El gay de mi novio

2: ¨El hombre escalofriante¨

El sol se había escondido, la noche era fría y tenebrosa, se escuchaba el rugido del viento junto a mi respiración entre cortada debido a que mis pasos eran rápidos. Las hojas de los árboles flameaban para todas partes. Un trueno retumbo por toda la ciudad, las gotas de agua empezaron a caer lentamente evaporándose cuando tocaban el asfalto aún caliente, la lluvia era finita y eso me agradaba mucho. Al girar a la esquina pude notar como alguien se escondía a unos cuantos metros detras de mí. Mi corazón empezó a latir muy rápido. Demasiado. Ahora no solo esuchaba mi respiración agitada, la lluvia al chocarse con el asfalto y mis pisadas apuradas, si no que tambien escuchaba detrás mío pasos pesados... ¿A qué se refería Sarah cuando me dijo que nadie me siga? ¿ella ya sabía que alguien me iba a perseguir?

Decidí caminar mas firmemente y rápido para llegar lo antes posible a lo de Sarah, los pasos de ese alguien tambien aumentaban la velocidad. Correr fue mi mejor opción.

-Oye, espera- Gritó un hombre con voz áspera y rasposa, una voz tan grave que si en este momento no tendría tanta adrenalina dentro de mí, me hubiera desmayado. Siento que esa voz ya la había escuchado antes...me suena muy familiar pero no podía recordar, y tampoco era el momento. Mis piernas no dejaban de correr, aunque algo me decía que las frene, no lo hice.-Necesito tu ayuda- escuché como gritaba,lo cual ignoré completamente. La voz le había cambiado, era aún mas grave y ronca.

La casa de Sarah se encontraba a una cuadra, lo cual parecía el camino mas largo del planeta tierra. Mis piernas seguían por si solas, a una velocidad increíble, al dejar de escuchar los pasos de la persona que me seguía giré un poco la cabeza para comprobar que ya no estaba. Y así era, ya no se econtraba nadie detras mío, ni un perro, ni una persona encapuchada, ni un hombre-lobo, solo se veía la soledad de esa vereda. Miré a todos mis costados y no encontré rastros de nadie escondido detrás de un árbol o de un auto, es como si se hubiese teletransportado. Mis piernas todavía seguían corriendo aunque parecía que nadie nunca me hubiera seguido... ¿Había sido mi imaginacíon?

Al llegar a lo de Sarah, toqué la puerta inquietamente. Para comprobar de nuevo me dí media vuelta para ver si había alguien, pero no era asi, el vacío junto con la lluvia gobernaba las calles.

-Gemma, la transpiración se te huele desde acá- Dijo Sarah apenas abrió la puerta. Me hubiera reído si un hombre con voz de un asesino serial no me hubiera estado siguiendo y diciendo que necesitaba de mi ayuda, entré rapidamente mientras cerraba la puerta.- Oye encerio, ¿me vas a decir que te pasó?, estas muy pálida y transpiras mas que mi abuela cuando juega a la Wii.

Decidí ignorar las preguntas de mi mejor amiga y ir directo al grano.

-¿Qué te sucedio a ti?, me has enviado el mensaje mas turbio de toda mi vida y te veo cara de contenta- Dije mientras me sentaba en el sofá que se encontraba en la sala, recuperando el aire.

La sonrisa de Sarah se agrandó y sus mejillas se ruborizaron- Dave me invitó a una cita, ahora, dentro de minutos...- dijo antes de morderse el labio.

-¿QUÉ?- pregunté exaltada, no sabía si lo dije o por enojo o por emoción.- ¿SOS JODA SARAH?- le gritaba mientras ella se encojía.-¿POR QUÉ MIERDA NO ME LO DECÍAS EN EL MENSAJE? DIGO, UN POCO MAS ESPECÍFICA, O SIMPLEMENTE ALGO QUE NO DE MIEDO.- respire- ME IMAGINABA QUE LLEGARÍA Y ESTABAS TIRADA EN LA CAMA CON QUINIENTAS CUCHILLAS EN LA GARGANTA.

-Solo... cálmate ¿sí?- quedó pensativa- Tenía que apurarte de alguna manera, y si te decía que era para una cita ni bola me hubieras dado en cambio...- miró su reloj- te has demorado nada mas que doce minutos desde que te envié el mensaje.

- Vamos a ver la ropa- Le cambié de tema antes de darle un puñetazo, ella simplemente sonrío mientras aplaudía feliz.

Algo no me cerraba en todo eso ¿Quién era el chico que me había estado siguiendo? ¿Qué quería? ¿Fue producto de mi imaginación?, decidí guardármelo y no contarselo a nadie. Aparte nadie me creería, pensarian que estoy loca o que estoy aburrida y se me da por inventar historias.