Guerra De Vecinos

Capitulo 8

Narra Nathan

Después de comprar las cosas para vengarnos de las chicas fuimos a la piscina y escuchamos las risas de las chicas del otro lado de la cerca.

-¿Que pasa si por error escuchamos de que hablan nuestras queridas vecinas?- nos dijo Ivan.

-Supongo que no seria el fin del mundo- le contestó Logan acercándose a la cerca para escucharla.

Los tres nos acercamos a la verja como la primera vez que vimos a esas brujas que se hacen pasar por adolescentes.

-El pelo turquesa le quedaba muy bien a Ivan- escuchamos que se burló Savannah.

-Le quedaba divino- le siguió Marceline

En cuanto a Oliva, ella solo reía.

-Y Logan estaba hermosísimo con el cabello morado- dijo Marceline mientras reía

-Liv, ¿Qué te sucede? No dijiste ni una sola palabra desde que salimos a la piscina, ¿No te gustó la broma que le hicimos a los chicos?- le preguntó Savannah un poco más tranquila que antes.

-Seguro que le gustó teñirme el pelo de fuxia- les comenté a los chicos.

Pero para cuando volvimos a prestar atención a las chicas Olivia ya había contestado y se estaban riendo. Mierda, me perdí que dijo.

-¿Que les parece nadar un poco?- preguntó Savannah entrando a la piscina.

-Naden ustedes, hoy no tengo ganas de mojarme- le contestó Olivia tapándose más los brazos.

Después de espiar a las chicas por casi una hora volvimos a casa a preparar todas las cosas.

(...)

Llegada la una de la mañana nos escabullimos por la casa de las chicas para comenzar nuestro malévolo plan de venganza.

Al entrar a la casa nos fijamos en que habitación dormía cada una, después de entrar al cuarto de Marceline y Savannah encontre el dormitorio de Olivia.

Les dije en que habitación estaba Marceline a Logan y despues le dije la ubicación del cuarto de Savannah a Ivan...

-Comencemos- les dije a los chicos cuando ya todos estabamos en la puerta de la chica que elegimos para hacerle la broma.

Los tres abrimos las puertas y entramos haciendo el mínimo ruido posible.

Por mi parte saqué la crema depiltoria de mi mochila y le hunté a Olivia por toda la ceja derecha y después por toda la ceja izquierda.

Esperando que se seque la crema, saque toda su ropa interior de una cajonera en su armario y agarre su celular, los guardé en mi mochila, después saque unas cuantas prendas de su ropero y las empecé a escribir con un plumón negro como "No se metan con nostros" o " La venganza es un plato que se sirve frío", le debo haber escrito alrededor de diez remeras. Me estaba por ir de la habitación cuando me acordé que mi queridísima Olivia aún seguía con la crema en las cejas, así que con todo el cuidado del mundo paraque no se despierte le saqué la crema de la ceja izquierda y después de la ceja derecha.