"CEO"

Capítulo 20: Noche de Películas y Confidencias

La noche había terminado, pero la energía de la fiesta aún palpitaba en el aire. Karime y Gala habían escapado de la fiesta para ir al departamento de Karime, asegurándo que verían algunas películas para relajarse. La idea de pasar más tiempo juntas emocionaba a Gala, y aunque la noche había sido un torbellino de risas y baile, el prospecto de una velada más tranquila parecía perfecto.

Al llegar a la casa de Karime, el ambiente era acogedor. Las luces estaban tenues, y el aroma de palomitas de maíz recién hechas llenaba el aire. Karime, siempre atenta, había preparado un pequeño buffet de snacks y bebidas.

—¿Listas para una maratón de películas? —preguntó Karime con una sonrisa, mientras guiaba a Gala hacia el sofá.

—Totalmente —respondió Gala, sintiéndose más relajada al estar en un espacio íntimo, lejos de las multitudes de la fiesta.

Karime se acomodó en el sofá, y Gala se sentó a su lado. Se sentía bien estar allí, en ese ambiente cálido y familiar. Karime tomó el control remoto y comenzó a buscar alguna película que les pudiera gustar.

——

Después de un pequeño debate sobre qué ver, finalmente decidieron comenzar con una comedia romántica. La pantalla se iluminó, y las risas comenzaron a llenar la habitación. A medida que la película avanzaba, las miradas y los comentarios cómplices entre las dos se hicieron más frecuentes. Gala no podía evitar observar a Karime de reojo, admirando su risa contagiosa y la manera en que se entregaba a la trama de la película.

—Es tan cliché, pero no puedo evitarlo. ¡Me encantan estas películas! —exclamó Karime, riendo mientras una escena romántica comenzaba a desarrollarse en la pantalla.

—A mí también me gustan. Es divertido ver cómo se enamoran, aunque sea en un mundo de ficción —respondió Gala, sintiéndose más cómoda y abierta a la conversación.

A medida que la película continuaba, la atmósfera se volvió más relajada. Se quedaron en silencio durante un rato, disfrutando de la compañía mutua. Gala sintió una calidez en su interior, una sensación de paz y felicidad que no había experimentado en mucho tiempo. Era un momento perfecto, y las distracciones externas se desvanecieron.

Confidencias al Anochecer

Cuando la película terminó, Karime se levantó para preparar más palomitas. Mientras tanto, Gala miró por la ventana, observando las luces de la ciudad brillar en la oscuridad. Todo parecía perfecto.

Karime regresó con un tazón lleno y se acomodó de nuevo en el sofá, llevando su cuerpo más cerca de Gala.

—¿Sabes? Me gusta pasar tiempo contigo así. Es diferente, y creo que hemos creado algo especial —dijo Karime, mientras comenzaba a comer las palomitas.

Gala sonrió, sintiendo que su corazón latía un poco más rápido.

—Sí, me siento igual. Todo ha sido un torbellino últimamente, pero me encanta estar aquí contigo, lejos de todo —respondió, encontrando en sus palabras una honestidad que la sorprendió.

Karime se volvió hacia Gala, su mirada se volvió más intensa, casi vulnerable.

—A veces me preocupa que lo que tenemos sea solo un “casi algo”. Quiero más. Quiero que esto sea real —confesó Karime, con una mezcla de anhelo y miedo en su voz.

Gala sintió una punzada en su pecho, resonando con las palabras de Karime. Sabía que había algo genuino entre ellas, pero la idea de avanzar la asustaba un poco. Sin embargo, no quería que eso interfiriera en la conexión que estaban formando.

—Karime, me gusta lo que tenemos, y me gustaría que se convirtiera en algo más. Pero también creo que necesitamos tiempo para saber exactamente qué queremos —respondió Gala, intentando ser honesta y cuidadosa a la vez.

Karime asintió, comprendiendo el punto de vista de Gala.

—Tienes razón. No quiero presionarte, pero también no quiero perder lo que tenemos. Eres importante para mí —dijo Karime, su voz suave y sincera.

Gala sintió que la conexión entre ellas se profundizaba con cada palabra. Quería ser valiente, quería abrir su corazón, pero había tantas emociones en juego.

Otra Película, Otro Momento

Decidieron ver otra película, eligiendo una de aventuras. La historia era emocionante y entretenida, lo que ayudó a aliviar la tensión del momento anterior. Sin embargo, a medida que avanzaba la trama, Gala sintió cómo la energía entre ellas se volvía más palpable, como si el aire a su alrededor estuviera cargado de posibilidades.

A medida que la acción se intensificaba en la pantalla, Gala comenzó a observar cómo Karime reía y se emocionaba, y eso hizo que su corazón latiera más rápido. Sin pensarlo, Gala tomó la mano de Karime, entrelazando sus dedos. Karime se detuvo por un momento, sorprendida, pero luego sonrió y apretó la mano de Gala en respuesta.

—Me encanta esto —dijo Karime, su voz casi un susurro.

Gala sonrió, sintiendo que era el momento perfecto para acercarse un poco más. La película se volvió un mero fondo, mientras sus miradas se cruzaban, cargadas de emoción.

Después de un instante, Karime se inclinó hacia Gala, y, con una suave confianza, sus labios se encontraron en un beso tierno. Fue un beso lleno de promesas y anhelos, un reflejo de lo que ambas deseaban ser.

Gala cerró los ojos, dejándose llevar por la calidez del momento. No había dudas ni miedos, solo el deseo de estar cerca de Karime. Aquel beso se sentía como un nuevo comienzo, como un paso hacia lo que realmente querían.

Cuando se separaron, ambas respiraron entrecortadamente, sintiendo el peso de lo que había pasado.

—Esto es… increíble —dijo Gala, todavía un poco sorprendida.

Karime sonrió, su mirada brillando con emoción.

—Sí, lo es. Y lo quiero más —respondió Karime, acercándose de nuevo, susurrando en el aire entre ellas.

Ambas sabían que habían cruzado una línea, pero era una línea que deseaban haber cruzado. La conexión se había fortalecido, y lo que habían empezado como un “casi algo” estaba tomando forma. Con la promesa de seguir explorando ese nuevo camino, se acomodaron en el sofá, dejando que la película siguiera fluyendo mientras compartían risas y susurros en un nuevo capítulo de su historia juntas.