VELKAN

Capitulo 8

Ahsley

Vanessa aun me sujetaba de la mano, iba refunfuñando.

— ¡odio cuando se pone en ese plan! — dijo y apretaba mi mano.

— ya, Vanessa suéltame— solté mi mano de su agarre.
—tranquilízate—.

— Es que no puedo— me miro —me choca que te haga sentir mal solo por su arranque protector— la parte trasera tenía una mesa grande con un hermoso mantel blanco, estaba adornada con vajillas blancas y cubiertos de acero que parecían fueran de plata.
Me di cuenta de que esto solo era una comida algo familiar o de personas cercanas a el, note a Pitaya hablando con un chico del cual ignoraba, ya que aun no le conocía.

—Perdóname Ahsley por decir que vinieras, no debí traerte, ese vieja es intensa. —mi amiga de verdad estaba molesta yo igual lo estaba, pero no quería hacerla sentir mal.

— De que vieja hablan — comenzó a reír el papá de Velkan tras de ella y las dos dimos un brinco de espanto volviendo la mirada al Señor.

— señor Dávalos, nada, nada ja,ja,ja,—  Vanessa reía nerviosa mientras se acomodaba el cuello de su blusa.

El señor Dávalos me miro aun riendo.
— hola, señorita, es bueno volver a verla — el señor sonrió y fue cuando me di cuenta, su sonrisa era la misma que la de ella.
— también me da gusto a mi — agregué.

— porque no me ayudan con la carne — sonreía.
— claro señor Dávalos — dijo Vanessa y caminé tras de ellos.

Vanessa se veía muy contenta mientras platicaba con el señor Dávalos parecía que se le había olvidado el enojo y a mí el solo verla así de feliz, me había hecho olvidarlo también, hacía mucho que el padre de Vanessa había muerto estaba segura de que el padre de Velkan era una gran figura paternal para ella.
»Me dedique a terminar la ensalada mientras el señor Dávalos estaba con Vanessa atendiendo la carne.

— ¡Velkan! — se acercaba pitaya a ella mientras Iliana que iba detrás de la cumpleañera como un guardaespaldas le lanzó una mirada asesina, Pitaya ya no se podía acercar más hasta que ambas comenzaron a discutir o eso parecía ya que donde yo estaba no se oía absolutamente nada, ahora me dedicaba a cortar jícama, pepino, los mangos ya estaban cortados, velkan puso música en su computadora conectado a unas bocinas y era nada más y nada menos que la música de la banda que le había regalado en la playera, sentí que mis mejillas subieron de tono.

— ese era mi trabajo — decía ayudándome a cortar las ultimas jícamas.
— lo siento — fue lo único que dije manteniendo la mirada en lo que hacía, estaba tan nerviosa que sentí que los pepinos se multiplicaban.

— ¿Por qué siempre te disculpas? — Me pregunto.

creo que sentí su mirada en mi porque la piel se me erizo toda. Sonreí nerviosa o eso creo, pero ni supe porque... tal vez era porque tenía toda su atención, creí a ver visto que ella igual sonrió, pero creo que solo lo imagine.

La mesa estaba lista, las botanas con chile y las verduras bataneras, cada uno se sentó en una de las sillas, había un lugar vació justo alado donde velkan estaba, ella dejo sus regalos y se sentó, quedo a un extremo de la mesa y su papá en la otra, Vanessa quedo cerca de velkan y yo alado de ella, frente a mi estaba Iliana y a su lado izquierdo el chico que no conocía pero que sentía que a veces me observaba, alado de mi estaba Pitaya, pero muy distante.
» Todos comenzaron a comer, Iliana trato de hacerse la chistosa dándole de comer a velkan en la boca, pero ella se negó. El papá de velkan platicaba un poco de como era su hija cuando era pequeña y velkan sonreía forzadamente. Terminamos de comer y estábamos comiendo las botanas.

— un segundo ahora vuelvo — el padre de Velkan se puso de pie y lo vi entrar a la casa.

— que tonta no les presente a mi hermano, ¿verdad? él es Evan — Iliana nos presentó al chico que antes no había tenido un nombre.

Vanessa y pitaya lo saludaron al igual que yo.

— Evan también es mi primo- comento tranquilamente Velkan, ¿eso significaba que Iliana era su prima? me preguntaba mientras mi corazón se sentía aliviado de alguna manera y no sabía por qué... o quizás sí.

El padre de Velkan regreso con el pastel, lo dejo justo frente a Velkan y comenzó a encender las velas, todos comenzaron a cantar las mañanitas a la festejada, yo me uní después al coro y cuando este finalizó, ella miró detenidamente un poco las velas y luego las sopló,» Vanessa ayudó a servir el pastel, Iliana le pidió a velkan que abriera sus regalos, uno por uno velkan fue mostrando los regalos hasta llegar de nuevo al mío.

— aún falta el mío-dijo el padre de velkan llegando con una caja algo grande y dándosela a la chica.

— ¿Qué es? — pregunto curiosa.
— ábrelo y lo sabrás —animo el Señor Dávalos.
— Velkan abrió el regalo y todo quedamos sorprendidos- papá es... es hermoso — había un hermoso violín dentro tenía un gravado de dragón estaba tallado con mucho cuidado y detalles, miró a su padre y este le dio una abrazó.
— tenía algo de tiempo libre, los Dragones son tus favoritos... — agregó y sonrió el papá, -toca algo para nosotros-.
— ¡si! Velkan, toca!! — Ileana se emocionó.

Ella se puso de pie y yo estaba más emocionada que nunca, ella podía tocar violín.... comenzó a tocar una pieza sublime y deleitante, tonos tristes y alegres, todos estaban callados observando, yo no podía dejar de mirarla, tan majestuosa tan... tan misteriosa.

Cuando ella termino de tocar se escucharon los aplausos, Vanessa pareciera que quería llorar, seguro había recordado algo triste pero tenía dibujada una sonrisa en el rostro.
»La comida había terminado y ayudabamos al señor Dávalos a guardar y acomodar todo, Vanessa parecía a verse divertido después de todos.
Cuando todo estuvo en su lugar, nos despedimos, caminabas a dos casas lejos de la suya cuando escuchamos la voz de Velkan detrás nuestra.

— ¿Piensas acompañarnos? — dijo Vanessa con una sonrisa.

— si eso te molesta no me importara retroceder e irme a mi casa — bromeo ella sonriéndole a mi amiga, quedaría porque esa sonrisa fuera hacía mi.... ¿Qué? ¿qué cosas estoy pensando?

— Gracias por venir— le dijo a Vanessa ella le dio un leve puñetazo en el hombro.

— no me lo perdería — dijo.

— gracias por venir — ahora me estaba mirando y yo no sabía ni que hacer.

— De nada, Vanessa me invitó — le echaba toda la culpa posible a ella.

— claro yo siempre soy genial — comenzó a reír y velkan sonrió, al fin llegamos a mi casa y me despedí de Vanessa.

— buenas noches — agregué.

— buenas noches — dijo Vanessa y por un momento creí a ver oído que velkan dijo algo, pero supuse era mi imaginación, caminé hacia la casa y volví la mirada, ellos aun esperaban que entrara, una vez dentro pude ver que ambos que regresaban.

Nota: Primera vez que dejaré un comentario mio en esta obra, si alguién quiere saber cual es la melodía que toca Velkan para darse una idea de lo que los personajes puedan sentir, les dejo el nombre aquí: Tsukiyo no Violinist del autor Di'LL.

Esta es una de las canciones que Velkan escucha, es lo más nuevo de la banda: Heart Out de The 1975.

Espero hayan disfrutado este capítulo Tanto como yo.