aunque si es conmigo, me sentiría el ser más afortunado y feliz en la faz del mundo de poder estar a su lado como si fuera el mejor de todos los regalos que la vida podría otorgar —
William suspiró lentamente no pudiendo evitar sentir como su corazón se apretaba un poco con solo pensar en las negativas de querer seguir estando cerca de la vista del príncipe, también le costaría soltar la posibilidad de seguir cultivando aquel sentimiento de cariño que era mutuo entre ambos y eso podía sentirlo sin necesidad de que las palabras sean las que definieran todas las acciones que pudieran hacer, pero si había alguien más calificado para estar al lado del príncipe Nathan, entonces no le quedaría de otra en tener que aceptar pese a que le duela en algún recóndito lado de su corazón; no sin antes dar pelea sí sabe que ese tercero sea alguien siniestro y que no esté de acuerdo con los ideales del príncipe, eso lo daba por sentado el joven William, quería ser él quien lo acompañe y de apoyo que en verdad puede notar que necesitaba el heredero.
Aun así, para William el tener que pensar todo aquello hacía que le duela su corazón, siente como si su voz perdía fuerza de solo pensar en la posibilidad de ellos no poder seguir estando juntos; era casi imposible sentir esa necesidad de levantar su mano derecha para posar la punta de sus dedos en sus labios, es que era sorprendente y a la vez agotador saber que el miedo se apoderaba de su alma, no quería un final así, menos alejarse de ese cálido y abrasador sol que iluminó sus días, tantas emociones e incontables sentimientos afloraron en su interior y el sentir el aire escaparse de sus pulmones hace que empezara a toser, y es que al fin cae en cuenta que la presencia del príncipe Nathan provocaba en él toda esa gran tormenta una donde ni una sola nube negra se posa al pie de su muro al que por años estuvo aferrado.
— "Ahora puedo aceptar que usted es el más indicado para ayudar a nuestro príncipe madurar y perder cada uno de sus miedos... lástima que usted también se merece tener más apoyo como el príncipe lo tiene a diario, nuevos amigos y mentores que lo apoyen en avanzar en esta complicada senda llamada "alta sociedad"..." — Joseph se daba por satisfecho al ya comprender que ese joven y el príncipe estaban tallados uno para el otro.
ESTÁS LEYENDO
La estrella del amor
RandomNada es lo que parece, para ninguno de estos dos protagonistas de diferentes clases sociales quienes ignorantes de su realidad acaban enamorándose rápidamente. El deseo por ayudar nace en lo más profundo del corazón del joven aprendiz de mercader de...