Quédate conmigo #2

Mía otra vez.

- Va a venir, seguro. - digo nerviosa mirando por la ventana.

- Claro, esperaremos. - dice Corina frotándome el brazo.

- Tranquila. - Alicia no parece muy convencida.

- Seguro que ha pasado algo, me prometió que vendría. - Mi voz suena más triste de lo que quiero, ni yo misma me lo creo.

- Si quieres podemos empezar nosotras y luego se lo explicáis vosotras, no es muy ortodoxo, pero es la única solución que veo.

- Claro, Len, ya se lo explicaremos luego. - Corina me da la mano y tira de mi para que me siente a su lado.

Oculto mi frustración y tristeza para escuchar a la abogada. Miro mi móvil para ver si Alex ha devuelto alguna de las doce llamadas que le he hecho yo.

Me siento derrotada y frustrada, Alicia comienza a hablar de cómo yo tenía que afirmar en todo momento que Alex estaba presente el día del accidente. Cuando ya ha acabado con nuestra parte Tomás, Dani y Tania entran en el bar.

La mirada de Tania me atraviesa asesinándome.

- Buenos días. - saluda Tomás cortésmente, como siempre. No se le pasa por alto mi cara, ya que me da un abrazo y me dedica una sonrisa para darme fuerzas.

- Hola, preciosa. - Dani se sienta a mi lado y pone una mano en mi muslo, yo doy un respingo y se la aparto de inmediato.

- Bien, ya estamos todos. - Alicia carraspea. - Soy Alicia Santamaría y voy a defender a Alex Sáenz. entiendo que, al venir estáis dispuestos a ayudarle, Elena ya os debe haber puesto al tanto de la situación.

- Claro, queremos ayudarle a librarse del lío en el que nuestra querida Elena le ha metido.

La miro, pero no digo nada, lo siento todo muy lejano. Hay un largo silencio en el que la gente espera que diga algo, pero Alicia rompe el silencio.

Se pone a hablar con ellos de cómo tenían que actuar en el juicio y ninguno pone problema alguno. Le doy las gracias a Alicia cuando termina y mientras se despide de los demás me apresuro a salir fuera para respirar aire puro.

- ¿Dónde está Alex? - pregunta Tania detrás de mí.

- No ha podido venir. - me cruzo de brazos a la defensiva.

- Entonces no sabe lo que vamos a hacer por él.

- Sí que lo sabe.

- Y dime, ¿qué saco yo con esto?

- ¿Qué?

- No pensarás que voy a hacerlo sin sacar nada. - se mofa ella.

- Lo haces por Alex.

- Si quieres ayudar a Alex deberíamos hablar sobre contentarme, sabes que basta que el día del juicio diga dos palabras para que no vuelvas a ver a Alex nunca.

- No te atreverás. - gruño acercándome a ella.

Justo en ese momento aparecen todos tras ella.

- Ponme a prueba. - me reta con la peor cara de mala que he visto nunca.

- ¿Qué está pasando? - pregunta Corina poniéndose a mi lado.

- Nada. - digo sin dejar de mirar a Tania.

- No importa, ya hablaré con Alex y le diré qué puede hacer para contentarme.

- Eres una zorra. - maldigo dando un paso hacia ella, ella hace lo mismo hacía mí y Corina me coge para que no me acerque más. Tomás hace lo mismo con Tania.