Mi novio, un demonio | original [editando]

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*narra Meghan*
-Meg...es solo que...en verdad lo amo, no puedo vivir sin él- dice Mae mientras solloza, lo cual, me rompe el corazón en un millón de mini pedacitos.
-Tranquila Mae...al menos Damian te hizo feliz todo este tiempo y te ayudó a continuar con tu vida y dejar de vivir en el pasado...podrás superar esto- le digo para tranquilizarla un poco.
Cuando la logro calmar del todo Mae se levanta de la cama con la sábana enrollando su cuerpo desnudo y va directamente al baño a darse una larga y refrescante ducha. Pocos minutos después sale de esta y se viste con un hermoso vestido violeta con lunares blancos y unas zapatillas de color rosa fuerte. Ambas bajamos a desayunar ya que somos las únicas en casa, pero durante toda la comida Mae no alza la mirada y tampoco dirige la palabra así que empiezo a entristecerme por ella y también a preocuparme...sé que aunque ella haya prometido no volver a comunicarse con espíritus llegará un momento de la tristeza en el que ese impulso vuelva y la obligue a volver a jugar..así que cuando termino de desayunar subo rápidamente a su habitación decidida a encontrar esa asquerosa tabla para quemarla de una vez por todas. Busco bajo la cama de Mae pero no la encuentro... entonces es cuando empiezo a estresarme y a buscar esa estúpida tabla por todos lados sin conseguir hallarla. De repente recuerdo que en el ático es donde siempre guardamos todas las cosas viejas o que ya no sirven y se me ocurre buscar ahí pero cuando salgo de la habitación choco con Mae la cual con los ojos entre cerrados me pregunta que estaba haciendo dejándome muda por un par de minutos. Luego la esquivo rápidamente y corro hacia el ático mientras soy perseguida por Mae la cual parece que ya supiera lo que pienso hacer. Cuando entro en el ático lo primero que veo es la tabla colocada sobre una caja de viejas fotografías y la cojo entre mis brazos, cuando veo entrar a Mae la cual desesperada empieza a rogarme que no lo haga, pero aún así corro rápidamente hacia la sala y enciendo la fogata mientras que Mae baja las escaleras gritando y muy rápido. Cuando el fuego crece un poco más tiro la tabla hacia este mientras que Mae se detiene y mira a su tabla quemarse.
-¡Eres una idiota Meg...te odio!- grita Mae mientras corre hacia su habitación. Yo no le doy mucha importancia a lo que acaba de decir ya que sé que está enojada y la gente enojada no piensa en lo que dice.
Mae pasa todo el día encerrada en su habitación hasta que casi a las 6:00pm llegan mi madre y mis hermanas de la presentación de ballet de mi hermana Olivia.
*narra Mae*
Sigo muy enojada con Meghan pero sé que lo que ha hecho lo ha hecho por mi bien...
Cuando son las 7:00pm me siento en mi cama a esperar que Damian llegue. Cuando lo veo aparecer entre las sombras corro hacia él con una sonrisa y ambos nos abrazamos... luego me suelta y con una expresión de tristeza dice:
-Esta es la despedida Mae-.
Lo miro fijamente y a ambos se nos aguan los ojos y nos volvemos a abrazar esta vez más fuerte.
-No...no dijiste que te quedaba solo un día...tú dijiste que el día llegaría pronto pero nunca creí que ese pronto fuera tan corto- digo mientras muchas lágrimas escurren por mi rostro.
-Lo sé y lo siento...es solo que Zephyr me ha dicho que si volvía una vez más me quitaba mis alas y he desobedecido a su mandamiento solo para venir a despedirme de ti- dice mientras lágrimas negras llenan toda su cara.
-Mae...tú eres la mejor cosa que me ha pasado- dice Damian mientras levanta mi mirada hasta mirar mis ojos fijamente...
-Te amo...pero debes seguir con tu vida, sal y diviértete...aprovecha toda la vida que te queda por delante, conoce a un chico que te haga sentir mariposas en el estómago y cásate con él, ten 3,8,20 hijos...pero disfruta de la vida Mae...y sobre todo deja de vivir en el pasado-. Damian dice hasta hacerme sonreír como nunca antes lo había hecho.
-Te voy a extrañar Mae Henderson- dice con una gran sonrisa en su rostro...
-Y yo a ti Damian-. Eres el mejor demonio, novio y amigo que pude haber tenido-.
Ambos volvemos a besarnos mientras unas pequeñas lágrimas siguen cayendo de nuestros ojos y seguimos hablando por horas y horas.
-Ten...-dice Damian al entregarme un hermoso dibujo de mí misma.
-Gracias- digo con una dulce sonrisa y vuelvo a abrazarlo.
Pasan horas y más horas hasta que veo que son las 4:11am y comienzo a tener un poco de sueño. Damian y yo nos recostamos juntos en mi cama por última vez y él me rodea con sus alas para cubrirme del frío hasta que me quedo completamente dormida a su lado.
Cuando despierto a la mañana siguiente una pequeña sonrisa se dibuja en mi cara mientras una pequeña lágrima cae por mi mejilla. Me pongo de pie y en el suelo encuentro una hermosa pluma blanca la cual también guardo, junto a la negra, en el cajón de mi mesa de noche.
La verdad estoy muy triste de pensar que ya no volveré a ver nunca a Damian pero decido hacer lo que a él haría más feliz y sigo adelante con mi vida sin seguir viviendo en el pasado.