Naruto y "la bestia"

Nuevo asistente.

En la casa de los Uzumaki:
—Saqué un 79 en el examen de matemáticas, pero la Srta. Nohara dijo que calificaría en curva.-Dijo Menma, el hermano menor de Naruto.
Menma era rubio pálido y tenía el dulce carácter de su padre; Minato Namikaze.
—Tienes suerte de que lo haga así.-Dijo Naruto mientras cocinaba lasaña en el horno.
—Si, lo sé.-Dijo Menma sonriente y acomodando los utensilios en la mesa.
—"Si, lo sé".-Repitió Karin para molestar a su hermano.
Karin era una hermosa peli roja que tenía el carácter de su madre; Kushina Uzumaki.
—Karin, deja de actuar como una niña de siete.
—"Karin, deja de actuar como una niña de siete".-Dijo la peli roja imitando a su hermano.
—¿Por qué no estudias más para no depender de la curva?.-Preguntó Naruto a Menma. Este le respondió encogiendo los hombros.- ¡Papa, estamos listos!
Todos empezaron a comer, ya terminando se recogieron los platos y Naruto los lavaba, cuando al fin finalizó fue a hablar con su padre.
—¿Papa?.-Dijo el rubio sentandose al lado de su padre en el sillón.- ¿Qué te pasa? Has estado muy callado toda la noche.
—Tengo que empezar a buscar un nuevo empleo.-Dijo el rubio mayor con tristeza en el rostro.
—¿Por qué? ¿Qué pasó?.-Dijo el rubio
muy sorprendido.
—Fue un accidente. Quebré algo en la casa del Sr. Uchiha. Dijo que llamaría a mi jefe en la mañana. Me van a despedir.
—Papa, ¿Intentaste hacerle cambiar de opinión?
—Claro que si. Pero el hombre es un...una bestia. Me amenazo con llamarle a la policía.
—¿Por qué? Fue un accidente.-Dijo Naruto muy enojado.
—Eso no cambia nada. Solo he tenido este empleo por unos meses. El Sr. Uchiha es un hombre poderoso y muy rencoroso. Todos lo saben. En la iglesia, en el pueblo, todos.
—Déjame ver si puedo hacer algo.-Dijo Naruto acariciando el collar que le había regalado su abuela Tsunade.
—No, Naruto. Este es mi problema.
—Papa, necesitamos que tengas este trabajo. Si hay algo que yo pueda hacer, lo haré.-Dijo retirándose.
Naruto salió y condujo el auto de su padre hasta la mansión del Uchiha. Ya en la entrada del portón toco un botón verde y una voz hablo.
—¿Si?
—¿Se encuentra Sasuke Uchiha?
—¿De parte de quien?
— El no me conoce. Soy Naruto Uzumaki.
—¿De qué se trata?
—Mi padre, del servicio de reparaciones que vino hoy.
—Adelante. Camine hacia la parte posterior de la propiedad y encontrará al Sr. Uchiha.
—Gracias.
Naruto estaciono el auto y entro a la gran propiedad, era inmensa. Él buscaba al Uchiha, pero se detuvo a apreciar el paisaje de esa noche, aparentemente en esa mansión se veía preciosa la noche adornada con luces y flores. Pero una voz lo interceptó rápidamente.
—¿Qué está haciendo en mi propiedad?.-Preguntó el Uchiha sentado en una banca del inmenso jardín.
—¿Es usted el Sr. Uchiha?.-Este asintió.-Vine a pedirle que no le llame al jefe de mi papa.
—¿Tú eres el hijo del de reparaciones? No me espere que fueras doncel.-Dijo el azabache con cara de pocos amigos. El rubio asintió.- Has de ser un idiota, también.
—Perdón, pero eso es innecesario al igual que la manera en que trató a mi padre.- Dijo el rubio con una risita por lo infantil que se portaba el Uchiha.
—¿La manera en que lo trate? ¿Quieres que lo recompense por quebrar una pieza de arte tan valiosa?
—No, claro que no. Pero no le llame a su jefe. Mi familia depende de él. Lo necesitamos con su empleo.
—¿Sabes lo que cuesta el arte fino?
—Por favor. Tengo una hermana y dos hermanos. Uno de ellos llamado Deidara en la universidad, y necesitan nuestro apoyo.
—Que tú madre trabaje entonces.-Soltó el azabache de golpe.
—Mi madre falleció hace años.-Dijo el rubio con la miraba baja., pero al instante la subió fulminando al azabache con la mirada.- Hago lo posible por ayudar, pero dependemos del empleo de mi padre.
—Que tragedia tan bonita. Pero no cambia nada.-Dijo el Uchiha fulminando al rubio con su intensa mirada rojiza.- Se me hizo una injusticia.
—Fue un accidente.-Recalcó el rubio.- Y si desea que lo repongamos, pues, lo siento. No le podríamos pagar ni una parte d ello que cuesta la pieza de arte. Pero despedir a mi padre no servirá de nada.
—Me hará sentir mejor.
—¿De verdad?...Por favor, debe haber algo que yo pueda hacer, alguna manera de corregirlo.
—Esta bien.-Dijo el Uchiha levantándose del asiento.- Acabo de despedir a mi asistente. Tú la remplazarás. Trabajarás para mí hasta que yo crea que la deuda haya sido pagada.
—Pero tengo un empleo.
—¿Quieres que le llame al jefe de tu papá?.-Dijo el azabache mientras se retiraba del jardín, pero se detuvo y observo al oji azul.- ¿Dónde trabajas?
—Soy asistente de medio tiempo en una oficina de ortodoncia.
—¿Trabajas medio tiempo y dices que tu familia está en necesidad?
—Trabajo y voy a la escuela medio tiempo.
—Supongo entonces que tienes el trabajo que necesitas.- Naru asintió.- Cuando no estés trabajando, vendrás aquí. Puedes salir del mismo modo en que entraste.
Naruto suspiro y luego se percató de que el Uchiha apago las luces del jardín a pesar de que él estaba afuera. El rubio estaba enfurecido pero, ¿Qué más podía hacer? Ahora tendría que trabajar con el Uchiha.
—Gracias.- Se dijo así mismo.
Ya en la empresa de ortodoncia:
Naruto llevaba su uniforme de trabajo mientras cerraba las puertas y apagaba las luces de la oficina.
—Sai no tarda en llegar.- Dijo Ino en la recepción.
—¿Qué?.-Dijo el rubio confuso.
—¿Te acuerdas? La exposición, hoy.
—Oh, no puedo ir. Lo siento.
—¿Por qué no?
—Es un cuento muy largo.
—Pero Sai ha estado preguntando por ti desde que se conocieron. Me pidió que la organizará para que vinieras.
—Lo siento. Lo siento.
—¿Hay algo de él que no te gusta?
—No, no es eso. Es que tengo otro compromiso.
—¿Enserio?.-Dijo la blonda entregándole unas llaves al rubio.
—Ino, no estoy tratando de escaparme de esto-dattebayo.
—¡Ey!.-Gritó un pálido azabache entrando a la oficina.
—¡Hola!.-Dijo el rubio sonriendo.- Debo irme. Discúlpame.
Naruto se fue pasando a Sai de largo quien se quedó sorprendido por la acción del rubio.
—Tendrá que ser otro día.-Dijo la blonda sonriendo.
—¿Por qué? ¿Acaso dije algo malo?.- Dijo el azabache preocupado.