38.

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Narra Jade.

Annie se acercó a conversar conmigo en el pasillo mientras yo acomodaba los libros que debía entregar en la biblioteca.

-¿Por qué tienes esa cara? -preguntó acercándose.

-¿Qué cara? Esta siempre ha sido mi cara.

-No. Traes una cara de enamorada que no te quita nadie. Los ojos te brillan.

-No, pff, no -dije nerviosamente.

-¿Qué hiciste, Jade?

-Nada, nada.

-No me mientas, ¿qué ha pasado?

-Nada, Annie, lo juro.

-Haré que te creo, Jade, pero hoy en la tarde iremos al club y me contarás todo. ¿Tiene que ver con el nuevo?

-No, no.

-Bueno, hablando del nuevo, ayer escuché una conversación de mi papá con su padre, hablaron sobre una escuela militar.

-¿Una qué?

-Una escuela militar, que si causaba más problemas su padre lo enviará a una escuela militar, en... un país muy raro que recuerdo cómo se llama.

-¡Hey! Hola, chicas -saluda Stefan, el novio se Annie.

-¡Cosito! -gritó Annie abrazándolo.

-Hola, Stefan -sonreí.

Él la abrazó por la cintura y me sonrió amigable.

-¿Cómo están?

-Pues bien -respondió Annie-. ¿Qué harás esta tarde? Iré con Jade al club, jugaremos algo de tenis, ¿quieres venir?

-Sí, puede que vaya.

-Genial -sonrió Annie, está tan enamorada.

-Oye, Jade, Sam quiere decirte al...

Lo interrumpí.

-No quiero saber nada que tenga que ver con él.

-De portó como un patán con ella -dijo Annie-. ¿Cómo tiene cara para seguir buscándola?

-Es un cretino.

-Cómo sea, chicas, ¿vamos a la cafetería por un café? Necesito uno.

-Yo voy -se apuntó Annie- ¿Vienes, Jade?

-No, debo entregar esto a la biblioteca, los veo en clases.

-Bye -se despidió Annie.

-Adiós, Jade -la siguió Stefan.

Ambos se marcharon y aproveché para guardar los libros en mi casillero. Alguien comenzó a respirar en mi cuello, me volteé y vi a Craske frente a mí.

-¿Qué quieres? -pregunté irritada.

-¿Hasta cuando seguirás con tu jueguito?

-¿Por qué no te largas? ¿No te parece mejor?

Me agarró de la muñeca demasiado fuerte, apretándola con mucha fuerza. Solté un gemido de dolor.

-Mira, mi vida. Sabes muy bien que tú y yo terminaremos juntos, así que deja de hacer tanto drama. Me disculpé.

-Suéltame, Sam.

-Suéltala.

Harry estaba detrás de Sam, lo miré a los ojos, él siempre llega a rescatarme. Como todo un príncipe azul.

Sam me soltó para luego girarse y mirar fijamente a Harry.

-Deja de meterte en MIS asuntos, Styles. Te lo repito, ya estás colmando mi paciencia.

-Y tú la mía, Craske. Déjala en paz.

-Es mi novia.

Harry rió burlonamente.

-Estás jodido de la cabeza -le dijo a Sam, el cual estaba rojo de la furia.

-Ya está, pobretón. Tú y yo a la salida.

-Con gusto -se cogieron de la camisa lo cual me asustó mucho.

-No -susurré.

-Te daré una paliza que no olvidarás en tu vida -dijo Sam para luego marcharse por el pasillo.

Cogí del brazo a Harry para que no fuera tras él.

-¿Por qué hiciste eso? -dije preocupada.

-Yo hago lo que quiero y en estos momentos se me antoja partirle la cara a ese imbécil.

- No, Harry. No puedes meterte en problemas, recuerda la escuela militar...

-¿Cómo carajos sabes eso? -preguntó mirándome fijamente.

Yo me quedé callada sin saber qué decir. Soy tan estúpida, pero sólo lo soy cuando me preocupo por él porque no quiero que se vaya de aquí.

Harry me miró fijamente, su mirada es fría y se nota a kilómetros que está molesto. Abrí la boca pero nada salió, su mirada me paraliza, ¿qué le dijo?

Él me empujó contra los casilleros.

-Niña estúpida, ¿por qué eres tan entrometida? -fue lo último que me dijo antes de marcharse.


Malas Enseñanzas ➳ Jarry. (Slow updates)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora