Only You

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Al entrar al salón, prácticamente todos se mataban por conseguir buenos lugares. Miré a mis amigas que iban detrás de mí, hice una mueca y dirigí mi vista a la fila de la pared, estaba vacía. No era novedoso, ya que todos odiaban sentarse allí por el calor. Apunté con mi dedo índice a la fila y caminé hacia allí, seguida por Harper y Amber.

Me senté en el segundo asiento, Amber un asiento después y Harper en un asiento de la otra fila, al lado de Amber.

Cuando terminaron de entrar todos, un chico de tez clara, cabello castaño y ojos color miel (eso suponía, no lo había visto tan de cerca) se sentó delante mío. Luego un chico, al menos dos cabezas más alto que yo, saludó a este que se había sentado delante de mí con el típico saludo de puños, se sentó al lado de su asiento pero en la otra fila. Tenía algunos lunares, el cabello castaño oscuro ondulado y ojos verdes.

Había dos opciones o eran alumnos nuevos o eran del otro curso. Pero como se conocían lo más probable era la segunda opción.

Miré a mí alrededor y ya estaban todos sentados.

Luego entró un profesor y les dijo a todos que se callaran para que pudiera dar inicio a su clase. Primera clase, Geografía, que mala manera de empezar el año escolar.

Explicó varias cosas acerca de cartografía y lo que haríamos durante el año. Luego dijo que nos pondría en grupos. Sí, él iba a elegir los grupos, ya que obviamente quería que socialicemos. Miré a mis amigas y todas pusimos caras tristes, porque probablemente nos separarían.

Cuando dijo mi nombre, sentí que se me oprimía el pecho, como siempre que me llamaban los profesores, me ponía nerviosa. Tomé mis cosas y mientras caminaba podía sentir la mirada de todos posada en mí. Genial. Medio curso sabía mi nombre y me miraban mientras caminaba. No podía ser más incómodo. Lo único que podía hacer era apretar mis labios formando una línea y mirar hacia cualquier lado menos a mis compañeros, eso hice hasta que llegué con mi grupo.

La buena noticia era que estaba con dos compañeros de mi curso, dos chicos con los cuales me llevaba bastante bien, y después estaba ese chico que había visto antes, el de los lunares, y se había sentado justo enfrente mío. Se notaba que también estaba nervioso, ya que jugaba con sus manos y miraba el banco fijamente.

Después nos entregaron el trabajo y yo le repartí las tareas a cada uno de mis compañeros. Cuando terminé mi parte, revisé el trabajo del resto para ver si estaba bien, y así lo creía, entonces le dije al chico de lunares que le muestre el trabajo al profesor. Así lo hizo, se levantó y se lo mostró.

Cuando volvió, me habló y me dijo que el profesor había dicho que estaba bien, pero que debíamos poner los nombres de los integrantes. Tomé una lapicera y comencé a escribir los nombres y luego llegó el momento de preguntarle al chico su nombre.

—Tu... —dije llamando su atención y él levantó la vista — ¿Cómo te llamas?

—Isaac —respondió. Hice un gesto para que prosiga — Brown.

—Bien Isaac, —le sonreí —entrégale esto al profesor. Por favor —hizo una pequeña sonrisa y asintió.

Tomó el trabajo y se lo entregó al profesor. Justo a tiempo, ya que segundos después tocó el timbre, anunciando el final de la clase.

. . .

En la hora del almuerzo, junto con Amber y Harper, nos sentamos en un banco de madera que había en el patio.

— ¿Y qué les parecieron los nuevos? —preguntó Amber mientras abría su botella de gaseosa.

Harper se encogió de hombros mientras sacaba su almuerzo de una bolsa plástica.

—A mí me tocó con tres de ellos, ya que era un grupo de seis, y me cayeron bastante bien —comentó y luego le dio un mordisco a su sándwich.

—A mí solo me tocó con unos de ellos, se llama Isaac —comenté y tomé un sorbo de mi jugo.

Al escuchar ese nombre, Amber se atragantó.

— ¿Estás bien? —le pregunté y ella asintió.

—Estás hablando de... ¿Isaac Brown? —preguntó ella.

Fruncí el ceño, ¿cómo lo sabía? Asentí.

—Ese chico tiene mala fama. Lo sé porque antes me hablaba con una chica de su curso.

—Da igual —dije restándole importancia.

Cuando terminamos nos levantamos de nuestros asientos y caminamos lentamente hacia nuestra siguienteclase. Sonó el timbre, pero ya habíamos llegado al salón.

El día transcurrió normalmente, nada más fuera de lo común ocurrió. Mientras caminaba hacia mi casa pensaba en que quizás este año podría ser mejor que los otros. Ya que teníamos muchos compañeros nuevos, pero siempre va a haber alguien que te caiga mal, aunque sea un poco. Por ahora no me he topado con esa persona, pero quién sabe...

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Segundo capítulo ¿Qué les parece?

Ha aparecido Nat Wolff/Isaac Brown ;)))

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¡Besos!