Capítulo 2

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En Auradon, era de medio día cuando Gina llegó a la preparatoria. Después de unos minutos al llegar a la escuela, cuando Gina se bajó de la limusina, pudo ver que la preparatoria estaba algo tranquila y silenciosa. En frente de la entrada pudo ver que una mujer elegante con un traje color morado pastel se acercaba para recibirla, era el Hada madrina.
-Es un gusto tenerte aquí en Auradon, querida- dijo amablemente- soy el Hada madrina,la directora de la preparatoria.
-¿El hada madrina?¿La de Cenicienta?-preguntó Gina
-¡Así es, para ser del mundo de los humanos sabes algunas cosas!- respondió el Hada madrina.
-Gracias, pero... ¿Es usted?... Pero me habían dicho que usted era-
-Ya estoy aquí, Hada madrina-la interrumpió un joven que se detuvo junto a ellas mientras se acomodaba la corbata de su traje.
-Excelente- le contestó el Hada madrina al joven- Gina, te presento a Alan, él te dará un recorrido para conocer mejor la escuela y te guiará a tu dormitorio. Sé que estas un poco confundida por este gran cambio pero tus clases de Historia comienzan mañana en la biblioteca.
-De acuerdo, gracias de todas formas- contestó Gina un poco confundida.
-Mientras, yo estaré reuniendo a toda la escuela- dijo el Hada madrina despidiéndose y dirigiéndose a la preparatoria.
Después de que el Hada madrina se retirara, Gina preguntó:
-¿Y para qué es ésa reunión general?
-Es para la bienvenida a los nuevos estudiantes que vienen aquí a Auradon- le contestó Alan- Aunque el príncipe Ben estaría aquí a tiempo sabiendo que fue su proclamación como rey en primer lugar
-¡¿Hay un príncipe estudiando aquí?!-preguntó Gina sorprendida
-Bueno, en realidad...
-¿Pero qué estoy diciendo? Si me habían dicho que de ahora en adelante iba a ir a un instituto lleno de príncipes y princesas en primer lugar- agregó antes de que Alan le explicara- Lo siento... ¿Ibas a decir algo? Es que sigo nerviosa por este nuevo cambio
-No, está bien... Me ahorraste el tiempo de explicártelo- agregó Alan calmándola
-Pero si hay príncipes y princesas aquí... Entonces ¿También eres uno?-le preguntó Gina curiosamente
-Sí, lo soy de parte de mi madre, la princesa Jazmín de Agrabah- le contestó
-...Pero si tus padres son árabes ¿Por qué vistes de traje?
-Es por los nuevos estudiantes que vienen para acá- respondió Alan- y nos pidieron que fuéramos presentables para su bienvenida.
En eso, Gina vio que un pequeño roedor salía detrás del hombro de Alan
-Creo que tienes algo en el hombro- le dijo Gina un poco insegura e incómoda.
-Cierto, él es Pip.
-¿Pip?
-Era amigo de Giselle, y supo que su hija vendría aquí a Auradon.
-Creo que... Recuerdo que mi madre me habló acerca de su amigo Pip- agregó Gina entusiasmada.
-Y seguramente él fue uno de los pocos que quiso recibirte cuando llegaras- mencionó Alan sosteniendo a Pip.
-¿En serio? Gracias, Pip, ahora me siento confiada en este lugar- le dijo Gina a Pip amablemente.
-¡No hay de qué!- le respondió Pip.

En un segundo, Gina gritó del susto y lo tiró al suelo golpeándolo con su mano.
-Se ve que eres encantadora con los animales- dijo Alan sarcásticamente mientras levantaba a Pip.
-Lo siento... Es que los animales no hablan en donde provengo- mencionó Gina arrepentida.
-¿En serio? Aquí es normal que algunos animales hablen.
-¡Aunque ése lugar era horrible!- lo interrumpió Pip muy enojado- ¡Tienes suerte de que no me rompí ni un hueso, niña, sino te demandaría!
-¡Lo lamento, en serio!- insistió Gina muy asustada.
-No te preocupes, menos mal que eres la hija de mi amiga Giselle- dijo Pip de manera en que ella se tranquilice y de forma amable.
-Pues... Genéticamente tengo suerte- se rió insegura.

En ése momento, dos chicos se dirigían hacia ellos. Uno era un niño que estaba corriendo, mientras que el otro tenía aproximadamente la edad de Gina y Alan dirigiéndose calmado y apresurado a la vez.
-Oigan ¿Se encuentran bien?- dijo el niño deteniéndose junto a ellos- Oímos a alguien gritar y estoy seguro que provino de aquí.
Alan miró a Gina sonriendo. Ella entendió que no les diría que fue ella quien gritó.
-No, creo que fue alguien más- respondió Alan.
-De seguro fue Audrey mirándose al espejo- dijo el otro chico acercándose hacia ellos.
-¡O tal vez fue Chad asustado por una mancha en su traje!- agregó Alan riéndose, haciendo que Gina se ría aunque no supiera de quiénes estaban hablando.
-Por cierto... Chicos, ella es Gina... Gina, ellos son mis amigos- dijo Alan al dejar de reírse.
-El niño nerd es Andrew y el otro alto y serio es Daniel.
-¿Niño nerd? Al menos soy más listo que tú- le respondió Andrew a Alan.
-Pero ¿No eres un poco joven para estudiar en una preparatoria?- le preguntó Gina a Andrew.
-En realidad estoy terminando la secundaria y pienso estudiar aquí- le contestó Andrew.
-¡Pero lo importante es que ya todos estamos aquí reunidos para recibir a los nuevos estudiantes de Auradon!- agregó Alan con disgusto y cambiando de conversación.
-A todo esto, ¿Quiénes son los "nuevos estudiantes" que tanto están hablando?- preguntó Gina disgustada.
-Son los hijos de los villanos que provienen de la Isla de los Perdidos- le contestó Daniel mientras que Andrew y Alan se veían disgustados.
-¿En serio? ¿Isla de los Perdidos? ¡Quiero ir!- dijo Gina muy entusiasmada viendo hacia atrás hacia el horizonte.
-¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!- gritaron Andrew y Alan al mismo tiempo muy sorprendidos.

-¡Ni siquiera tienes ni veinticuatro horas aquí en Auradon!- le reclamó Andrew.
-¿Por qué? ¿Hay algo malo en esa isla?- preguntó Gina.
-¿No escuchaste la parte de los villanos, verdad?- agregó Alan.
-Bueno, pero... ¿No se han preguntado cómo se sentiría vivir en ésa isla?- les preguntó Gina a los tres- Además, si voy a vivir en este mundo a partir de ahora, necesito conocerlo más yendo a todos los lugares que hay.
-Para eso están tus clases de-
-En realidad, no es mala idea ir a ésa isla- lo interrumpió Daniel- tal vez allá se dieran cuenta de que existo.
-¡¿Es en serio?!- se sorprendieron los tres restantes al mismo tiempo.
-Si es que no te importaría que te acompañe- dijo Daniel dirigiéndose a Gina.
-No, está bien... No me molestaría- contestó ruborizada.
-Será mejor que también los acompañe, necesitarán el cuidado de un adulto- argumentó Pip mientras saltaba al hombro de Gina- Y te recomendaría que dejes aquí tus cosas, no vaya a ser que el Hada Madrina sospeche- le argumentó a Gina.
-Supongo que tienes razón- respondió dándole a Alan su única maleta.
-De acuerdo, pero ¿Que haremos nosotros?- preguntó Andrew refiriéndose a él y a Alan.
-Hagan lo posible de que no se den cuenta de que ella se fue- respondió Daniel.
-Suena sencillo- agregó Alan como si lo hubiera hecho antes.
-Es fácil para ti decirlo, ¡tu padre era un ladrón!- dijo Andrew muy nervioso
-Tranquilo, vamos adentro a dejar las cosas de Gina a su dormitorio y cuando volvamos aquí, será como si éste asunto no hubiera ocurrido- dijo Alan yéndose con Andrew hacia la escuela dejando a Gina y a Daniel solos.

-Entonces ¿Cómo llegamos allá?- le preguntó Daniel a Gina.
-Bueno... El conductor de la limusina, que me llevó aquí, mencionó que iría a recoger a otros chicos, así que... Podemos escabullirnos en la limusina- sugirió Gina.
-Es buena idea.
-Y tenemos suerte que la nueva limusina no se ha ido- argumentó Pip cuando se metió a la pequeña bolsa que traía Gina.
-¿Entonces qué esperamos?- dijo Daniel corriendo hacia la limusina mientras que Gina lo seguía.

Descendientes: Historia AlternaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora