Querido silencio:
Volvemos a lo mismo, tú y yo, con ira dentro de mí y tú susurrando el más sincero consuelo.
Ya ni espero que perdones mis gritos, no espero que aquellos que profirieron ésos insultos se arrepientan, sé que no lo harán, se sumergirán en la ignorancia y volverán a hablarme normalmente. Se dice que hay cierta verdad en palabras llenas de enojo, entonces soy una mala persona, según ellos.
Una egoísta.
Una hipócrita.
Una débil.
Una mierda.
A mi criterio no es verdad, no lo soy, antes lo hubiera creído, ahora no.
Dejaron de importarme las palabras de los demás, he sufrido tanto por aquellas estupideces que ya ni las siento, pues comprendo que ellos son lo que dicen; sus mentes están tan putrefactas de odio que sólo logro sentir lástima, su seguridad en tan frágil que unas cuantas verdades harían de sus ojos unas cascadas sin fin.
He dejado salir todo lo que tenía dentro, no me permití flaquear ante posibles sentimientos de culpa. No hay que sentir culpa, ellos no tendrán piedad conmigo, yo tampoco con ellos, es lógico. Hay que aprender a ver en la decepción para salir ileso.
Aprendes a ser indiferente a daños cuándo los demás dejan de ser héroes y/o amigos para convertirse en simples personas.
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Érase una vez...
PoetryÉrase una vez... Un alma capturada, Una mente cerrada, Un corazón sin amor, Que una vez encontró a las letras, Su alma liberó, Su mente abrió, Y su corazón amó, Pues las letras que escribió, En historias que sufrió y vivió, Se llevaron su dolor. Rec...