Uzumaki.

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Naruto necesitaba llegar con su yo actual lo más pronto posible y así evitar una desgracia, de lo cuál se podrían arrepentir. Ya estaba por ocultarse el sol en Konoha, tenían que ponerse en acción rápido, pues no sabían cuanto tiempo iban a durar en el futuro y no sabían que cambios podría haber.

-Papá..
-Hima-chan, se me hace muy extraño que nos llames mamá y papá'ttebayo.- Sonrió mientras se rascaba la nuca.- Porqué no mejor solo ¿Naruto y Hinata?
-P-pero... Es que es muy extraño llamarles por su nombre... ¿Y sí sólo les digo ma y pa?
-Es-esta bien hinawari-chan.- Hinata le Sonrió a su hija con una dulzura, que parecía que la conocía desde hace mucho tiempo.- Boruto.. ¿Y tú?.- Boruto volteo a verlos, no sabía muy bien lo que estaban haciendo, sí era correcto o no, pero está vez no quizo hacerle caso a su subconciente.
-Mamá y tú el viejo'ttebasa.- En definitiva era el hijo de Naruto Uzumaki.
-Bien, vamos.- Los Uzumaki y la Hyuuga se dirigieron al que ahora es el hogar de la familia Uzumaki, más no contaban con tan agradable sorpresa que se llevarían.

*Konoha del pasado*

-Kakashi-senpai.
-¿Mmmmh?
-Kakashi-senpai.
-¿¿Mmmhh???
-¡HATAKE KAKASHI!
-¿Qué quieres pakkun?.- contestó todo adormilado.
-Solo para recordarte tres cosas. La primera: Tus alumnos siguen desaparecidos en no se que dimensión. La segunda: Te encargaron tan importante misión sólo a ti y no haz hecho nada. Y la tercera: ¡TE LA HAZ PASADO DORMIDO!.- cuando Pakkun volteo a ver a Kakashi, este ya se encontraba en el quinto sueño de nuevo.- Maldita sea, ¿Porqué eres tan flojo?
-¿Porqué no descanzas un rato? Ya me agote de sólo buscar sus rastros, es tan agotador hacer todo por tí.

Una venita surgió en la frente de pakkun, ¿en verdad había dicho aquello?.

-Kakashi.. Tenemos que buscarlos ya, llevan horas desaparecidos, ya casi oscurece y...
-Shhhh...- Kakashi cayo a su perro colocando dos de sus dedos en su osico.- Mañana a primera hora nos ponemos en marcha.- En realidad quiero ver hasta donde llega la inteligencia de los cuatro juntos, para trabajar en equipo y buscar la forma de volver.
-Hmp... Yo me largo.- Pakkun creía que su amo solo se hacía el vago y no se interesaba por sus alumnos, pero jamás pensó que estaba midiendo sus conocimientos de trabajo en equipo.

*KONOHA ACTUAL*

-Bien mini-yo.. Ya nos hemos cambiado.
-Mejor así..- Sakura observo a su yo actual, y se dio cuenta del cambiaso que había dado. Después observo a Sasuke-kun... De verdad era tan apuesto.- ¿Podrían regalarme un vaso de agua?.- Sakura tenía sus mejillas rojas solo con observar al Uchiha mayor, es que aún no lo creía.
-Claro que sí.- La Uchiha se levanto y fue por un vaso de agua, al momento de darle la espalda, sakurita gritó de la emoción.
-¡KYAAAAAA!
-¿Qué pasa?
-Tú.. Tú... Él.. Ustedes..
-Hmp...- Sasuke sonrío de lado, pues sabia perfectamente a lo que se refería.
-¿Qué tienes mini-yo?
-U-usas el símbolo U-uchiha.
-Ahhh... Eso.- Sakura comenzo a reír nerviosamente, pues se había olvidado por completo que aún era nuevo todo esto para su mini-yo.- Bueno aquí está tu vaso de agua, ¿Quieres contar el resto?.- Sakurita tomo el vaso y bebió de el para después continuar.
-Bien, no se porqué ni cómo pero Hinata estaba con nosotros, pensamos que estabamos en nuestra aldea, pero al observarla no era así, de pronto Sarada apareció, junto con Boruto y un niño de cabello Blanco.
-¿Quién es Sarada?.- Sakura estaba confundida, no sabía de quién rayos hablaba... Conocía a Boruto, el hijo de su mejor amigo, y al de cabello blanco no lo recordaba muy bien.
-¿Cómo que quién es Sarada? Es su hija, ¿No lo recuerdas?
-¿Hija?.- Sasuke estaba sorprendido.
-¿C-como que una hi-hija..? Apenas Sasuke-kun y yo estamos saliendo.
-¿Saliendo? Pero me acaban de decir que estan casados.
-¿Casados?.- Sasuke se exalto, como iba a estar casado con ella, si recién regresaba a la aldea de su viaje de rendición.- Sakura... Gira.- Sakura obedeció, y en su vestuario el Simbolo Uchiha ya no estaba, sólo estaba el simbolo Haruno, en la casa todo aquello que los simbolizaba como familia comenzo a desaparecer.

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Sakurita se empezo a preocupar al recordar lo que Sasuke-kun le había gritado hace unas cuántas horas.. ¿Habrá arruinado todo? ¿Que le habrá dicho a Sarada? Esto estaba llegando demasiado lejos, muy peligroso. Tenían que salir de ahí cuánto antes, no podían perder tiempo o en serio las pagarían muy caro.

-Esto esta mal... Muy mal.
-¿De que hablas?
-¿No recuerdan nada? ¿Quienes son? ¿Que es lo que hacen?.- Ambos negaron, pues pensaban que recién comenzaban su historia.- Tengo que irme, necesito encontrar a alguien.
-¡¡Espera!!.- Sakurita volteo, pues Sasuke la había tomado del brazo.- ¿Cómo llegaste aquí, a dónde vas y a quién necesitas encontrar?.- Demasiadas preguntas, una sola respuesta. El tiempo.
-Lo siento.- Sakura se soltó de su agarre y se dirigió a la salida, no esperaba encontrar lo que buscaba en la puerta.- Sasuke-kun.
-Sakura.. Ella...
-Lo se, tenemos que remediarlo, ellos tampoco recuerdan.
-¿Ellos?.- pregunto dudoso.
-Sí... Entra.

Sasuke paso dudoso, aun cargaba a Sarada en brazos, cada vez mas débil, más palida, sí seguía a este paso ella podría... Desaparecer.

-Sasuke-kun...
-Hmp...
-Ustedes... Yo... Tu no...-Sasuke no creía lo que sus ojos veían, eran ellos, pero adultos... Y aunque no lo quisiera admitir se veían bien... Juntos.

*HOGAR DE LOS UZUMAKI*

-Aquí es.- Dijo Himawari.
-Espero este el viejo en casa'ttebasa.
-Bien Hima, Boruto... No hay tiempo que perder.- Naruto por primera vez estaba actuando responsablemente.

Himawari abrió la puerta de su hogar y aparentemente estaba vacío, a pesar de que ya había oscurecido, está estaba vacía. Los cuatro dejaron los zapatos en la entrada y se adentraron al hogar. Por primera vez Naruto se sentía inmensamente feliz, pues había logrado lo que siempre quiso. Una familia. Hinata por su parte estaba sonrojada hasta las orejas, más no sentía que se iba a desmayar, pues todo esto de algún modo le encantaba. Hima y Boruto observaban a sus padres, pues sabían la historia de ambos, sabían la historia de su padre, su sufrimiento y la soledad que por mucho tiempo lo acompañaron.

Estaban tan sumergidos observando todo y observando a sus padres, cuando de pronto un estruendozo ruido hizo que todos volvieran a la realidad. Algo se había caído, y ese ruido provenía de la parte de arriba.

-Creo que no estamos solos.
-Onii-chan...
-Lo se Hima, activa el Byakugan.

Y así lo hizo, Himawari activo su byakugan y observo. Y efectivamente no estaban solos, ahí con ellos estaban sus padres.

-Onii-chan... Solo son mamá y papá... Estan el estudio.
-¿De verdad es el viejo o es un clon?
-Oye.. ¿Porqué dices que un clon?
-Porqué cómo te lo he dicho antes, siempre estas tan ocupado, que terminas mandando un clon.
-B-boruto...
-Dime mamá...
-Creo que no debemos p-perder tiempo, S-sarada esta en peligro.
-Tienes razón.. Vamos.

Los cuatro subieron al estudio del Hokage, esperando que no pasara nada malo. Boruto y Himawari sabían que no pasaba nada, pues sus padres no acostumbraban a pelear. Pero Naruto tenía duda, pues aunque no se consideraba alguien agresivo, tenía miedo que pudiese cambiar. Y ese cambio significara golpear o maltratar a Hinata y eso jamás se lo perdonaría. Hinata tenía miedo, pues ese ruido era muy fuerte, aún así confiaba plenamente en que Naruto jamás la tocaría ni la golpearia.

Subieron las escaleras poco a poco sin ser descubiertos, lo que no sabían es que ya los habían sentido desde antes que decidieran ir a su casa, pero nunca pensaron que los descubririan en tal situación.

-Na-naruto-kun... Espera...
-Tranquila Hina-chan... Yo se que esto te gusta mi amor.- decía el Uzumaki, pues Hinata solo tenia sus bragas y una camisa de su esposo puesta y Naruto solo llevaba sus boxer y su pantalon.

Ambos se besaban y acariciaban apasionadamente, pues sabían que estaban solos. Sus hijos estaban en la calle con su mini-yo, Naruto ya le había contado a Hinata lo que estaba sucediendo y aprovecharon la situación. Jamás se imaginaron que los encontrarían así, pues sabían que sus hijos estarían maravillados con sus "yo" antiguos.

-Solo un poco más Bebé...
-Por favor.. Hazlo ya... Quiero ser tuya una vez más...
-Como pidas mi reina.-cuando Naruto iba a retirar las bragas de su esposa, la puerta se abrió bruscamente, provocando un colapso familiar.

-Himawari no veas...- Boruto había tapado los ojos de su pequeña hermana, mientras el cerraba los suyos con fuerza.- ¡Que asco viejo!
-¡KYAAAAA!.- Ambas Hinatas habían gritado con fuerza, una cubriendose lo que podía y otra asotando desmayada en el piso.
-¿Que hacen aquí?.- Gritó el Uzumaki mayor.
-Para la proxima tocaré.- Decía el mini-Uzumaki con un enorme sonrojó, y sangre escurriendo de su nariz, el Uzumaki mayor lo miró y con una gran cara enrojecida tomo aire y le gritó-¡NARUTOOOO!

Continuara...

Naruto: Un viaje al futuro. [Reeditando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora