There's a world out there

Capítulo 28

Zayn

El domingo por la mañana desperté con Susan sobre mí, y creo que mi corazón pudo haber explotado, ya que latía demasiado fuerte pensando en la posibilidad de que ella despertara en mis brazos así el resto de mi vida. Wow, estoy yendo muy lejos. Malik, recuerda, tómate tu tiempo. La última vez no lo hiciste, y mira como terminaste.

Igualmente, no puedo evitar sonreír como un idiota ante el recuerdo. Estoy yendo a la casa de Lucy y Tyler, ya que le prometí que llegaría a visitarla, pero hoy me tocaba día de grabación, así que hasta ahora pude venir.

El domingo hubiera sido un día de lo mejor, sin embargo y como era costumbre ahora, Harry y Lucy estaba en el medio. Esos dos empezaban a estorbarme, creo que sería conveniente que de una vez admitieran que está locos el uno por el otro, y dejaran de intervenir en mi intento de relación con Susan. Pero no, la misma mañana del domingo, Susan se despertó, me sonrió, pero eso se fue al demonio apenas se dio cuenta que Lucy no había regresado a la casa aún.

Yo le dije que definitivamente debería estar con Harry, y que él cuidaría de ella, pero eso era lo que más preocupaba a Susan. Al parecer no confiaba en el juicio de Harry, ni yo lo haría, teniendo a Lucy tan cerca y ebria. Así que apenas Tyler se despertó y bajó a buscar algo para la resaca, Susan le planteó lo que estaba pasando, a lo cual, Ty no fue de mucha ayuda. Ya que sus teorías de como Lucy y Harry habían terminado como una novela erótica y que ahora eran la pareja más feliz sobre la tierra, no hizo nada por calmarla. Es más, lo empeoró.

Después de desayunar los tres juntos, decidí que lo mejor era irme y buscar a Harry, o al menos llamarlo para saber si todo estaba bien, me despedí de Susan, con un beso un poco más largo de lo que debería, pero no podía evitarlo, la iba a extrañar, así que le prometí que el lunes iría a visitarla. Me despedí de Tyler, que me dio una mirada de ternura y amor infinito, y salí directo a mi auto.

Suspiré, maldiciendo al estúpido ojiverde y lo llamé.

- ¿Hola? - Oh Dios, suena como si lo hubieran atropellado tres veces, y pudiera caminar a pesar de eso.

- Harry, ¿está Lucy contigo? - entré al auto y esperé a que contestara.

- Se está bañando ahora, ¿por qué? ¿Qué pretendes? - alarma en su voz. ¿Qué demonios le sucede?

- ¿Por qué estas nervioso, Styles? Dios, dime que no hiciste nada con ella. ¡Dímelo, carajo! - Bien, ahora sí estoy cabreado.

- ¡Yo no hice nada! ¡Ella está bien! Solo tiene resaca... ¿Para qué quieres saber? - creo que logré respirar mejor que en toda mi vida.

- Por nada, Susan la está buscando como loca. Pero le diré que está contigo, así la irá a traer y no tendrás que lidiar con esto - empecé a bajar de mi auto.

- ¿Susan? Oh... Cierto... Yo... No lo hagas, la iré a dejar en cuanto me diga que quiere irse - una risa nerviosa del otro lado. ¿En serio estoy hablando con el verdadero Harry?

- Harry... ¿Estás seguro que estas bien? Puedo ir a traerla yo si quieres - levanté una ceja, vi la pantalla de mi celular para ver si había marcado bien.

- ¿Qué? Ni se te ocurra - su voz era paranoica.

- Bien, tranquilo - Entonces entendí - No quieres que se vaya ¿no? - mi voz son sorna salió a la luz.

- Ella se ira cuando ella quiera, y seré yo quien la vaya a dejar - empecé a reír muy fuerte, tanto que tuve que subir a mi auto de nuevo. Pensé que lo de Harry era un simple capricho, pero, oh demonios, no podía estar más equivocado.