La Nueva Civilización ⎜H.S ®

Capítulo 10

3º día de prueba

Desperté con la luz cegadora de la mañana, esto era realmente molesto. Sacudí levemente mi cabeza y abrí mucho los ojos, notaba como aún me pesaban los párpados, y me costaba manejar mi propio cuerpo. Decidí tomar una ducha con agua fría, pero me paré en seco cuando vi en la puerta de entrada de mi habitación una carta. La cogí, y en esta ponía:

Arianna,

Te dejo en la puerta un traje que todos los rebeldes llevamos puesto. Aunque aún no seas uno de nosotros, doy por seguro que te convertirás en una, sobre todo porque tienes un profesor tan fantástico como yo, si no veo que lo llevarías un poco difícil ya que cuando llegaste aquí no sabías ni utilizar un simple arco.

PD: Te espero después de desayunar en el campo de prácticas para trabajar con una nueva arma que nos han traído al Refugio.

Reí inconscientemente por lo de "tienes un profesor fantástico". Dejé la carta guardada en uno de los cajones de mi mesita de noche y abrí la puerta para encontrarme con una bolsa con un traje dentro. Era una simple camisa con un estampado militar con un signo bastante extraño bordado en el lado izquierdo del pecho; y los pantalones eran del mismo estampado. En realidad, no era una tela pesada, es decir, el traje estaba compuesto por una tela muy recurrente, como ligera. Pero, de repente noté una fuerte pulsada en mi pecho, y me encogí rápidamente. Fue una tremenda punzada en la parte del corazón, no dudé en pensar que era el chip. Mi cuerpo se erizó; necesitaba sacármelo, el dolor me estaba matando. Reprimí un grito y cerré los puños con fuerza, notaba como la sangre subía por mi cuello y como las venas sobresalían. Y entonces el dolor cesó y yo me tiré al suelo exhausta.

Cuando pensé que el dolor había cesado; volví a remontar mi rutina. Me dirigí al baño, pero antes me paré enfrente del espejo, toqué mi cabellera ahora natural, y suspiré aliviada. Ayer me sentía como una muñeca. Tomé una ducha con agua fría y me puse el traje que me había entregado Harry. Luego, me dirigí al comedor y después de desayunar fui directamente al campo de prácticas.

En la puerta de dicho lugar, empecé a buscar con la mirada a Harry. Mientras hacía esto, pude contemplar a miles de chicos, ya que la mayoría de las personas que había en aquel recinto eran chicos y utilizaban las nuevas armas. Eran realmente futuristas, tenían un recipiente de neón, y lo demás estaba hecho de una materia parecida, o igual, al metal. Entonces, vi a un chico haciendo gestos con la mano, era Harry; me dirigí lo más veloz posible a su dirección. Él tenía un arma de esas.

- ¿Me vas a enseñar a manejar ese "juguetito"? - dije sonriendo.

- Claro que sí. Tienes que estar preparada para la guerra - mis ojos se abrieron y me tensé rápidamente - Por eso todos los guerreros se están preparando.

- ¿Contra quién?

- Contra los Mördares.

- ¿Cuándo?

- Eso es información confidencial, pero puedo decirte que no es en un futuro muy lejano. Lucharás con nosotros, ¿cierto?

- Por supuesto - dije sabiendo que era completamente mentira.

- Bueno, te explico este "juguetito", como tu dices - sonreí, y él me devolvió la sonrisa - A esto se le llama Láser, aunque tiene diferente funciones. Es bastante simple, aunque a su vez, es bastante potente. ¿Ves este botón rojo? - asentí - si lo pulsas, sale un holograma que es algo parecido a un objetivo de una pistola, con lo que puedes disparar al sujeto desde más de 100 metros de distancia. Y esa pequeña palanca es para que puedas cambiar en dos opciones de disparo. La 1) en la que pone "LRS" es un láser - entonces, pulsó el botón rojo y salió el dicho holograma, y al disparar a la diana, el punto rojo desapareció. Sólo quedaba un poco de humo alrededor. Impresionante. Mi boca se abrió - Lo sé; increíble. Y la 2) "SMP" es un silenciador, nos vendrá genial para misiones imprevistas. Y luego esta el gatillo, que es simplemente para disparar. Bueno, esta entendido, ¿no?

- Lo has explicado muy rápido, pero bueno, por intentarlo.

Tomé el arma entre mis manos y pulsé el botón rojo, en el acto salió el holograma. Miré por el objetivo y me asombré al instante. Era simplemente increíble la calidad de imagen, es decir. Tú mirabas por la visilla y parece que la diana que tenia a unos 20 metros enfrente de mí, la tuviese justo en frente. Decidí probar primero el láser, ya que era el que más me llamaba la atención. Comprobé que la palanquita señalase a la opción del láser, y una vez confirmado, volví a mirar por el objetivo y disparé. El punto rojo de la diana quedó prácticamente difuminado. Abrí mi boca y grité un repentino "Uo" y comencé a reír. Esto era increíble, era asombroso. Harry aplaudió y dijo

- ¿No decías que lo había explicado muy rápido? Parece que lo has pillado muy bien.

- Tampoco es tan difícil - le respondí quitándole importancia. Bajé la palanquita y tomé la opción del silenciador.