Kim
Sali de la habitación y mi movil sono con un miaguido dando a entender que tenia un Whatsapp.
Numero desconocido: Hola nena.
Yo: Mm no quiero sonar grosera pero... ¿quien coño eres?
Numero desconocido: Jimin, tu futuro principe naranja.
Yo: ¿Querias algo?
Jiminie♥: ¿Te apetece quedar?
Yo: ¿Donde y a que hora?
Jiminie♥: Sabia que aceptarias.
Yo: A que te bloqueo.
Jiminie♥: A las doce paso a por ti.
Yo: ¿Tan pronto?
Jiminie♥: Chao gatita.
Yo: Chao Jiminie.
Jiminie♥: ¿Como me llamaste?
Yo: ...
Jiminie♥: Llamame asi mas veces.
Yo: Adios.
Jiminie♥: Sosa...
Me fui a duchar y me mire al espejo. ¿Estaba sonrojada? Maldito idiota.
Escogí un vestido rojo claro con unos tacones a juego, mi bolso negro y me maquille con colores calidos. Creo que estoy decente.
El timbre sono y aparecio Jimin.
-Que guapa te has puesto para mi, ¿no? -Dijo silbando mientras daba una vuelta para que me viera.
-Tu no has quedado atras. -Dije mirandole de arriba a bajo. -Pero, no se te ven los abdominales. -Dije haciendome la decepcionada.
-No anticipes los acontecimientos. -Dijo mirandome pervertidamente.
-Seras idiota. -Dije empezando a caminar.
-Siempre seré tu idiota.
-¿A donde vamos a ir?
-Dejate dominar, yo te voy a llevar tranquila. -Dijo riéndose.
-Calla y domina.
-¿Te va ese rollo? -Dijo pasando una mano por mis hombros y mojando sus labios.
-Claro. -Dije pegandome a el, acortando la poca distancia que habia entre nosotros.
-Luego te llevo a mi casa. -Dijo susurrando en mi oído.
-¿Pudes dejar de acosarme? -Dije divertida.
-Me resulta totalmente imposible.
-Tonto.
-¿Y tu, puedes dejar de insultarme? -Dijo en el mismo tono en el que yo pregunte.
-Me resulta totalmente imposible. -Le imite.
A lo lejos se empezó a oir unos gritos. Lo que faltaba, fans.
Se acercaron un grupo de chicas. Yo rezaba por que pensaban que era otra persona.
-¡YOUNG KIM! -Dijo una chica de pelo corto.
-Hola. -Le salude.
-¿Te puedes sacar una foto conmigo? -Vale, son fans normales.
-Claro.
-¿Estais saliendo? -Preguntó otra chica.
-Ya me gustaria. -Contestó Jimin.
Le pegue en el hombro.
-¡Oye, ella me pregunto y le dije la verdad!
-Vamonos. -Dije entre dientes.
Llegamos a un retaurante bastante refinado y con un aspecto clásico.
Acabamos de comer y el se empeño en llevarme a su casa a ver una película.
-Entonces, vivís siete en un piso. -Dije riéndome.
-Somos muy unidos.
-Eso me gusta. -Dije triste.
-¿Que te pasa gatita?
-Mi grupo me odia.
-No digas eso, ¿Quien te va a odiar? -Dijo acariciando mi mejilla.
-Pues lo hacen.
-Yo creo que te tienen envidia.
-¿Envidia? ¿De que? -Dije riendo.
-De que me tienes ami y ellas no.
-Gracias.
-¿Por que?
-Por aparecer en mi vida- Pensé.
-Por nada.
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