Imperfecto Crush

Capítulo 4

Capítulo 4

Thania.

Su boca era cálida, suena estúpido que yo piense así pero se sentía como estar besando una nube (? era una sensación fascinante, pero de un momento a otro comenzó a molestarme la familiaridad con la que me besaba ¿A cuántas chicas más habría besado de esta manera? corté el beso por que no podía soportar la idea de otros genes en mi boca, me miró sorprendido, cruzó los brazos en su pecho y me miró como esperando una respuesta, no quería hablar por miedo a sonar dolida
-¿Y bien vas a hablar o no? -dijo, cuando estaba por hacerlo sonó la campana, una rubia plastica salió corriendo y se lanzó sobre mi crush que ahora tenía nombre, y lo besó.
No era el mismo tipo de beso que habíamos tenido hace unos dos minutos, ese beso era algo más grotesco y ¿sexual? me sentí bastante estúpida cuando me di cuenta que estaba ahí parada mirando las lágrimas empezaron a arder en mis ojos, pero no iba a demostrar que él tenía algún efecto en mi, así que me fui caminando tranquilamente.
Cuando entré en la escuela escuché que alguien gritó mi nombre pero no podía ser él ya que nunca se lo dije y ahora por primera vez desde nuestro primer encuentro no me sentía estúpida, ni infantil ni mucho menos arrepentida por no haberlo hecho.
Fui hasta el baño de chicas más cercano, me encerré en uno de los pequeños cubículos azules y me apoye en la pared y lo único que conseguí hacer fue soltar un suspiro con el cuál aparentemente toda mi fuerza se fue y me deje caer hasta que acabe sentada en el piso con el corazón encogido y sintiéndome más estúpida que nunca en mi vida.
Conocía bastante bien ese sentimiento desgarrador que te deja sin habla y sin fuerzas, era el mismo sentimiento de perdida que sólo pude abandonar luego de meses después de aquel accidente, que se llevó la vida de mis padres y el novio irremplazable que fue, es y será siempre Scott.
No quería sentirme así y la culpa me venció, no podía comparar el amor que le tenía a mis padres y a Scott, con el enamoramiento temporal de un "Crush" cuando me sentí lista para poder salir y hacer como si nada pasó, mi celular comenzó a sonar era Sammuel.
-Thania ¿Donde diablos estás? ¿Te encuentras bien?
-Si, si estoy bien.
-¿Donde estas? ¿Estuviste llorando? -¡Demonios! se dio cuenta, odiaba eso de él
-No, es sólo que estoy algo agripada y es por eso que mi voz suena así.
-Estoy en la cafetería te espero aquí.
-Ya voy papá
-Prefiero Papacito, pero discutimos los apodos luego, apurate.
Y sin más colgó, limpié mis mejillas y cuando salí del baño, parecía que toda la escuela estuviera en ese pasillo, debido a mi escuálido cuerpo pude pasar más rápido que otras personas, al llegar a la cafetería busqué a Sammuel pero no podía encontrarlo, gracias a mi 1.60, Por fin pude ver a Sammuel en una de las mesas de la izquierda.
Y justo en una de las mesas del centro estaba él, mi crush, su presencia y sus acciones no iba a afectarme, ya no más, Gracias a Dios, estaba de espaldas cuando pasé junto a él y me dirigí hacia Sammuel que ya tenía dos bandejas en la mesa pero no con la típica comida de la escuela, si no con todos los dulces que más me gustaban, en serio amaba a mi amiga/amigo.
Cuando estuve cerca de él se levantó a abrazarme cuando termino el abrazo tomó mi rostro entre sus manos, me examinó muy preocupado
-¿Estas bien? Bort dijo que estuviste mal y fuiste a la enfermería, pero cuando tocó la campana y fui a verte no estabas ahí, mujer casi me muero de la preocupación
-Vale, vale estoy bien
-Hay alguien que te esta mirando allí atrás -dijo haciendo un gesto hacía la mesa que yo tenía a mis espaldas, ya sabía a quién se refería. Me giré para ver si era verdad, por que Sammuel estaba serio no tenía la tipica expresión coqueta de siempre. Volteé y si él nos estaba mirando, también bastante serio, volví mi atención a Sammuel y negué con mi cabeza restandole importancia y lo abracé
-No, ya no quiero saber de él. -Susurre
-¿Te hizo algo?
-Me besó, y luego tuvo sexo en ropa con una rubia en frete mío, lo normal. -dije de mal humor
-Esta bien, vamonos -Metió todos los dulces en una bolsa y enlazó mis dedos con los suyos, ambos sabíamos perfectamente por que lo hacía
En el último periodo no teníamos materias, era nuestra hora de recreación así que podíamos hacer lo que quisiéramos, decidimos ir al jardín trasero cerca del estacionamiento, le conté todo y lloré
lloré por todo en lo que no pude llorar en su momento, la muerte de mis padres y Scott, por lo patética que me sentía hoy, y él hizo lo que yo necesitaba, me escuchó pacientemente sin juzgarme solo abrazandome y secando mis lágrimas.
Cuando la campana sonó indicando que era hora de irnos, ambos nos levantamos y fuimos al estacionamiento, donde se encontraba la motocicleta de Sammuel, y otra vez apareció ahí
-Creo que el destino quiere que yo me suicide -le susurre a mi amigo en el oído y el río con su tipica sonrisa coqueta, como si le hubiera dicho algún cumplido, era por que nos estaba mirando
-¿Quieres que te lleve a casa?
-No, esta bien Haddly vendrá por mi, gracias
-¿Podemos hablar? -en ese momento sentí que algo frío pasó por mi columna vertebral, esa no era la voz de Sam, estaba en lo correcto era la voz de David quien estaba de pie a mi espalda esperando una respuesta, Sam me miró como esperando mi autorización o bien para quedarse o para irse, asentí en su dirección y se acercó para despedirse, le dió un beso a mi mano y luego me besó, fue algo cerca de la boca pero no en ella realmente. Y se fue con su sonrisa burlona y yo reí bajito
-¿Que pasa con toda esta escena?
-No creo que seas indicado para hablar de una escena. -Contraataque
-Tu no estas hablando de... -El sonido de mi teléfono lo hizo callar, era mi hermana quien había llegado por mi, ¡Nunca había amado tanto a mi hermana!
-Esta bien, ya vi el auto, voy.
sentí una mano aferrarse a mi brazo
-Estamos hablando
-Pues yo ya terminé y debo irme, así que agradecería que dejes de tomarme del brazo de esa manera
-No hasta que hables conmigo.
-Ya lo hice y ya terminé -antes de que pudiera reaccionar me solté de su agarre y me fui.
Suspire, que gran día pensé (nótese el sarcasmo) justo cuando terminaba de escribir todo y cerrar mi cuaderno, mi celular sonó era un mensaje
-Creo que nos debemos muchas explicaciones, D.
¿En serio no iba dejarme en paz?.