Capitulo #30

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-Ese traje me mata, eres tan hermosa.- me decia Ross. Era extraño, realmente extraño escucharla decir esas cosas.

-Renata y tu. ¿Que opinas?-

-No tengo nada que decir. Estoy impactada.-

-Las amo, realmente son mis mejores amigas y aunque me voy por bastante tiempo espero que no nos falte la comunicación y que tu, Ross le des muchos besos a mi ahijado hermoso. Son mi familia y la han sido por mucho tiempo. Fueron una bendición a mi vida.-

Las puedo ver como están a punto de llorar.

-Ya, solo voy a casarme. Bo vayan a llorar.-

Y de momento entra mi mamá y mi suegra.

-Mamá no vayas a ...-
No vale la pena decirle nada porque justo ya está llorando.

-Hija, soñé con este momento por mi vida netera. Te ves hermosa. Ven abrázame. - y ella enserio lloraba.

________
Estoy bajando las escaleras de nuestra casa. Allí esta nuestra familia. Y me esperaba Gabriel para entregarme hasta que el papá de Julian llegó.

-Ese muchacho piensa que te arrepentiste. Está a punto de llorar. Me tiene loco, dime que vas a salir.-

Comienzo a reirme a carcajadas.

-Ya voy a salir pero venga, póngase junto a Ana.-

-¿Yo tengo que defilar?-

-Pues claro.-

La boda era en el gigante patio se nuestra casa. Primero saliero los padres de Julian. Luego salieron mis niñas, tan bonitas con sus trajes corales largos y descubiertos a la vez. Luego estaba el sobrino de Julian con un cartel que decía que ahí venía la novia. Podía ver a Julian desesperado por virar pero aún no podía. Tenia el velo cubriendo mi rostro y a mis ambos lados estaban mi mamá y Gabriel. Estaba llegando a donde él. Viró su rostro a donde mi y comenzó a llorar. Me abrazó fuerte.

-Te ves hermosa.- y me sonreí. El pastor comenzo la ceremonia.

-Estamos aqui presentes y unidos para celebrar el matrimonio de esta pareja.- y siguió hablando. En un abrir y cerrar de ojos nos pusieron los anillos en las manos. Julian colocó el anillo hasta la mitas de mi dedo y comenzó a hablar.

-Yo, Julian Rodriguez te prometo a ti Victoria Hamilton a unirme en sagrado matrimonio para cuidarte y respetarte, amrte por siempre en la salud y en la enfermedad, en la tristeza y en la pobreza hasta que la muerte nos separe.-

Y colocó el anillo en mi dedo. Era hermoso.

-Yo, Victoria Hamilton te prometo a ti Julian Rodriguez a unirme en sagrado matrimonio para cuidarte y respetarte, amrte por siempre en la salud y en la enfermedad, en la tristeza y en la pobreza hasta que la muerte nos separe.-

-Los declaro marido y mujer hasta que la muerte los separe. Que lo que Dios acaba de unir, no lo separe el hombre. Julian, puede besar a la novia.-

Y emocionado me dio un tierno beso en mi boca. Todos se pararon y comenzaron a aplaudir.

______
La fiesta está muy buena. Estoy tan nerviosa por lo que va a pasar ahora. Estoy en mi cuarto cambiandome de traje a un pantalón y una blusa más informal. Abajo está la ropa interior sexy que voy a usar.

-Por Dios joven, pero que sexy.-

-Ross, callate. No se qué hacer.-

-¿Quieres que te de una clase de sexualidad ahora? ¿Justo ahora que estas a punto de irte con tu esposo a hacerlo?-

-No seas pendeja, no te pregunté como se hace. Lo se bastante bien idiota.-

-Pues perfecto. Llevas más batas preciosas en tu maleta y los vas a volver loco.-

-Deja de ponerme tan nerviosa. Ya recoge todo y ayudame a bajarlo.-

La gente aún seguía pero la idea era que ellos se quedaran a seguir disfrutando. El viaje de nosotros era largo y cansaba. Mi esposo tenia un pantalón mahón y una camisa pegada. Precioso.

-¿Lista para irnos?-

-Vengo a poner la maleta, deja despedirme de mi mamá. No la voy a ver por largo tiempo.-

-Claro, yo me voy a despedir también.-

Terminé de poner las maletas con ayuda de Julian. Sali corriendo a donde mamá que lloraba en gran cantidad.

-Mamá ya verásque el tiempo pasará rápido. -

-Hija, son muchos meses. Te voy a extrañar tanto.-

-Te amo mucho. Disfruta cada momento madre. Gabriel, cuidala. Te quiero mucho.-

Busqué a Julian con la vistay estaba con su madre y su padre. Su hermana lloraba en su hombro. Me daba pena ver todo esto. Es cierto, nos iríamos por mucho tiempo de este estado pero volveríamos cuando acabara la pelea.

-Hija, cuidense mucho. Los amo- me decia Ana mientras la abrazaba y sus lágrimas caían.

-Mamá, tranquila. Te espero en mi pelea.-

-Hijo, haré lo posible por estar allí. Te amo.-

Y salimos. Nos montamos en el auto y lo pusimos el auto en marcha.

-¿Estas bien?- me preguntó Julian preocupado.

-Me duele ver a mamá y a Ana asi. Las voy a extrañar tanto.-

-Vamos a volver mi amor. Sanos y salvos.-

La pelea de mi vida (corrigiendo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora