𝟮𝟵 | 𝗘𝗹 𝗦𝗵𝗶𝗻𝗶𝗴𝗮𝗺𝗶.

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Mi llamado melodioso hizo voltear a ver los tres.

—¡Yuju~! Karasuma~. — Canturreo sentada arriba de aquel monto de escombros recargando mis brazos atrás de mi y apoyaba mi pierna encima de la otra. —¿No me piensas invitar a jugar un poco? Que egoísta. —Solte cambiando mi tono a uno más hostil sin dejar una sonrisa pequeña.

Inspeccione cada parte de la pelea sin decir nada, tanto por la impresión como por el hecho de que no hay nada más que decir, vi a mis colegas: Karasuma, aparte de tener heridas y estar sucio, esta desnudo de cintura hacia arriba.

—Uy... que le paso a tu camisa. —Lo señale perpleja y un poco extrañada por ser primera vez que lo miraba así.

Él solo dirigió la mirada hacia un lado y me percate del estado real de Irina, aparte que traía un vestido de esos eroticos y tirantes, estaba lastimas y sucia, tenía una vara de metal en su brazo y tenia pequeños trozos de tela blanca.

Hasta que mi vista se fijo en aquel hombre de cabellos grisáceos de traje negro que suponía, era el enemigo, me miraba con una sonrisa atenta que solo sabía detectarla en algún lugar, provocando que mi rostro se sombreara de seriedad al darme cuenta quien era.

Mírate (T/N), no sabía que ahora eras maestra. —Expresó mientras me miraba con su sutil sonrisa mientras yo me estaba inmovil en mi puesto.

Esas conjunto de palabras sorprendió a los otros dos.

—Irina ¿por qué demonios tuviste que aliarte con este idiota? —Pregunte sin explicar más.

—¿¡Co...como?! ¿Se conocen?

Sigues igual de hermosa como la última vez que nos vimos, es más, me atrevo a decir que estas mucho más radiante de lo que te recordaba. —Continuo hablándome.

—De todos los asesinos del mundo, ¿tuviste que traicionarnos con este? —Evadi su alago arqueado una ceja para la mujer, que agacho la cabeza de culpa.

¿Sabes? Sigo opinando de que tu y yo hubiéramos sido grandes padres, no me molestaría nada viniendo de ti.

—Pero a mi si me molestan cosas viniendo de ti, ¿Que te parece eso? —Mi actitud tosca le causo gracia.

Aveces eres tan simpatica~, por eso siempre me llamaste la atención. —Expreso con una mano en el pecho. —Escucha cariño...

Cariño...

Cariño...

Cariño...

Odiaba ese apodo viniendo de sus labios.

✎...ʜᴏʀᴀ ʟɪʙʀᴇ...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora