Dos adolescentes con dos lados opuestos: uno sabe vivir la vida y el otro ni siquiera vive su vida.
Ella es una genio capaz de resolver cualquier problema mental; el otro, un desastre que apenas sabe lo necesario de la escuela.
Uno es un rebelde que...
Esa misma noche, luego de lo sucedido, pasaron varias cosas interesantes en los departamentos que estaban al lado del mismo pasillo.
En el departamento de Shelon, Leonard intentó hablar con él sobre la decisión de separar a Sky de Theo, ya que no era justo porque el chico se había portado bien.
Mientras tanto, Sky se la pasó jugando calabozos y dragones con Rajesh, y Howard se la pasó genial. Pero una parte de ella seguía triste por pensar que tal vez ya no iba a poder hablar con Theo, y se sentía incómoda con la situación, además de no parecerle justa.
Ese departamento sí que era un caos de emociones, pero no tanto como el departamento de Penny.
Theo se la pasó acostado en la cama de la habitación que Penny le dio al llegar y estaba arrojando una pelota arriba y abajo mientras la atrapaba.
Se sentía molesto y decepcionado; no era justo alejarse de una chica como Sky. No es que estuviera al punto de deprimirse por ser separado de Sky, pero realmente le llamaba la atención ella.
No era como alguna de sus exnovias; no era ese tipo de chica que te hace un drama o una escena, que exige que le compres algo o se queja por algo. No la conocía mucho, pero sentía una gran conexión con Sky y no quería perder eso.
¿Dónde estuvo Penny esa noche? Simple: en la sala, con su teléfono en una conversación telefónica que pondrá a Shelon en su lugar.
Esa llamada solamente la usó una vez hace un año atrás, cuando tuvo la discusión de los tres strikes y se arregló el problema.
¿Ustedes creen que el capítulo anterior estuvo lleno de drama? Bueno, entonces agárrense bien del teléfono y presten atención a lo que se viene.
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Al día siguiente, ese sábado temprano, Shelon salió molesto de su departamento para ir al de su vecina del frente.
Seguía molesto, aún con el teléfono en mano, mientras tocaba la puerta. - ¡Penny, Penny, Penny! - Tres veces la tocó, como siempre solía hacerlo.
Ella abrió la puerta con una sonrisa burlona y triunfante. - ¡Shelon! - susurró mientras aún llevaba su bata de dormir y sostenía su café.
Al verla, él quedó en silencio, apretando los dientes. - ¿Volviste a acusarme con mi madre? -
Penny se apoyó en la puerta con la misma sonrisa burlona y dio un enorme sorbo al café, disfrutando tanto de la bebida como del momento. - Así es. ¿Algún problema, cariño? -
Eso molestó más a Shelon, quien intentaba mantener la compostura. Claro que había un problema; para él era evidente.
Theo se iba a salir con la suya y todo gracias a Penny, ya que ella había llamado a su madre y lo había acusado.
No importaba lo que le había dicho su madre; le regañó por no permitir que Sky se acercara al primer chico con el que hablaba sin que fuera de la familia.
