NARRADOR
En el banco abandonado de Beacon Hills, Scott se encontraba encerrado en una pequeña jaula mientras gritaba de dolor y Belladona sonreía cínicamente.
La bruja estaba agarrando en su mano un frasco en el que poco a poco se iba rellenando con un humo rojo que salía del cuerpo de Scott.
— ¿Que me estás haciendo? ¿Por qué me has encerrado? ¿Por qué motivo me torturas? ¡Yo vine aquí para ayudarte!– gritó Scott.
— Tu ayuda no me sirve para lanzar el conjuro, lobito. Necesito al joven hombre Hale.
— ¿Que? ¿Por qué? ¡Si yo soy un alfa!
— Me temo que ya no lo eres– rió– Tu poder alfa está aquí– movió el frasco delante de la cara del lobo– Será un buen condimento para mi maleficio.
— ¡Eso es imposible! No se puede arrebatar la chispa alfa de un alfa verdadero.
— Cariño, soy una bruja con muchos siglos de edad. Sé como romper esos impedimentos– se burló, carcajeándose de su prisionero.
Mientras tanto Derek se encontraba en la puerta del banco abandonado.
Estaba allí él solo, o eso querían hacer creer a la bruja.
Entró con seguridad y con el ceño algo fruncido.
En banco estaba bastante vacío.
En el solo se encontraba Belladona, Scott en una jaula encerrado, unos berserkers, los cuales eran unos guerreros de la bruja creados por ella misma, y un gran e impresionante caldero a tan solo unos metros de Belladona y Scott.
El caldero era dorado y estaba completamente lleno de detalles y decoración, mas lo que destacaba por encima es todos esos detalles era la cara amenazante y siniestra que se encontraba en un lateral y sobresalía ligeramente de él.
Encima de él se encontraban flotando sustancias mágicas, que debían ser ingredientes del maleficio, dando la impresión de que danzaban en el aire.
— Veo que al fin has llegado– sonrió con perversidad.
— No vas a ganar.
Mientras que el moreno hablaba con la bruja, con la intención de distraerla lo más que podía, el resto de la manada entraba por una puerta oculta en la parte trasera del banco que pocos conocían.
Como Stiles y Atenea supusieron la bruja contaba con unos fuertes guardias, y nada más y nada menos que berserkers, unas criaturas sobrenaturales que contaban con gran fuerza, velocidad y durabilidad, además de altamente violentas.
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MALEFICIO DIVINO
FantasyCONTINUACIÓN DE EL JUEGO DEL AMOR Después de un breve periodo de calma tras lo sucedido el día de San Valentín una reunión urgente es convocada. Sorprendentemente quien la organizó fue una bruja desconocida, la cual les propuso una interesante ofer...