~ Capitulo 21~

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Todavía no procesaba el hecho de que esa mujer andará rondando por la casa, disfrutando de Kendrick, mientras yo no salgo de mi habitación por evitar mirarlos. Desde hace una semana supe que Kristen era la novia de Brad, desde ese día no he salido de mi habitación, siento que no estoy preparada.

Mi puerta fue tocada, me paré de la silla del escritorio, sin muchas ganas la abrí y mis ojos se engrandecieron al ver a Kendrick.

—¿En que puedo ayudarle?— Forcé una sonrisa, el seguía mirándome sin expresión alguna, típico como lo conocí.

— No ha subido al laboratorio y tengo prototipos que hacer, necesito presentarlo para el contrato europeo— Dijo mientas jugaba con sus manos dentro de sus bolsillos.

— Disculpe, ahora subo— Dije y me quede esperando a ver si tenia algo mas que decir, el solo asintió y salió del pasillo para bajar las escaleras.

Mientras estaba sentada en el escritorio, miraba el holograma, con mis dedos moviéndose en el aire buscaba especificaciones del producto, mientras ensamblaba piezas. Me pasé semanas tratando de armar el producto, me concentré bastante en estos días, en realidad me interesa mucho de que a Kendrick le acepten el contrato, porque así me beneficio yo también. Me la pasaba leyendo, investigado, construyendo, incluso llegue a apuntarme en una clases de software.

Me aliste para ir a las clases, tuve que tomar el Bus ya que Richard es el nuevo chofer de Kristen. Lo único que debía de caminar unos cuantos minutos, porque la parada no quedaba justo frente al instituto. Miraba mi reloj porque estaba algunos 20 minutos tarde y cada minuto en ese instituto cuenta.

Abrí la puerta despacio y pude ver que las luces estaban apagadas, solo se alumbraba un poco por las pantallas de las computadoras y del proyector. Buscaba con la mirada un asiento libre, pero en la primera fila vi como una mano se balanceaba de lado a lado, ese chico rubio y ojos marrones que se ha echo un buen compañero, no dude en sentarme a su lado y lo salude rápido mientras sacaba mi computadora de la mochila.

Llegué en la noche con la lengua casi en el suelo, ya que tenia que quedarme haciendo un trabajo que nos habían puesto, de practica, cuando termine ya había perdido el bus que me acercaba a la ciudad, busque mi monedero para pedir un taxi y adivinen, lo deje en casa, así que camine. Cerré la puerta recostándome de ella y tirando un gran suspiro, estaba sudada, echa un desorden. Caminé hacia la cocina y busque una botella de agua, la destape y me recosté de la meseta.

—¿Donde estaba?— Preguntó una voz entrando a la cocina, giré mi vista hacia donde provenía y no me sorprende ver a Kendrick allí.

— Clases— Dije cortante para luego tomar de nuevo de la botella.

— Ya no está en la universidad— Comentó jugando con un lapicero entre sus manos, yo arquee una ceja.

— Eso no significa que no puedo empezar cursos— Dije algo sarcástica.

—¿Esta tomando un curso?— Preguntó algo sorprendido, yo solo asentí. —¿Por que?— Pregunto curioso.

— Porque el trabajo que me esta mandado a hacer amerita que tome clases de software, ya que antes usted se encargaba de esa parte, pero ahora eso paso a mi— Dije sin mucha importancia.

—¿Por que esta toda sudada?— Preguntó después de analizarme bien con su mirada.

— Porque perdi el ultimo autobus, deje mi monedero en casa para poder pedir un taxi, así que no tuve de otra que caminar ¿Otra pregunta, señor?— Dije algo frustrada. ¿Porque todas estas preguntas?. Su mirada se ablando, sus ojos miraron hacia otro lado y tiro un leve suspiro, luego volvió a fijarse en mi.

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—Deje las clases, prometo ayudarle.

— Gracias, pero ya las pague, no me reembolsan— Dije tomando otro trago de agua.

— Mándeme la factura, se lo pagare yo—Dijo metiendo las manos en sus bolsillos.

—¡Brad!— Una voz grito su nombre, provenía del segundo piso, los dos sabíamos muy bien quien era.

—Lo buscan— Dije señalando las escaleras.

— No deje de mandarme la factura, por favor— Dijo esto sin antes mirarme bien, darme una sonrisa y desaparecer por las escaleras.

Tome una ducha, me vestí con algo cómodo, subí al laboratorio y empece a trabajar, tenia muchas cosas que hacer. Me pasé la noche entera entre las maquinas, mire el reloj y eran las seis de la mañana. Tenia los ojos quemados, quería descasar. Recosté mi cabeza sobre el escritorio y cerré mis ojos por un momento.

No sabia cuanto había dormido. Abrí mis ojos despacio y mientras mi vista aclaraba pude ver a Kendrick en su escritorio, estaba tomando su café, mientras que con su mano libre lo veía usar la computadora, el noto que alguien lo miraba fijo, así que su mirada se planto en mi.

— Buenos Días— Saludó con una media sonrisa.

—Buen día, disculpe que me quede dormida— Me disculpe mientras me reincorporaba en la silla.

— No se preocupe, puede irse a descansar, tómese el día— Dijo mirando la pantalla del computador.

— Gracias— Dije antes de pararme del asiento y dejarlo solo en el laboratorio.

Cuando vi mi cama, mi cuerpo se lanzo allí y con las sabanas se envolvió, sin pensarlo mas caí rendida.

...

Pasan los días, estoy con el tiempo ahogándome, tenia muchas cosas que hacer, pero saque el tiempo para poder ir a ver un departamento con Trend.

El estaba aparcado frente a la casa de Kendrick, entré en su vehículo, cuando me senté y miré hacia el, estaba hermoso, vestía con una camisa ajustada negra, unos jeans ajustados oscuros y unos lentes.

—Hola, hermosura— Me saludo mientras me plantaba un sonoro beso en la mejilla.

—Hola, T, estas radiante hoy— Dije sonriendo.

—Gracias— Dijo limpiándose los hombros, yo solo reí.

Fuimos a ver los apartamentos, a decir de verdad Trend busco unos departamentos demasiados sofisticados, en barrios muy buenos, con vistas hermosas. La cosa es que cada vez que nos mencionaban el precio era algo que se salía, pero muy lejos de mi presupuesto, Trend parecía no molestarle. Luego de ver todas las ofertas, Trend y yo nos sentamos en una cafetería a hablar sobre las opciones.

— La que me gusta es esta— Dijo Trend observando la hoja del Penthouse, con una hermosa vista y comodidades increíbles.

—¡A mi igual! pero esta algo alto para mi— Dije haciendo una mueca.

—Recuerda, no estas sola, es para los dos, si unimos el tuyo y el mío podríamos adquirirlo— Dijo sonriéndome. —Quiero verte feliz— Dijo mientras acariciaba mi mano encima de la mesa.

...

Desde hace unos días he intentado dar mi mil por mil, ya se han cumplido varios meses desde que empecé a trabajar con el proyecto, finalmente lo había terminado. Lo verificaba mientras estaba en el laboratorio, todo estaba perfecto.

Salí del laboratorio feliz, quería ver la reacción de Kendrick, así que caminé hasta la oficina de la casa, donde se encuentra la biblioteca. Abrí la puerta y me pegué el susto de ver a Kristen en las piernas de Brad besando sus labios, mi cuerpo se adormeció, mis mejillas se enrojecieron, ellos al instante se despegaron y ella me miraba con cierto disgusto, en cambio Kendrick no, se sentía avergonzado.

—Perdona por la interrupción, yo solo quería mostrarle el producto— Dije levantando mi mano que sostenía el teléfono.

—Pues debiste tocar antes— Dijo sarcástica la rubia malcriada sentada en sus piernas, yo arquee una ceja y Kendrick la miro rápido.

—Dame un momento, Kristen— Dijo Kendrick.

—¿No me puedo quedar?— Dijo intentando sonar dulce, yo solo rodee los ojos.

— No, espérame luego— Dijo intentando que se pare de sus piernas, ella antes de pararse le dio un buen beso en sus labios, yo solo trague en seco. Caminó por mi lado chocando su hombro con el mío.

—Disculpa, por eso, acércate— Dijo raspando su garganta. Yo me acerqué al frente del escritorio y me senté en uno de los asientos. Sin decir nada, deje el producto en la mesa.

—Debo de decir, que estoy impresionado— Dijo mientras seguía mirando el teléfono. —Haz echo un excelente trabajo— Dijo mientras seguía utilizando el teléfono celular que habíamos creado.

—Gracias— Dije aun un poco dolida por lo que acaba de ver hace unos minutos.

— Enviaré esto, cuando obtenga la respuesta te aviso, mientras, tomate unos días de vacaciones, te lo mereces después de estar trabajando tan fuerte— Dijo sonriéndome, yo sonreí forzada, no quería tampoco que supiera que sufría por eso, si tengo orgullo.

—De acuerdo, nos vemos— Dije antes de irme por la puerta.



5 días después...

Alguien toca mi puerta, yo me levanto de la cama y abrí la puerta, Kendrick estaba allí con una sonrisa preciosa, yo se la devolví.

— No daré vueltas, envíe el producto y a los interesados les gustaría vernos en persona, así que haz tus maletas para mañana, nos vamos a primera hora de la noche a Francia— Dijo emocionado, yo salte de la emoción y sin previo a pensarlo lo abrace, el recibió mi abrazo, nos despegamos y sus ojos brillaban.

Una ayudante para el sr. KendrickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora