-Hola, Elizabeth -dijo el psiquiatra.
-Hola.-Contesté.
-¿sabes porqué estas aquí? -Me preguntó mientras se agachaba para mantenerse a mi estatura.
-si, asesine a mi hermano de dos años-dije tranquilamente.
Se levantó del piso, me sonrió y se acerco a una enfermera vestida totalmente de blanco. No pude oír lo que decían.
La enfermera asintió y se acercó a mi.
-hola-dijo.
No contesté.
-Bueno te llevaré a tu habitación, ¿cuántos años tienes? -se agachó.
Solamente la miré, mientras pensaba una cosa ¿ a que teme?.
-Me dijeron que tienes nueve años-.
Asenti.
-Bien te llevaré, si quieres toma mi mano- a su mano la sostuvo en el aire. No la tomé.
Su sonrisa desapareció.
-vamos, sigueme-se levantó y fue caminando hacia un pasillo.
La seguí. Había pasillos y más pasillos blancos con forme avanzamos, dio vuelta a la derecha, ahi no habia pasillos sino un gran jardin donde habian personas mayores de treinta con ropa olgada color azul y caminaban lentamente, algunos eran acompañados por enfermeros, un hombre aparentemente mayor que los demás era golpeado por un enfermero, el hombre corría y el enfermero lo perseguía, lo atrapó y lo tiró en el pisó y le dio patadas en el estómago.
-No tienes porque ver eso- dijo la enfermera, caminando rápidamente, entramos por otro pasillo y no vi más del hombre.
Llegamos a otro pasillo igual que los demás, caminamos por el y se acerco a la penúltima puerta a la izquierda al fin del pasillo.
-Aquí esta- dijo alegremente, sacando una llave de su bolsillo. Abrió la puerta de metal y me dejo observar. Vi una cama pequeña blanca y un retrete, además de las paredes, el techo y piso totalmente blancos.
-Ten- me dio ropa olgada color azul como la de el hombre pero mas pequeña, que agarro de un estante enfrente a la habitacion, la agarre- cambiate y deja tu ropa encima de tu cama. Ahora entra-entre, justo cuando entre se cerró la puerta atrás de mi.
Sola.